Condado de la Puebla del Maestre

Condado de la Puebla del Maestre

Primer titular Alonso de Cárdenas y Portocarrero
Concesión Juana I de Castilla
1506[1]
Grandeza de España de 2.ª clase por Carlos III el 29 de junio de 1780
Linajes • Cárdenas (línea menor de los Portocarrero, señores de Moguer, y estos de la casa de Villena, con varonía Acuña y entronques Girón, Pacheco, Portocarrero y Cárdenas, cuya varonía era Haro)

• Corella (casa de Cocentaina)

• Cárdenas íterum

• Enríquez (con varonía Villalobos)

• Pacheco Portocarrero (casa de las Sirgadas, que venía por varonía de un hermano del I conde de la Puebla)

• Córdoba Lasso de la Vega (marqueses del Vado del Maestre, línea menor de los condes de Puertollano, con varonía Moscoso, colateral de los señores de Altamira, y entronques Lasso de la Vega y Córdoba, de los de los señores de Fuencubierta y Villaseca, cuya varonía era Suárez de Figueroa)

• Bernaldo de Quirós (línea descendiente de los señores de Olloniego, antes casa de la Pola de Lena, antes señores de Villoria)

Actual titular Francisco de Paula Bernaldo de Quirós y Fernández de Córdoba (XXIII conde desde 2004)
Bultos yacentes de Pedro Portocarrero el Sordo (c.1450-1519), VIII señor de Moguer y VI de Villanueva del Fresno, del Consejo de los reyes Juana I y Carlos I, alcalde mayor de Sevilla y de Jerez de los Caballeros, comendador mayor de Castilla en la Orden de Santiago, y de Juana de Cárdenas, su mujer (c.1452-c.1520), II señora de la Puebla del Maestre, hija del maestre de Santiago Alonso de Cárdenas, fundador de dicha puebla. Casaron en Valencia del Ventoso en 1473 y fijaron su morada en Jerez de los Caballeros, donde tuvieron por criado a Vasco Núñez de Balboa, futuro descubridor del Mar del Sur.[2]​ Procrearon numerosa prole, y hacia el año 1500 cedieron el estado de la Puebla propter nuptias a Alonso de Cárdenas y Portocarrero, su segundogénito (c.1475-1541), que en 1506 fue creado conde de la Puebla del Maestre por el rey Fernando el Católico. En 1514 fundaron cuatro mayorazgos en favor de sendos hijos del matrimonio, con facultad real. Mandaron labrar este sepulcro para su enterramiento en la iglesia del Monasterio de Santa Clara, del que eran patronos en su villa de Moguer.[3]Cepeda Adán lo describe como «uno de esos bellos sepulcros de la época que en sus cartelas nos hablan de campañas por las tierras granadinas y en la actitud de cuyos personajes descubrimos un gesto de melancolía y orgullo en chocante contraste».[4]

El condado de la Puebla del Maestre es un título nobiliario español, de Castilla, que desde 1780 comporta la dignidad de grande de España.

Fue concedido en 1506 por el rey Fernando el Católico,[1]regente por incapacidad de su hija la reina Juana I, en favor de Alonso de Cárdenas y Portocarrero, comendador de Mérida en la Orden de Santiago, señor de las villas de la Puebla del Maestre, Lobón, Villacelumbre y Castellanos, todas en Extremadura, reino de León y actual provincia de Badajoz, y de las de Gérgal, Bacares y Velefique en el reino de Granada y actual provincia de Almería.[5][6]

En 1625 el rey Felipe IV creó el marquesado de Bacares como título de espera para los primogénitos de esta casa, en cabeza de Diego de Cárdenas y Herrera, primogénito del IX conde, a quien sucedió doce años después.

Al condado de la Puebla del Maestre le fue otorgada la grandeza de España de segunda clase por el rey Carlos III mediante real decreto de 23 de abril de 1780 y real despacho de 29 de junio siguiente,[7]​ en cabeza de la XVII condesa,[8]​ Isabel María Pacheco Portocarrero y Cárdenas, XII marquesa de Bacares, IV de la Torre de las Sirgadas y consorte del IV del Vado del Maestre, poseedora de las aduanas y portazgos de la ciudad de Badajoz y del alferazgo de la de Jerez de los Caballeros.[5][9]

Parece que este título fue creado con la denominación original de conde de la Puebla de Llerena, que se mudaría después por la actual, o con la de la Puebla de la Fuente o la Puebla de Cárdenas, que indistintamente recibían los primitivos poseedores de la merced. Todas ellas aludían a la actual villa y municipio extremeño de la Puebla del Maestre, situada cerca de la ciudad de Llerena, en la provincia de Badajoz, y que debe su nombre a haber sido fundada (hacia 1483)[10]​ por Alonso de Cárdenas, abuelo materno del concesionario, capitán general de Córdoba y de Sevilla y último maestre de la Orden de Santiago. El Maestre obtuvo a perpetuidad el señorío jurisdiccional de esta puebla y su término por derecho de población.

Mayorazgo

El mayorazgo de esta casa, por el que se rige la sucesión del título, fue fundado en 1514 por Pedro Portocarrero el Sordo, VIII señor de Moguer y VI de Villanueva del Fresno, del Consejo de los reyes Juana I y Carlos I, alcalde mayor de Sevilla y de Jerez de los Caballeros, comendador mayor de Castilla en la Orden de Santiago, y por Juana de Cárdenas, su mujer, II señora de la Puebla del Maestre, hija del Maestre que fundó esta villa y castillo. Estos señores instituyeron cuatro mayorazgos en favor de sendos hijos del matrimonio por escritura que otorgaron en Villanueva del Fresno el 19 de diciembre de 1514, con facultad de los Reyes Católicos dada en Logroño el 15 de agosto de 1495. El segundo de ellos fue el de la Puebla del Maestre, por el que vincularon esta villa, con su castillo y coto redondo, en favor de Alonso de Cárdenas, su hijo segundo, a quien años antes se la habían cedido propter nuptias, y que ya era desde 1506 el I conde de la Puebla. Además de dicho estado, señalaron para integrar este mayorazgo las villas de Gérgal y Bacares en el reino de Granada, y la de Villacelumbre y el lugar y fortaleza de Castellanos en Extremadura; las dehesas de Palacio Quemado (en término de Alange), del Guijo (en término de Valencia de las Torres) y de Mexía (en término de Montemolín), las herrerías, casas, huertas, bodegas, batanes, molinos, tinte, viñas y tierras de pan llevar que poseían en San Nicolás del Puerto, corregimiento de Sevilla; 240.000 maravedís de juro situados en Llerena; las casas, huerta, mesones, tierras de pan llevar y molino que poseían en esta villa (ciudad desde 1640); el patronato de la iglesia de Santiago de Llerena y su capilla mayor, con la presentación de su curato, y el patronato de la capilla y capellanía fundadas por el comendador Garci López de Cárdenas en la iglesia de San Pedro de Ocaña.[11][12]

Señores y condes de la Puebla del Maestre

Titular Periodo
Señores de la Puebla del Maestre
(por derecho de población)
I Alonso de Cárdenas, el Maestre c.1483-1493
II Juana de Cárdenas 1493-c.1500
III Alonso de Cárdenas y Portocarrero (I conde) c.1500-1541
Condes de la Puebla del Maestre
(concesión de Juana I de Castilla)
I Alonso de Cárdenas y Portocarrero 1506-1541
II Pedro de Cárdenas y Figueroa 1541-1573
III Alonso de Cárdenas y Toledo 1573-1594
IV Alonso de Cárdenas y Mendoza 1594-1603
V Brianda de Cárdenas y Mendoza 1603-1604
VI Guiomar de Corella y Cárdenas 1604-1611
VII Luis de Cárdenas y Toro 1611-1612
VIII Alonso de Cárdenas y González 1612-1615
IX Lorenzo de Cárdenas Valda y Zárate 1618-1637
X Diego de Cárdenas y Herrera 1637-1659
XI José Alejo de Cárdenas Ulloa y Zúñiga 1659-1665
XII Francisca de Cárdenas Cabrera y Bobadilla 1665-1669
XIII Lorenzo de Cárdenas Ulloa y Zúñiga 1670-1706
«XIV» María Carlota Osorio y Cárdenas 1706-1707
XIV Catalina de Cárdenas Portugal y Colón de Toledo 1707-1707
XV Lorenza de Cárdenas Portugal y Colón 1707-1710
XVI Mariana Enríquez de Cárdenas y Portugal 1710-1761
XVII Isabel María Pacheco Portocarrero y Cárdenas 1762-1782
XVIII Francisco de Paula Fernández de Córdoba y Pacheco 1782-1824
XIX Francisco de Paula Fernández de Córdoba y Pacheco 1850-1858
XX Francisco de Paula Fernández de Córdoba y Montes 1859-1915
XXI Francisco de Paula Fernández de Córdoba y Fernández 1918-1956
XXII María Teresa Fernández de Córdoba y Castañeda 1958-2004
XXIII Francisco de Paula Bernaldo de Quirós y Fernández de Córdoba 2004-hoy
El maestre Alonso de Cárdenas, fundador y primer señor de la Puebla del Maestre, mandó las huestes de la Orden de Santiago durante toda la Guerra de Granada, obteniendo su más señalada victoria personal en Cártama (1485). En el año 1492, el anterior a su muerte, se halló en la toma de la ciudad de Granada por los Reyes Católicos, quienes en premio de sus servicios le repartieron las villas de Gérgal y Bacares en aquel reino.[6]​ Figura entre los confirmantes del privilegio rodado de las Capitulaciones de Granada, por lo que fue uno de los últimos ricoshombres de Castilla. El historiador Gonzalo Fernández de Oviedo, que siendo muy mozo asistió también a la culminación de la Reconquista de España, guardaba un vívido recuerdo de este magnate: «Y el maestre don Alonso de Cárdenas yo le vi en el Real que los Cathólicos Reyes don Fernando e doña Ysabel tovieron sobre Granada quando la ganaron; e después de la persona del rey e del príncipe don Johan, mi señor, este maestre era la persona más precedente. El qual fue valerosísimo, e su esfuerço e lança e autoridad estimado por uno de de los principales capitanes que en su tiempo España tuvo. E su casa e estado de renta e vasallos, la mayor de España después de la Real; e tan valeroso en sí, que por su proprio ser alcançó tan gran dignidad contra muchos e grandes competidores. E fue crudo cuchillo a los infieles del reino de Granada, y en aquella sancta guerra utilíssimo señor para ampliar la república christiana, porque fue muy venturoso en las armas e muy diestro en las cosas de la guerra, en tanto grado, que ninguno de los maestres pasados de su Orden le hizo ventaja. Y para colmar su buena ventura e loable fin, se halló en el çerco e Real de la gran çibdad de Granada cuando la ganaron los Reyes Cathólicos, año de 1492 años. En el qual exerçiçio sirvió mucho a Dios e a sus reyes con su persona e consejo, e con sus cavalleros, así de la Orden como de su casa, que fue la mayor e más importante de Castilla en aquel tiempo. [...] E muchos que oy biven, vimos acabar de destruyr e de estirpar la secta del abominable Mahoma en nuestra España, donde estaba arraygada desde el año de la Natividad de Christo de 720 años. En la qual conclusión de moros obró mucho la lança y esfuerço de este muy ilustre maestre. [...] Desde mançebo fue muy exercitado en las armas e cosas de la guerra, e muy bien quisto de los cavalleros de la Orden. [...] Yo vi la casa del maestre en el Real de sobre la gran çibdad de Granada, quando se ganó, e allí estuvo él en persona; e tenía sobre mil de cavallo su vandera, y en esos, muchos nobles cavalleros de su hábito. Y por cosa notoria os digo que su estado e casa del maestre era, todas las veces quel quería juntar de sus cavalleros de la orden e de su casa e a ella allegados e parientes e amigos, dos mil de a cavallo.»[13]La Rendición de Granada (1882), por Francisco Pradilla. Palacio del Senado (Madrid).
En la genealogía de los primeros condes de la Puebla del Maestre hay una llamativa abundancia de maestres de Santiago y otros dignatarios de las Órdenes Militares.

La Puebla del Maestre debe su nombre precisamente a haber sido fundada por Alonso de Cárdenas, último maestre de dicha Orden, que fue el abuelo materno del I conde. Durante la segunda mitad del siglo XV los Cárdenas copaban las encomiendas santiaguistas de la Corona de Castilla. El Maestre era hijo de Garci López de Cárdenas, señor de Cervera, comendador mayor de León y trece de la Orden y uno de los que en 1445 eligieron por maestre al condestable Álvaro de Luna; nieto de Garci López de Cárdenas, señor de Cárdenas, comendador de Socovos en la misma Orden, y tataranieto de otro Garci López de Cárdenas, clavero de la de Calatrava. Alonso fue como su padre comendador mayor León, y tras su segunda elección al maestrazgo cedió esta encomienda a su primo Gutierre de Cárdenas, cabeza del linaje a la sazón e hijo de Rodrigo de Cárdenas, comendador de Valencia del Ventoso, y dio otras a más deudos suyos.

El maestre Cárdenas casó con Leonor de Luna, que era hermana de Juan de Luna, prior de Castilla y León en la Orden de San Juan; hija ilegítima de Rodrigo de Luna, también prior sanjuanista de Aragón y de Castilla, y nieta de Juan Martínez de Luna, señor de Morata de Jalón, y de Teresa de Albornoz, su segunda mujer, que era hermana de María de Albornoz, la mujer de Enrique de Villena el Nigromante, maestre de la Orden de Calatrava (1404-1407). Leonor era sobrina carnal de Pedro de Luna, arzobispo de Toledo, del citado condestable Álvaro de Luna, maestre de Santiago (1445-1453), y de otro Juan Martínez de Luna, señor de Morata, que por su matrimonio con Aldara Ruiz Cabeza de Vaca fue cuñado de Pedro Fernández Cabeza de Vaca, también maestre de Santiago (1383-1384). Y sobrina nieta del antipapa Benedicto XIII, el Papa Luna.

Juana de Cárdenas, II señora de la Puebla, hija del maestre Cárdenas y de Leonor de Luna, casó con Pedro Portocarrero el Sordo, señor de Moguer y comendador mayor de Castilla en la Orden de Santiago, que era hijo de Juan Pacheco, I marqués de Villena, maestre de la misma Orden (1467-1474), y de María Portocarrero, su segunda mujer, señora de Moguer, hija a su vez de Pedro Fernández Portocarrero, señor de Moguer (cuya hermana Elvira casó con el dicho Álvaro de Luna), y de Beatriz Enríquez, su mujer, hija del almirante Alfonso Enríquez y nieta de Fadrique Alfonso de Castilla, también maestre de Santiago (1342-1358). El citado Juan Pacheco, maestre de Santiago, y su hermano Pedro Girón, maestre de Calatrava (1445-1466), fueron aquellos «dos hermanos, / maestres tan prosperados / como reyes, / c'a los grandes e medianos / truxieron tan sojuzgados / a sus leyes». Se criaron como pajes en la casa del repetido condestable y maestre y fueron hijos de María Pacheco, señora de Belmonte, y de Alfonso Téllez Girón, señor de Frechilla, que era sobrino nieto 2.º de Gonzalo Ruiz Girón, maestre de Santiago (1275-1280). Pedro transmitió el maestrazgo de Calatrava a su hijo Rodrigo Téllez Girón.

El I conde de la Puebla del Maestre fue Alonso de Cárdenas y Portocarrero, hijo de Pedro Portocarrero y de Juana de Cárdenas y nieto por tanto, por ambas líneas, de sendos maestres de Santiago. Este señor casó con Elvira de Figueroa, hija de Gómez Suárez de Figueroa, II conde de Feria, y de María de Toledo, su segunda mujer, hija de los I duques de Alba. El padre de Elvira era biznieto de Lorenzo Suárez de Figueroa, señor de Monturque, maestre de Santiago (1387-1409), y su madre, sobrina tataranieta de García Álvarez de Toledo, igualmente maestre de Santiago (1359-1366).

En la imagen, el condestable y maestre Álvaro de Luna en actitud orante, vistiendo el hábito de Santiago y protegido por San Francisco de Asís. Retrato pintado en la predela del retablo de su capilla de la Catedral de Toledo y atribuido a Sancho de Zamora o a Juan Rodríguez de Segovia.

Ruinas del Castillo de Bacares. El 1492 los Reyes Católicos donaron las villas de Gérgal y Bacares, con sus castillos, fortalezas, vasallos, jurisdicción alta y baja, mero y mixto imperio, diezmos y alcabalas, a Alonso de Cárdenas, último maestre de la Orden de Santiago, que había tenido una destacada participación en la Guerra de Granada. El señorío se sucedió en sus descendientes los condes de la Puebla del Maestre.[6]​ En 1625 el rey Felipe IV creó el marquesado de Bacares como título de espera para los primogénitos de esta casa, en cabeza de Diego de Cárdenas y Herrera, primogénito del IX conde, a quien sucedió doce años después.
El Castillo de Gérgal se yergue sobre una de las lomas que forman las estribaciones de la sierra de los Filabres. Goza de amplias vistas sobre la villa y la rambla de Gérgal, y queda a su vez protegido al norte por la muralla natural que forma la loma de Tablas. Su fábrica es de mampostería de lajas gruesas de pizarra puestas horizontalmente. Toda la estructura y disposición del castillo está determinada por su función defensiva, observándose una estricta compartimentación de los distintos recintos: hay incluso aspilleras en dependencias interiores. El edificio se organiza alrededor de una torre central almenada, de planta cuadrada de 15,5 m. de lado, a cuyas esquinas se adosan cuatro cubos más bajos de planta circular, rematados por casamatas para artillería con cubierta cónica. Se accede al castillo a través de un postigo en recodo que queda encerrado dentro de otro cubo bajo, almenado, de planta ovalada y defendido por un matacán. Salpicadas por los muros se abren algunas troneras para armas de fuego portátiles. Todo se asienta sobre una plataforma elevada, con bastiones circulares en las esquinas y cercada por un muro almenado.

Durante el siglo XVI el castillo de Gérgal jugó un gran papel defensivo contra las razias de piratas turcos y berberiscos que desembarcaban en las costas almerienses y hacían rápidas incursiones de saqueo contra los cristianos con el apoyo de la población morisca, llevándose botín y cautivos. Y en 1568 fue uno de los focos de la insurrección de los moriscos iniciada aquel año. Pertenecía por entonces el estado de Bacares a Pedro de Cárdenas y Figueroa, II conde de la Puebla del Maestre, quien tenía como alcaide del castillo de Gérgal al morisco Francisco Puertocarrero. Al comenzar la rebelión, el dicho alcaide y su hijo de igual nombre atrajeron con engaño hasta el castillo a los cristianos de la villa, y los masacraron. Los sublevados se hicieron allí fuertes hasta que fueron expugnados por el marqués de los Vélez, y huyeron después a las montañas vecinas.

Tras la expulsión de los moriscos, entre 1571 y 1620, la zona quedó semidespoblada y expuesta al bandidaje de los forajidos. Durante el siglo XVII el castillo fue reconstruido por los condes de la línea tercera para restablecer el orden y favorecer la repoblación del señorío.

En la segunda mitad del siglo siguiente pertenecía a Isabel Pacheco Portocarrero, condesa de la Puebla del Maestre y marquesa de la Torre de las Sirgadas, quien lo utilizaba como pósito de los granos que percibía en concepto de diezmos y derechos señoriales.

La última dueña hereditaria fue María Luisa Fernández de Córdoba y Marín, nieta del XIX conde de la Puebla del Maestre. Esta señora murió sin descendencia hacia 1940, habiéndose extinguido también la de su única hermana, la marquesa de la Puebla de Ovando. En su testamento, legó el castillo al ayuntamiento de Gérgal, y el cortijo que poseía en el municipio al aparcero que lo llevaba. En 1968 el castillo pasó a ser propiedad del Estado, que tras declararlo alienable lo vendió en subasta pública a un particular en 1972.

Historia genealógica

Origen de los Cárdenas

El abuelo del maestre fue

Garci López de Cárdenas († 1414),[14]​ cabeza de este linaje y V señor de la villa de Cárdenas en la Rioja, comendador de Socovos en la Orden de Santiago,[15]​ fundador de la casa de la villa de Ocaña, que en 1407 se halló en la Cabalgada de Vera y Zurgena.[16]

Era hijo de Lope Ruiz de Cárdenas, IV señor de Cárdenas, y nieto de otro Garci López de Cárdenas, III señor de Cárdenas y clavero de la Orden de Calatrava.[17]​ Y descendía por línea de varón de los López de Haro, señores de Vizcaya.

Casó con María Cerón, natural de Sevilla, hija de Juan Cerón, señor de la Torre de Guadiamar y de las villas de Merlina y Castilleja de Talhara, alcalde mayor de dicha ciudad y alcaide de sus Reales Alcázares y Atarazanas, todo por juro de heredad, y de Constanza Martínez Carrillo, su mujer; nieta de Martín Fernández Cerón, vasallo del rey, poseedor de los mismos estados y oficios perpetuos, que vinculó en 1408, y de Leonor Sánchez de Mendoza, y materna de Nicolás Martínez de Medina, veinticuatro de Sevilla y tesorero mayor de Andalucía, y de Beatriz de las Roelas.[18]

Su hijo segundo fue

Garci López de Cárdenas (c. 1395-1459), señor de los lugares de Cervera y Casablanca en tierras de Cuenca, comendador mayor de León y trece de la Orden de Santiago. Fue natural y dueño de la casa de los Cárdenas de la villa de Ocaña, donde fundó y dotó largamente la capilla de su enterramiento en la iglesia parroquial de San Pedro.[11]​ De niño se crio como paje en casa de Lorenzo Suárez de Figueroa, maestre de Santiago, y siendo aún de corta edad fue recibido como freire de esta Orden.[14]​ En 1429 obtuvo la encomienda de Caravaca, después la dignidad de trece, y en 1442 la mayor de León, todo por merced del infante y maestre Don Enrique de Aragón, de quien fue estrecho colaborador y fiel consejero.[14][19][20]​ En 1445, por muerte del infante, fue uno de los treces que asistieron en Ávila a la elección de nuevo maestre.[21]​ Salió elegido el condestable Álvaro de Luna, que había sido gran enemigo del anterior, pero pronto Garci López se ganó su confianza, y al año siguiente fue enviado a poner fin al cisma de Rodrigo Manrique, comendador mayor de León, que se había autoproclamado maestre de la Orden con apoyos del rey Alfonso V de Aragón y del mismo príncipe de Asturias, Don Enrique. Gozó también de gran valimiento con el maestre Luna, y en 1450 emparentó con él al casar a su hijo Alonso con Leonor de Luna, sobrina de don Álvaro. A raíz de este casamiento, renunció a la encomienda mayor de León y el maestre se la concedió en seguida al dicho Alonso, que iniciaba así su propia carrera al maestrazgo.

El matrimonio que le atribuyen algunas fuentes con una señora del linaje Osorio es probablemente un error genealógico.[22]

Casó con Leonor de Sandoval, que debió de traer en dote los estados de Cervera y Casablanca. Viuda sin prole de Juan Carrillo, señor de Anguix, e hija de Gutierre de Sandoval, IV señor de la Ventosa, y de Blanca Coello, su mujer, de los señores de Montalbo, El Hito y Villar de Cañas, todo en tierras de Cuenca. Fueron padres de

  1. Alonso de Cárdenas, el Maestre, que sigue,
  2. Gutierre de Cárdenas († a.1450), comendador de Villanueva de Alcaraz en la misma Orden, que murió mozo en Torija combatiendo contra las tropas de Juan II de Navarra, en la misma refriega en que su padre perdió la vista.[14]
  3. Y Constanza de Cárdenas, señora de gran belleza a quien aludía el emblema de una golondrina que adoptó como empresa su marido.[23]​ Fue casada con Juan Zapata el Ayo, comendador de Hornachos y trece de la Orden de Santiago por merced de su cuñado el Maestre,[24]caballerizo mayor del rey Enrique IV y ayo del príncipe Don Juan, hijo tercero de Ruy Sánchez Zapata, señor de Barajas, doncel de la infanta Leonor de Aragón, reina de Castilla, y copero mayor de los reyes Enrique III y Juan II, y de Constanza de Aponte, su segunda mujer, de los señores de Monreal. Sus descendientes llevaron el apellido Cárdenas y fueron señores de Loeches hasta 1633.[25]​ Con sucesión en los condes de Casarrubios.

Alonso de Cárdenas, el Maestre


El maestre fundador de la Puebla fue

Alonso de Cárdenas (c. 1425-1493),[26]I señor de la Puebla del Maestre, que hacia 1483 construyó el castillo de este lugar e inició su poblamiento, fundando así la villa y señorío.[10]​ Como capitán general de Córdoba y de Sevilla, y después como maestre de Santiago, hizo grandes servicios a los Reyes Católicos en la Guerra con Portugal y en la de Granada, por lo que en el repartimiento de este reino recibió las villas de Gérgal y Bacares.[6]​ Figura entre los confirmantes del privilegio rodado de las Capitulaciones de Granada, por lo que fue uno de los últimos ricoshombres de Castilla. De sus padres había heredado la casa de Ocaña, que siguió en su descendencia, y el estado de Cervera, que vendió luego,[27]​ y hubo por compra muchas tierras en Extremadura y en el reino de Sevilla.

En la Orden de Santiago tuvo la encomienda mayor de León desde 1450, por renuncia de su padre y merced del maestre Álvaro de Luna, con cuya sobrina había contraído matrimonio. Por el año 1470, y como parte de su estrategia para alcanzar el maestrazgo, casó a sus dos hijas con sendos hermanos ilegítimos de Enrique de Guzmán, II duque de Medina Sidonia, cuyas vastas posesiones en el reino de Sevilla confinaban con algunas encomiendas de la Orden que por entonces resistían a la autoridad magistral.[28]​ El duque y sus medio hermanos eran biznietos de Lorenzo Suárez de Figueroa, maestre que fue de Santiago. La mayor de dichas hijas quedó viuda enseguida, y Alonso la volvió a casar en 1473 con un hijo del marqués de Villena, maestre de la Orden a la sazón, a quien sucedería poco después en el maestrazgo.

Fue maestre en dos etapas: interinamente de 1474 a 1476, y segunda vez desde 1477 hasta su muerte, ocurrida en 1493.[26]​ A raíz de la segunda elección concedió la encomienda mayor de León, que había gozado hasta entonces, a Gutierre de Cárdenas, su primo carnal, cabeza del linaje a la sazón, de quien proceden los duques de Maqueda.[29]​ Después de los días de Alonso de Cárdenas, el maestrazgo vacó hasta que en 1499 el papa español Alejandro VI lo otorgó a los Reyes Católicos, con título de administradores. Esta administración fue renovada y perpetuada en favor del emperador y rey Carlos I por el papa flamenco Adriano VI, quedando incorporada a la Corona.[30]

Casó con Leonor de Luna, que era hermana entera de Rodrigo de Luna, arzobispo de Santiago, y de Juan de Luna, prior de Castilla y León en la Orden de San Juan; hija ilegítima de Rodrigo de Luna, también prior sanjuanista de Aragón y de Castilla, y de Juana de Ardoz o de Tordesillas, su barragana; sobrina carnal de Pedro de Luna, arzobispo de Toledo, y del condestable Álvaro de Luna, maestre de Santiago y valido del rey Juan II de Castilla; nieta del ricohombre Juan Martínez de Luna, 2.º del nombre, señor de Morata de Jalón y de las baronías de Illueca y Gotor, todo en Aragón, y de Teresa de Albornoz, su segunda mujer, de los señores de este estado en tierras de Cuenca. Y sobrina nieta del antipapa Benedicto XIII, el Papa Luna.[31]​ Tuvieron dos hijas:[32]

  1. Juana de Cárdenas, que sigue,
  2. y Leonor de Cárdenas y Luna,[33]​ que casó con Juan Urraco de Guzmán, noble sevillano que se halló en la Batalla de la Ajarquía (1487), donde fue preso.[34]​ Este señor era medio hermano del primer marido de Juana: hijo bastardo de Juan Alonso Pérez de Guzmán, I duque de Medina Sidonia, III conde de Niebla, señor de Sanlúcar, Ayamonte y Lepe, y de Urraca de Guzmán, su manceba y prima carnal.[35]​ Con sucesión.[36]

Fundadores del mayorazgo


En 1493 sucedió en los señoríos su hija

Juana de Cárdenas (c.1452-c.1520), II señora de la Puebla del Maestre y del estado de Bacares.

Casó dos veces: la primera con Pedro de Guzmán el del Lunar (c.1450-1473), medio hermano de su cuñado Juan Urraco, el marido de su hermana Leonor. Era hijo bastardo de Juan Alonso de Guzmán, III conde de Niebla y I duque de Medina Sidonia, señor de Sanlúcar, Ayamonte y Lepe, quien le hubo en una doncella de buen linaje llamada Guiomar, hija de un alcaide de Sanlúcar,[35]​ y nieto de Enrique de Guzmán, II conde de Niebla y V señor de Sanlúcar, y de Teresa de Figueroa, su primera mujer, hija del maestre de Santiago Lorenzo Suárez de Figueroa. Al poco tiempo de casados, Pedro murió en Alcalá de Guadaira junto con su hermano Alfonso, cuando ambos combatían contra el bando del marqués de Cádiz, enemigo de su hermano Enrique de Guzmán, II duque de Medina Sidonia.[37][28]

Y habiendo quedado viuda y sin prole el 6 de marzo de 1473, contrajo segundas nupcias ese mismo año en Valencia del Ventoso con Pedro Portocarrero el Sordo (c.1450-1519),[38]​ VIII señor de Moguer y VI de Villanueva del Fresno, del Consejo de los reyes Juana I y Carlos I, comendador mayor de Castilla y trece de la Orden de Santiago,[39]​ alcalde mayor de la ciudad de Sevilla y de la villa de Jerez de los Caballeros.[2]​ En la Guerra de Sucesión Castellana, este señor siguió —como su hermano el II marqués de Villena— la parcialidad de Doña Juana, incurriendo en el disfavor de los Reyes Católicos hasta que estos le otorgaron real cédula de perdón el 11 de septiembre de 1476.[4]​ Después sirvió a las órdenes de su suegro en la Guerra de Granada. Adquirió el señorío de la villa de Chucena en el reino de Sevilla, y la mitad de Purchena en el de Granada, cerca del estado de Bacares.[40]

Aunque hubo de su madre el apellido y estados de los Portocarrero, el segundo marido de Juana pertenecía al linaje de Acuña, o Pacheco-Girón. Era el segundo hijo varón del ricohombre de Castilla Juan Pacheco, I marqués de Villena, I duque de Escalona y I conde de Xiquena, maestre de la Orden de Santiago, y de María Portocarrero, su segunda mujer, señora de Moguer y de Villanueva del Fresno; nieto de Alfonso Téllez Girón, I señor de Frechilla, y de María Pacheco, señora de Belmonte, y materno de Pedro Fernández Portocarrero, V señor de Moguer, y de Beatriz Enríquez, hija del I almirante. Una de las capitulaciones que precedieron a este matrimonio fue que el hijo primogénito heredaría el estado de Moguer, y el segundogénito el de la Puebla. Esta cláusula era análoga a la que se estipuló para el casamiento de los padres del novio, en virtud de la cual el primogénito llevó el estado de Villena y el segundogénito el de Moguer, con imposición a cada uno del apellido y armas del linaje respectivo.

Pedro Portocarrero y Juana de Cárdenas fijaron su morada en la ciudad de Córdoba y después en la entonces villa de Jerez de los Caballeros,[41]​ donde tuvieron por criado a Vasco Núñez de Balboa, futuro descubridor del Mar del Sur.[2][4]​ Fueron enterrados en su villa de Moguer,[3]​ en un bello sepulcro con sus bultos que mandaron labrar en el lienzo del evangelio de la capilla mayor de la iglesia del Monasterio de Santa Clara, del que eran patronos. En 1495 obtuvieron facultad de los Reyes Católicos para fundar cuatro mayorazgos, lo que efectuaron en 1514, llamando a poseerlos a cuatro de los quince hijos que tuvieron, y que fueron a saber:[42]

  1. Juan Portocarrero, el primogénito (c.1475-1544), IX señor de Moguer y VII de Villanueva, que en 1530 fue creado marqués de Villanueva del Fresno. En la Orden de Santiago tuvo primero la encomienda de Estepa, y al morir su padre le sucedió en la mayor de Castilla y dignidad de trece, también por merced del Emperador.[43]​ Fue como su padre alcalde mayor de Sevilla. En 1539 compró la jurisdicción de Villanueva de Barcarrota en más de treinta cuentos de maravedís. Casó con María Osorio, hija de Pedro Álvarez Osorio, I conde de Lemos, III señor de Cabrera y Ribera, y de María de Bazán, su segunda mujer; nieto de Rodrigo Álvarez Osorio, II señor de Cabrera y Ribera, y de Aldonza Enríquez, su primera mujer, hija del I almirante, y materna de Pedro de Bazán, I vizconde de la Valduerna, y de Mencía de Quiñones. Ambos fueron enterrados en el monasterio de Santa Clara de Moguer, del que eran patronos, en un arcosolio con sus bultos que hace pendant con el sepulcro de los padres de Juan. Tuvieron descendencia en que siguió este marquesado, y un nieto suyo fue creado conde de Montijo.[44]​ La casa de Villanueva del Fresno recayó por extinción de línea en la de Montijo, a la que se añadió por entronque la ducal de Peñaranda de Duero. Y todas quedaron agregadas a la de Alba a raíz del matrimonio contraído en 1848 por Francisca de Sales Palafox y Portocarrero, IX condesa de Montijo (hermana de la Emperatriz Eugenia) con Jacobo Fitz-James Stuart y Ventimiglia, XV duque de Alba y VIII de Berwick. Los poseedores de esta casa solían usar el dictado de «marqueses de Villanueva del Fresno y Barcarrota», y en virtud de ello la citada duquesa Paca de Alba obtuvo el reconocimiento oficial del marquesado de Barcarrota, que se ha sucedido desde entonces como título distinto del de Villanueva del Fresno, pese a que no existe su carta de creación.
  2. Alonso de Cárdenas, I conde de la Puebla del Maestre, que sigue.
  3. María Portocarrero, que no tomó estado. Estuvo capitulada para casar con Rodrigo de Melo (1468-1545), que después fue creado conde de Tentúgal y marqués de Ferreira, títulos de Portugal. Hijo primogénito de Álvaro de Braganza, señor de Tentúgal, presidente del Consejo de Castilla con los Reyes Católicos, y de Felipa de Melo Manuel de Villena y Meneses, señora de Ferreira de Aves, llamada «condesa de Olivenza»; nieto de Fernando, el II duque de Braganza, y de Juana de Castro, de los señores de Cadaval, y materno de Rodrigo de Melo, conde de Olivenza, y de Isabel de Meneses, de los señores de Vagos. Este matrimonio fue largamente aplazado y finalmente no se llevó a efecto. Rodrigo de Melo casó tardíamente con Leonor de Almeida, hacia 1510, y después contraería segundas nupcias. En relación con esto se dirá algo más al tratar del proyecto de boda, también frustrado, de la siguiente hija de los señores de Moguer.
  4. Leonor de Luna, que entró monja clarisa en el convento de Moguer y después pasó al de Santa Inés de Sevilla, y de uno y otro fue abadesa.[45][46]​ Refiere Gonzalo Fernández de Oviedo que, antes de entrar en religión, esta señora estuvo capitulada para casar con Alonso de Sotomayor, que por entonces era muy muchacho y después fue IV conde de Belalcázar y IV vizconde de la Puebla de Alcocer. Hijo primogénito de Gutierre de Sotomayor y Zúñiga, el III conde y vizconde, y de Teresa Enríquez, su mujer, prima carnal del rey Fernando el Católico; nieto de otro Alonso de Sotomayor, el concesionario de ambas mercedes, y de Elvira de Zúñiga y Manrique de Lara, de los condes de Ayamonte; nieto materno del almirante Alonso Enríquez, III conde de Melgar y señor de Medina de Rioseco, y de María de Velasco, de los condes de Haro, y biznieto de Gutierre de Sotomayor, maestre de la Orden de Alcántara. Pero en el proyectado casamiento «se atravesó la Reyna Cathólica doña Ysabel, e no dio lugar a este matrimonio, porque quiso que el conde casase, como casó, con doña Ysabel de Castro e Portugal».[47]​ Dicha Isabel de Castro (llamada también Filipa, por su segundo nombre de pila), era hermana de Rodrigo de Melo, el I conde de Tentúgal y marqués de Ferreira, que estuvo capitulado para casar con María Portocarrero, hermana de Leonor de Luna, como se dijo en el párrafo anterior. El mal fin de los planes de boda de ambas hermanas tuvo una causa política: la intervención de la Corona en los matrimonios de la alta nobleza castellana y portuguesa.
  5. Pedro Portocarrero (†1526), clérigo secular, obispo de Ciudad Rodrigo (1523-1525) y arzobispo de Granada (1525–1526).[48]
  6. Juana de Cárdenas, que casó con Francisco de la Cueva (n.c.1475), III señor de la Adrada, hijo de Antonio de la Cueva y Mendoza, II señor de la Adrada, y de Elvira de Ayala, de los señores de Cebolla, y nieto de Beltrán de la Cueva, I duque de Alburquerque, maestre de Santiago, y de Mencía de Mendoza, de los duques del Infantado. Procrearon entre otros hijos a
    1. Antonio de la Cueva y Portocarrero (c.1500-1574), I marqués de la Adrada, corregidor de Córdoba y mayordomo mayor de la reina Ana de Austria. No tuvo descendencia aunque fue tres veces casado: con Isabel de Mendoza y Toledo (nieta de los II marqueses de la Valle Siciliana y materna de los de Villafranca),[49]​ con Petronila Fajardo y Pacheco, de los señores de la Puebla de Montalbán, y con María de Mendoza y Cisneros, de los condes de Coruña.
    2. Diego de la Cueva y Portocarrero, II marqués de la Adrada, que casó con Luisa de Sanquigel, dama de la reina Isabel de la Paz, y tampoco dejó prole.
    3. E Isabel Benita de la Cueva y Portocarrero, mujer de Gonzalo Fernández de la Lama (c.1510-1558), señor de las casas y cotos de Lastras de la Lama (en el municipio de Monterrubio) y Villovela (en el de Escobar de Polendos) y del mayorazgo de los Monjaraz en la villa del Espinar, todo en la actual provincia de Segovia, regidor de esta ciudad, y que en Extremadura poseía las dehesas del Bravero, el Carrascal y Torre de Mari Esteban.[50]​ Con descendencia en que siguió la casa de la Adrada.[51]

  7. Inés Portocarrero (c.1480-1546), que casó con Fernando Enríquez de Ribera (c.1478-1522), su deudo, capitán general de Sevilla. Este señor era hermano entero e inmediato sucesor de Fadrique Enríquez de Cabrera, a quien premurió, IV conde de los Molares y I marqués de Tarifa, VI adelantado y notario mayor de Andalucía, señor de Cañete, El Coronil y las Aguzaderas, que a su vez sucedió a su medio hermano Francisco Enríquez de Cabrera, anterior poseedor del condado y adelantamiento. Hijo de Pedro Enríquez de Quiñones, señor de Tarifa, adelantado de Andalucía, y de Catalina de Ribera, su segunda mujer; nieto de Fadrique Enríquez, I conde de Melgar, II almirante de Castilla, II señor de Medina de Rioseco, y de Teresa Fernández de Quiñones, su segunda mujer, de los condes de Luna, y materno de Perafán de Ribera, I conde de los Molares y III adelantado de Andalucía, y de María de Mendoza, su segunda mujer, hija del I marqués de Santillana. Tuvieron entre otros hijos a
    1. Juana Enríquez de Ribera (c.1500-c.1520), que fue la segunda mujer de Juan Sánchez de Velasco y Tovar, I marqués de Berlanga, viudo con prole de María Girón, de los condes de Ureña, y que casó tercera vez con Catalina de Mendoza, de los marqueses del Cenete. Hijo segundo de Íñigo Fernández de Velasco y Mendoza, II duque de Frías, IV conde de Haro, condestable de Castilla, y de María de Tovar y Vivero, su mujer, señora de Berlanga. El marqués de Berlanga tuvo de su primera mujer descendencia masculina en que siguió la casa de Frías. Con Juana Enríquez tuvo esta hija:
      Inés de Velasco y Tovar, que casó con Jerónimo de Acevedo y Zúñiga, IV conde de Monterrey, con posteridad en que siguió esta casa. De estos provienen también los condes-duques de Olivares.[52]

    2. Per Afán de Ribera y Portocarrero (1509-1571), I duque de Alcalá de los Gazules, II marqués de Tarifa, V conde de los Molares, VII adelantado y notario mayor de Andalucía, virrey de Cataluña y de Nápoles. Murió sin sucesión legítima, aunque fue casado con Leonor Ponce de León, hija de los marqueses de Zahara, y en la casa le sucedió su hermano
    3. Fernando Enríquez de Ribera (1527-1594), II duque de Alcalá de los Gazules, III marqués de Tarifa, VI conde de los Molares, VIII adelantado y notario mayor de Andalucía. Casó con Juana Cortés y Ramírez de Arellano, hija de Hernán Cortés de Monroy, I marqués del Valle de Oaxaca, adelantado, gobernador y capitán general de la Nueva España, y de Juana de Zúñiga, su mujer, de los condes de Aguilar de Inestrillas. Con sucesión en que siguió la casa de Alcalá.[53]

  8. Beatriz Portocarrero (c.1490-1555), que fue la segunda mujer de Luis Méndez de Haro, veinticuatro de la ciudad de Córdoba, señor de las villas del Carpio y Morente en este reino y de las de Sorbas y Lubrín en el de Granada. Viudo sin prole de Luisa Pacheco, hermana del I marqués de Priego, e hijo de Diego López de Haro, señor de las villas castellanas del Busto y la Revilla, que trocó con el duque de Frías por las de Sorbas y Lubrín,[54]​ y de la mitad del Villar del Saz de Don Guillén en tierras de Cuenca, capitán general de Galicia, consejero de los Reyes Católicos y su embajador cerca del papa Alejandro VI, y de Beatriz de Sotomayor, su segunda mujer, señora del Carpio, Morente y Pinilla; nieto de Juan Alonso de Haro, señor del Busto y la Revilla, y de Aldonza Carrillo de Mendoza, de los condes de Priego, y materno de Luis Méndez de Sotomayor, señor del Carpio, y de Marina de Solier, de los alcaides de los Donceles.[55]​ Con prole. Padres del I marqués del Carpio.
  9. Garci López Portocarrero o López de Cárdenas (c.1490-1525), señor de las villas de Alcalá de la Alameda y Chucena en el reino de Sevilla y actual provincia de Huelva, que entre otros estados le vincularon sus padres,[56]​ comendador de Alange y/o de la Puebla de Sancho Pérez en la Orden de Santiago. Casó «por amores» con Ana de Cervatón, señora de la villa y baronía de Antella en el reino de Valencia, natural de esta ciudad, dama de la reina Germana de Foix,[57]​ hija de Melchor de Cervatón, señor de Antella, y de Gracia Fabra, su mujer, y fueron padres de
    Pedro López Pacheco Portocarrero (c.1530-1599), I marqués de Alcalá de la Alameda, señor de la baronía de Antella, caballero de Santiago. Casó tres veces: primera con Leonor de la Vega, su deuda, de quien no tuvo prole, hija de Luis Fernández Portocarrero y Bocanegra, I conde de Palma del Río, y de Leonor de la Vega Girón, su primera mujer, de los condes de Ureña. En segundas casó con Elvira de Figueroa, su sobrina 2.ª, señora de Lobón y de la Torre del Fresno, a quien se filiará más abajo como nieta del I conde de la Puebla. Y contrajo tercer matrimonio en 1582 con Francisca Enríquez, señora de Orce y Galera en el reino de Granada, hija de Enrique Enríquez de Luna el Gordo, señor de Orce, y de Juana Fajardo, su mujer y prima carnal, de los marqueses de los Vélez, y nieta de otro Enrique Enríquez de Luna (olim Alonso Enríquez de Guzmán), señor de Orce, hermano del III conde de Alba de Liste, y de Francisca Manrique, medio hermana del I marqués de los Vélez.[58]​ Con descendencia de las dos últimas.[59]

  10. Alfonso Pacheco Girón (n.c.1490),[60]​ en quien fundaron sus padres el cuarto mayorazgo, con asiento en la Torre de las Sirgadas. Casó con María de Castro, y originaron la línea de los señores y marqueses de la Torre de las Sirgadas, en la que recayó la casa de la Puebla del Maestre al extinguirse la descendencia del otro Alonso, como más abajo se verá.
  11. Diego Pacheco, que tomó el nombre de fray Francisco al profesar en la Orden Seráfica y murió en vida de su padre. Dejó 150.000 maravedís al convento y colegio franciscano de Salamanca y 50.000 al de Santa Elena de Llerena.[61]
  12. Francisca Portocarrero (c.1490-1561),[62]​ que casó en 1513 con Juan de Sotomayor, IV señor de la villa de Alconchel en Extremadura, hijo de Gutierre de Sotomayor, III señor de Alconchel, y de Leonor de la Vega, su mujer y tía 2.ª; nieto de Juan de Sotomayor, el II señor, y de Juana de Figueroa (hija del I conde de Feria), y materno de Pedro Suárez de Figueroa (hermano de dicho conde), de los señores de Feria, y de Blanca de Sotomayor, de los señores de Bótova, y biznieto de Gutierre de Sotomayor, I señor de Alconchel, maestre de la Orden de Alcántara. No tuvieron descendencia.
  13. Rodrigo Portocarrero o de Luna (c.1495-t.1552), eclesiástico.[63]
  14. Catalina Portocarrero, que como su hermana Leonor de Luna fue abadesa del Monasterio de Santa Clara de Moguer, patronato de sus padres,
  15. Y otra María Portocarrero, llamada la Menor, que fue monja en el convento de Santa Clara de la villa de Carmona (ciudad desde 1630).

Primer conde de la Puebla del Maestre

Hacia 1500 Juana de Cárdenas y su marido cedieron el estado de la Puebla propter nuptias a su hijo segundo, que en 1506 fue agraciado con el título condal:

Alonso de Cárdenas y Portocarrero (c. 1475-1541), III señor y I conde de la Puebla del Maestre,[1]​ señor de las villas de Gérgal, Bacares, Velefique y Villacelumbre, comendador de Mérida en la Orden de Santiago. Nació probablemente en Córdoba hacia 1475 y falleció el 15 de enero de 1541 (o 1544) en la casa y dehesa de Perales, que poseía por derecho de su mujer en términos de Lobón, Extremadura.[64]

Casó con Elvira de Figueroa, señora de la villa de Lobón, que finó en 1564[65]​ y fue enterrada con su marido en la iglesia de Santiago de Llerena. Hija de Gómez Suárez de Figueroa, II conde de Feria, y de María de Toledo, su segunda mujer; nieta de Lorenzo Suárez de Figueroa, el I conde, y de María Manuel, señora de Montealegre y Meneses, y materna de García Álvarez de Toledo, I duque de Alba, y de María Enríquez de Quiñones, de los almirantes de Castilla.

Los primeros condes de la Puebla fundaron dos mayorazgos en favor de sendos hijos menores del matrimonio, con facultad real dada por el Emperador en Valladolid el 30 de junio de 1537, y mediante escrituras que otorgaron de mancomún en su casa de Perales, al término de Lobón. El 9 de abril de 1539 el de la Torre del Fresno, al que vincularon la jurisdicción de Lobón, por ante el escribano Gómez González. Y el 6 de enero de 1541 el de la Torre del Águila por otra que autorizó Pedro Páez.[66]​ Fueron padres de[67]

  1. Pedro de Cárdenas y Figueroa, que sigue,
  2. Gómez de Cárdenas y Figueroa (c. 1505-1593), señor de Lobón y primer poseedor del mayorazgo de la Torre del Fresno, natural de Llerena. Casó con Francisca de Toledo, su tía segunda, viuda sin prole de Francisco Zapata, comendador santiaguista. Esta señora testó en 1578 fundando nuevo vínculo en favor de su segundogénito, y era hija de Fernando de Toledo, señor de las Villorias, comendador mayor de León en la Orden de Santiago y halconero mayor del rey Fernando el Católico, y de Aldonza Pimentel, su segunda mujer, de los señores de Távara, y nieta de los primeros duques de Alba. Procrearon a
    1. Alonso Antonio de Cárdenas, señor de Lobón y de la Torre del Fresno, caballero de Santiago (1598), natural de Llerena y fallecido en 1605. Casó con Ana de Toledo y Lanuza, su deuda, hermana del justicia de Aragón Juan de Lanuza el Mozo, e hija de Juan de Lanuza el Viejo, también justicia mayor de dicho reino, y de Catalina de Urrea y Toledo, su mujer. De este matrimonio nació un solo hijo, llamado
      Gómez de Cárdenas y Figueroa, que murió mozo en vida de su padre.

    2. Gómez de Cárdenas, señor de Lobón, primer poseedor del mayorazgo que le fundó su madre y tercero del de la Torre del Fresno, que murió sin sucesión.
    3. Y Elvira de Figueroa, señora de Lobón, que fue la segunda mujer de Pedro López Pacheco Portocarrero, su tío 2.º ya citado, I marqués de Alcalá de la Alameda, señor de la baronía de Antella, caballero de Santiago, hijo de Garci López Portocarrero, primer poseedor del mayorazgo de Alcalá, y de Ana de Cervatón, su mujer; nieto de Pedro Portocarrero el Sordo, señor de Moguer, y de Juana de Cárdenas, señora de la Puebla del Maestre, fundadores de dicho mayorazgo y del de la Puebla, y materno de Melchor de Cervatón, señor de la baronía de Antella, y de Gracia Fabra. Con sucesión en que siguió la casa de Alcalá de la Alameda, recayendo en la de Medinaceli.[59]

  3. Alonso de Cárdenas (c. 1510-1605), corregidor de Cuenca y de Guadix, primer poseedor del mayorazgo de la Torre del Águila, que casó dos veces: primera con Ana de Toledo, su deuda, y después con Leonor de Castilla, hija de Francisco Tello, veinticuatro de Sevilla, y de Leonor de Castilla, su mujer; nieta de Juan Gutiérrez Tello y de María de Guzmán, y materna de Pedro Suárez de Castilla y de Leonor de Ulloa y Bobadilla. Alonso murió sin sucesión y, según lo dispuesto por sus padres, los bienes de su mayorazgo se partieron entre el de la Puebla del Maestre y el de la Torre del Fresno.
  4. Garci López de Cárdenas (n. c. 1510), natural y alférez mayor de Llerena, comendador de la Puebla de Sancho Pérez en la Orden de Santiago. Se le identifica a menudo con el conquistador García López de Cárdenas, que pasó a la Nueva España con Francisco Vázquez de Coronado y descubrió el Cañón del Colorado, pero debían de ser personas distintas aunque parientes cercanos, paisanos y coetáneos. Probablemente el conquistador sería un vástago ilegítimo de la misma casa. Nuestro Garci López casó con Beatriz de Toro y Ulloa, natural también de Llerena y señora del donadío de esta villa, hija de Luis de Toro y Ulloa, señor del mismo donadío, y de Mencía de Solís y Sotomayor, su mujer; nieta de otro Luis de Toro y Ulloa y de Beatriz de Sotomayor. Fueron padres de
    1. Luis de Cárdenas y Toro, de quien se tratará más abajo pues fue el VII conde de la Puebla del Maestre,
    2. y de Elvira de Cárdenas y Figueroa, señora del donadío de Llerena y del alferazgo de esta villa, donde nació en 1558.[68]​ Casó con Urbán de Peralta y Calderón (1555-1661), caballero de Alcántara y alférez mayor de Llerena (jure uxoris), hijo de Luis de Peralta, contador de S.M., y de Juana de Calderón Manrique. De quienes provinieron los Peralta Cárdenas, vizcondes de Villahermosa de Ambite y por entronque marqueses de Legarda, que también litigaron por los mayorazgos familiares.[69]

  5. Lorenzo Suárez de Figueroa, natural de Llerena, gentilhombre de boca del rey Felipe II, que casó mediado el siglo en la entonces villa de Valladolid con Lorenza de Gamboa, o de Valda y Recalde, señora de las casas de Valda,[70]​ Recalde y Vizcargui en Azcoitia, provincia de Guipúzcoa, y patrona de la iglesia y monasterio de Santa María la Real de esta villa. Nacida en Valladolid en 1536, era hija primogénita de Juan de Valda y Guevara, señor de esta casa, y de María de Recalde e Idiáquez, su mujer; nieta de Fernando de Valda y Gamboa, que en 1533 fundó vínculo de la casa de Valda y del dicho patronato, y de María López de Guevara, y materna de Juan López de Recalde, señor de las casas de Recalde y Vizcargui, caballero de Santiago, proveedor general de las Armadas de España, y de Lorenza de Idiáquez o de Idiacaiz. Tuvieron por hijo único y sucesor a
    Alonso de Cárdenas y Valda (c. 1555-1610), señor de las casas de Valda, Recalde y Vizcargui y del mayorazgo de la Torre del Fresno,[71]corregidor de las ciudades de Úbeda, Baeza y Córdoba. Nació en Valladolid a mediados de siglo y vivió mucho tiempo en Sevilla. Testó en Madrid el 12 de febrero de 1610 ante Santiago Fernández y murió pocos días después.[72]​ Casó tres veces: la primera en Sevilla con María de Zárate, su tía 2.ª, natural de esta ciudad, donde testó ante Francisco Alvadán el 4 de abril de 1588.[72]​ Hija de Diego Ortiz de Zárate, señor de las torres de Zárate en Artómaña (Álava),[73]​ caballero de Santiago y de la Espuela Dorada,[74]contador de la Casa de Contratación de Indias, natural de la ciudad de Orduña, y de María de Recalde e Idiáquez, su mujer, nacida en Azcoitia y hermana entera de la abuela materna de Alonso (también llamada María).[75]​ Alonso de Cárdenas y Valda casó en segundas con Isabel Pimentel, su sobrina 2.ª, a quien se filiará más abajo como hija del III conde de la Puebla del Maestre, sin prole. Y su tercera mujer fue Juana Ángela Manrique, dama de la infanta Catalina Micaela y de la reina Margarita de Austria, hija de Francisco de Orense Manrique, señor de Amaya, Peones y Melgar de Yuso, alférez mayor de la ciudad de Burgos, y de Isabel de Bernuy y Barba, de los señores de Benamejí. De la primera tuvo por hijos[76]​ a
    1. Lorenzo de Cárdenas Valda y Zárate (1576-1637), que seguirá como IX conde de la Puebla del Maestre.
    2. Alonso de Cárdenas Valda y Zárate, caballero de Alcántara,[77]​ paje del príncipe Don Felipe, que nació en Sevilla hacia 1578 y murió mozo.
    3. Diego de Cárdenas Valda y Zárate (1581-1654), caballero de Santiago,[78]​ gobernador y capitán general del Yucatán en la Nueva España,[79]​ maestre de campo general de las Armadas de Portugal y consejero de Guerra de este reino.[80]​ Fue preso en Lisboa al proclamarse la independencia de Portugal en 1640; sufrió cautividad en Torres Vedras y regresó a Madrid el 23 de diciembre de 1643.[81]​ Después fue capitán general de Guipúzcoa[80][82]​ y del Consejo de S.M. en los de Guerra e Indias y en la Junta de ambos.[83]​ Nació en Sevilla en 1581, bautizado en San Miguel, y se crio en Azcoitia con su abuela Lorenza de Balda;[80]​ testó en Madrid el 6 de febrero de 1654 a fe de Francisco Suárez,[81]​ y murió ese mismo año.[84]​ Después de regresar de Méjico hacia 1630, casó tardíamente en Sevilla con Ana Francisca de Portugal y Colón de Toledo, que era 28 años más joven que él y litigó por la casa de Veragua. Nacida en Madrid el 4 de mayo de 1609 y bautizada en San Sebastián,[85]​ murió en la misma villa, habiendo dado poder para testar a su yerno el duque de San Germán por ante Juan de Landín el 26 de diciembre de 1677. Era hija de Diego de Portugal y de Guiomar Colón de Toledo, su mujer y prima 2.ª; nieta de Jorge de Portugal y Colón de Toledo, de los condes de Gelves,[86]​ y de Ginebra Botti y Font,[87]​ y materna del licenciado Diego de Ortegón, oidor de Quito, y de Francisca Colón de Toledo y Pravia.[88]​ Tuvieron cuatro hijas:
      1. Catalina de Cárdenas Portugal y Colón de Toledo (c. 1635-1707), de quien se tratará más abajo pues fue la XIV condesa de la Puebla del Maestre,
      2. Francisca de Cárdenas Portugal y Colón (c. 1640-1697), que no tomó estado. Poseyó un mayorazgo de segundogénitos fundado por Francisca Colón de Toledo y Pravia, su bisabuela.[89]
      3. Lorenza Francisca de Cárdenas Portugal y Colón (1645-1710), que seguirá después de Catalina como XV condesa de la Puebla del Maestre,
      4. y María de Cárdenas Portugal y Colón, que profesó en el convento de Santo Domingo el Real de Madrid, y fue su priora.[80]

    4. Fernando de Cárdenas Valda y Zárate (n. Sevilla 1582),[90]caballero de Santiago,[91]​ que sirvió en Flandes como capitán de Infantería española y no fue casado.
    5. María de Cárdenas Valda y Zárate, dama de la reina Isabel de Borbón.
    6. Y Francisco de Cárdenas Valda y Zárate, caballero de Santiago, castellano de Alejandría en el ducado de Milán.

      Y de la tercera nació
    7. Lorenza de Cárdenas Manrique, que casó dos veces: primera con Francisco de Orense Manrique y Bernuy, su tío carnal, corregidor de Trujillo, que era viudo de Juana Zapata, y en segundas con Lorenzo Ramírez de Prado, caballero de Santiago, ministro del Consejo de Castilla y embajador de S.M.C. cerca del rey Luis XIII de Francia. Sin sucesión de ninguno de los dos.

  6. Juan de Cárdenas y
  7. otro Juan de Cárdenas, que ambos murieron niños.
  8. Gabriel de Cárdenas (c. 1535-1591), natural de Llerena, presbítero secular, doctor y maestro en Teología por Salamanca,[92]​ catedrático de esta Universidad y su rector en 1557, canónigo magistral de la Catedral Primada de Toledo.[93]
  9. Juana de Cárdenas y Figueroa, natural de Llerena, I condesa de la Puebla de Montalbán, aya del infante Don Felipe (después príncipe de Asturias y rey Felipe III). El rey Felipe II la autorizó a usar dicho título en 1573, al quedar viuda de Alonso Téllez Girón, III señor de la Puebla de Montalbán, comendador de Medina de las Torres en la Orden de Santiago, hijo de Juan Pacheco, primogénito del II señor, y de Leonor Chacón, su mujer, natural de Ocaña y hermana del I marqués de los Vélez. Con sucesión. Su hijo Juan Pacheco de Toledo y Cárdenas fue el concesionario del real despacho de creación de dicho condado. La casa siguió en su descendencia agnada hasta mediado el siglo XIX, agregándosele por sucesivos entronques los ducados de Uceda y Frías.
  10. Elvira de Figueroa, que estuvo capitulada para casar con Íñigo López de Mendoza (1512-1580), su primo segundo, III marqués de Mondéjar y IV conde de Tendilla, pero este matrimonio no se llevó a efecto.[94]​ Hijo de Luis Hurtado de Mendoza y Pacheco, el II marqués, y de Catalina de Mendoza, su mujer, de los condes de Monteagudo, y nieto de Íñigo López de Mendoza, el Gran Tendilla, I marqués de Mondéjar, y de Francisca Pacheco, su segunda mujer, de los marqueses de Villena, hermana del abuelo de Elvira.
  11. María de Toledo y
  12. Catalina de Figueroa, que fueron monjas en el Monasterio de Santa Clara de Moguer, fundado por sus abuelos.
  13. Isabel Pacheco, cuyo estado ignoramos.
  14. E Isabel de Cárdenas y
  15. Magdalena de Cárdenas, que ambas fueron monjas en el Convento de Santa Clara de Zafra.

Condes de la línea directa (II a VI)


Segundo conde

Por fallecimiento del anterior en 1541, sucedió su hijo

Pedro de Cárdenas y Figueroa (c.1505-1573),[95]II conde de la Puebla del Maestre, señor de las villas de Gérgal, Bacares, Velefique y Villacelumbre, caballero de Santiago. También está enterrado en la iglesia de Santiago de Llerena.

Casó en 1539 con Isabel de Toledo y Pimentel,[96]​ su prima segunda, señora de Magaña, que era hermana del Gran Duque de Alba e hija de García Álvarez de Toledo, III marqués de Coria y primogénito de la casa de Alba, y de Beatriz Pimentel, su mujer; nieta de Fadrique Álvarez de Toledo, II duque de Alba de Tormes, y de Isabel de Zúñiga y Pimentel, de los duques de Béjar, y materna de Rodrigo Alonso Pimentel, IV conde y I duque de Benavente, y de María Pacheco y Portocarrero, de los marqueses de Villena, que era hermana de Pedro Portocarrero el Sordo, señor de Moguer, abuelo de nuestro conde. Fueron padres de[97]

  1. Alonso de Cárdenas y Toledo, que sigue, y de
  2. García de Toledo, caballero de Santiago, que murió sin descendencia sirviendo a S.M. en la Jornada de Inglaterra (1588).
  3. Antonio Pimentel, que murió mozo en la Jornada de Portugal (1580).
  4. y Elvira de Figueroa, que murió doncella.


Tercer conde

Por fallecimiento del anterior en 1573, sucedió su hijo

Alonso de Cárdenas y Toledo (c.1540-1594), III conde de la Puebla del Maestre, señor de las villas de Gérgal, Bacares, Velefique y Villacelumbre. Hizo testamento cerrado en Madrid el 16 de octubre de 1594 a fe del escribano Francisco Ramos de Herrera[66]​ y murió ese mismo año.[98]

Casó tres veces: primera en 1565 con Catalina de Mendoza (1542-1572),[96]​ que falleció en Llerena el 7 de marzo de 1572.[99]​ Hija mayor de Íñigo López de Mendoza, III marqués de Mondéjar y IV conde de Tendilla, capitán general de Andalucía, virrey de Valencia y de Nápoles, y de María de Mendoza y Aragón, su mujer y deuda, de los duques del Infantado.

El conde volvió a casar en 1574 con Estefanía Carrillo de Mendoza (c.1550-1580),[65]dama de la reina Ana de Austria, que finó sin prole en Llerena el 7 de septiembre de 1580, hija de Fernando Carrillo de Mendoza y Villarreal, VII conde de Priego, y de Juana de Cárdenas, o Carrillo de Albornoz; nieta de Luis Carrillo de Mendoza, VII conde de Priego, y de Estefanía de Villarreal, y materna de Luis Carrillo de Albornoz, señor de Torralba y Beteta, y de Inés de Barrientos.[100]

Y casó tercera vez en 1582 con María de Mendoza y Corella,[65]​ hija de Ximén Pérez de Corella, VI conde de Cocentaina, y de Beatriz de Mendoza, su mujer, hija a su vez del general Bernardino de Mendoza, de los marqueses de Mondéjar, alcaide de La Goleta, virrey de Nápoles, trece de Santiago, y de Elvira Carrillo de Córdoba.

De la primera tuvo por hijos a
  1. Pedro Esteban de Cárdenas, primogénito, que murió mozo antes que su padre.
  2. Isabel Pimentel, que casó con Alonso de Cárdenas y Valda, su tío segundo, señor de la casa de Valda, que estaba viudo de María Ortiz de Zárate y tenía de ella descendencia en que recaería la casa de la Puebla del Maestre. Arriba filiado como nieto del primer conde, hijo de Lorenzo Suárez. Isabel murió sin prole al poco tiempo (antes que su padre) y su marido contrajo terceras nupcias.
  3. Y María de Mendoza, monja en el Convento de Santa Clara de Zafra.

    Y del tercer matrimonio nacieron:
  4. Brianda de Cárdenas y Mendoza, que seguirá,
  5. Alonso de Cárdenas y Mendoza, que sigue,
  6. y Antonio Benito de Cárdenas, que nació el 14 de octubre de 1587[66]​ y murió de corta edad antes que su padre.</ref>


Cuarto conde

Por fallecimiento del anterior en 1594, sucedió su hijo

Alonso de Cárdenas y Mendoza (c.1585-1603), IV conde de la Puebla del Maestre, que murió mozo el 5 de octubre de 1603.[5][101]

Al fallecer soltero el IV conde en 1603, se entabló el primero de los pleitos habidos sobre la sucesión de la casa de la Puebla del Maestre, en que se enfrentaron de una parte Brianda de Cárdenas, que sigue, hermana del causante, y al fallecimiento de ella su hija Guiomar de Corella, las cuales tuvieron la posesión mientras se sustanciaba, y de la otra como demandante Luis de Cárdenas y Toro, que obtuvo la tenuta por sentencia de 1611, como más abajo se dirá.[65]

Quinta condesa

Por fallecimiento del anterior en 1603, sucedió su hermana entera

Brianda de Cárdenas y Mendoza (c.1583-1604),[101]V condesa de la Puebla del Maestre, que también falleció prematuramente el 17 de julio de 1604.[5]

Había casado en 1601 con Gastón Ruiz de Corella,[96]​ su primo carnal, VII conde de Cocentaina, que la sobrevivió hasta 1611,[101]​ hijo de Jerónimo Ruiz de Corella y Mendoza (hermano de María de Mendoza, la madre de Brianda, y primogénito del VI conde de Cocentaina a quien premurió) y de Guiomar de Moncada, su mujer, hija del I marqués de Aytona. De este matrimonio solo quedó una hija, que sigue.

Sexta condesa

Por defunción de la anterior en 1604, sucedió su hija única:

Guiomar de Corella y Cárdenas (1604-1612),[65]VI condesa de la Puebla del Maestre y VIII de Cocentaina, señora de Magaña, que murió niña en 1612.

Poseyó el mayorazgo de la Puebla desde sus primeros días de vida, pues su madre murió al darla a luz, pero fue desposeída por sentencia de 1611, que otorgaba la tenuta a Luis de Cárdenas y Toro, que sigue, primo carnal de su abuelo. Ese mismo año, por muerte de su padre, Guiomar sucedió en la casa y estados de Cocentaina. Fue además señora de la villa de Magaña como poseedora de un mayorazgo fundado por su abuela Isabel de Toledo y Pimentel, consorte del II conde de la Puebla. Su tío Luis de Cárdenas y Toro, después de ganarle en pleito el mayorazgo de la Puebla, le reconoció la posesión del de Magaña por escritura de transacción hecha el 10 de febrero de 1612: el mismo año en que ambos murieron.

Pese a que solo alcanzó los ocho años de edad, la condesita de Cocentaina fue capitulada para casar con Francisco Diego de Borja Aragón y Centellas (1596-1664), marqués de Lombay, futuro VIII duque de Gandía, quien por haber muerto niña su prometida casó después con Artemisa Doria y Colonna, su sobrina carnal. Hijo de Carlos Francisco de Borja Aragón y Centellas, VII duque, y de Artemisa Doria del Carreto, su mujer, de los príncipes de Melfi.

Después de los días de Guiomar de Corella quedó extinguida la descendencia del segundo conde de la Puebla del Maestre.

Condes de la segunda línea (VII y VIII)

Descendientes de Garci López de Cárdenas, hijo 4.º del I conde


Séptimo conde

En vida de la anterior, por sentencia de tenuta de 30 de julio de 1611, ejecutada mediante real carta de 22 de agosto de 1612,[102]​ sucedió un primo carnal de su abuelo:

Luis de Cárdenas y Toro (c.1540-1612), VII conde de la Puebla del Maestre, señor de las jurisdicciones de esta casa, de la de Lobón y del donadío de Llerena, alférez mayor de esta villa. Arriba filiado como nieto del primer conde. Antes de suceder en la casa y condado, había litigado sobre su tenuta con sus dos predecesoras.[12]

Falleció en el mismo año de 1612, habiendo casado in artículo mortis con María González, la Rica.[103]​ Mediante este matrimonio subsiguiente, quedaba legitimado el hijo único y natural que tuvo con esta señora y que sucedió en la casa.

Octavo conde

Por fallecimiento del anterior en 1612, sucedió su hijo

Alonso de Cárdenas y González (c.1570-1615), VIII conde de la Puebla del Maestre, señor del donadío de Llerena y alférez mayor de esta villa, que murió sin descendencia el 14 de junio de 1615.[99]​ Entró a poseer el título y estados de su casa a raíz de la muerte de su padre, pero se suscitó un reñido pleito sobre la sucesión y murió al poco tiempo sin que se hubiera dictado sentencia.

Casó con Antonia de Sandoval y Rojas, que bastantes años después de viuda y vuelta a casar sucedió como III condesa de la Torre por muerte de Perafán de Ribera, su hermano entero. Hija de otro Per Afán de Ribera o Pedro Suárez de Castilla y Ribera, corregidor de Toledo, señor de la Torre de la Reina en el municipio de Guillena y reino de Sevilla, y de Inés Enríquez Tavera de Saavedra, su mujer, dama de la reina Margarita, que siendo viuda fue camarera mayor de la reina de Francia y en 1618 fue creada condesa de la Torre de Perafán sobre dicho estado de su marido; nieta de otro Perafán de Ribera, señor de la Torre de la Reina, y de Ana de Guzmán, de los señores de la Algaba, y materna de Juan de Saavedra el Turquillo, caballero de Santiago, y de Francisca Enríquez de Sandoval, hija a su vez de Diego de Sandoval y Rojas, de los marqueses de Denia y condes de Lerma, caballero de Alcántara, deán que fue de Jaén, y de Inés de Vivero, su mujer, de los señores de Busianos. Habiendo enviudado sin prole del conde de la Puebla en 1615, Antonia de Sandoval contrajo segundo matrimonio con Lope Díez de Aux de Armendáriz, I marqués de Cadreita.

Condes de la tercera línea (IX a XIII)

Descendientes de Lorenzo Suárez de Figueroa, hijo 5.º del primer conde


Noveno conde

Por fallecimiento del anterior en 1615 y sentencia del Consejo de Castilla de 21 de febrero de 1618,[104]​ sucedió su primo 3.º

Lorenzo de Cárdenas Valda y Zárate (1576-1637), IX conde de la Puebla del Maestre, señor de Lobón, del mayorazgo de la Torre del Fresno y de la casa de Valda y agregadas en Azcoitia, patrono de la iglesia de Santa María la Real de esta villa, caballero de Calatrava,[105]​ arriba filiado como biznieto del primer conde (nieto de Lorenzo, hijo de Alonso). Nació en Valladolid el 12 de octubre de 1576, fue bautizado ese mismo día en la iglesia del Salvador y murió en Madrid el 29 de noviembre de 1637.[101][106]​ Fue presidente de la Casa de Contratación de Sevilla, asistente y capitán general de esta ciudad, administrador general de los almojarifazgos, ministro de los Consejos de Estado y Guerra y presidente del de Indias, electo virrey de Nápoles y mayordomo del rey Felipe IV.[107]

Casó hacia 1600 con Juana de Herrera y Padilla (c.1580-1613),[101]​ hija menor y heredera de la casa de Melchor de Herrera y Ribera, I marqués de Auñón y de Oyra,[108]​ señor de las villas de Auñón, Valdemoro, Valdaracete, Berninches, Villajimena y Talamanca, canciller mayor y tesorero general de Castilla reinando Felipe II, y de su Consejo de Hacienda, comisario general de los Ejércitos de Flandes, alférez mayor de Madrid y patrono de la capilla mayor del Convento de San Felipe el Real de esta villa,[109]​ y de Francisca de Padilla, su segunda mujer;[110]​ nieta de Fernán Gómez de Herrera, del Consejo de los Reyes Católicos y del Emperador, y de Ana de Ribera, de los señores del Villarejo de la Peñuela, y materna de Gutierre López de Padilla, señor de Novés, contador mayor de Castilla, comendador mayor de la Orden de Calatrava, y de María de Padilla y Bobadilla, de los señores de Pinos y Beas. Salazar y Castro cree que Juana de Herrera sucedió como III marquesa de Auñón,[75]​ pero no parece que sobreviviera a su hermana Ana, la II marquesa. En todo caso, el título y casa recayeron en su descendencia. Procrearon siete hijos:[111]

  1. Lorenzo de Cárdenas y Herrera, que murió niño antes que su padre.
  2. Diego de Cárdenas y Herrera, que sigue.
  3. García Manuel de Cárdenas y Herrera, que no tomó estado.
  4. María y
  5. Catalina de Cárdenas, que fueron monjas bernardas descalzas en el Monasterio del Sacramento de Madrid.
  6. Baltasar de Cárdenas y Herrera, que al parecer poseyó la casa de Valda, caballero de Santiago, marido de María de Ulloa Manrique. Esta señora era sobrina carnal de Mariana de Ulloa, marquesa de la Mota, la mujer de Diego (el X conde de la Puebla, de quienes se tratará en seguida), y parece que antecedió a su tía en la posesión de dicho marquesado. Hija única e inmediata sucesora de Francisco Antonio de Ulloa Zúñiga y Velasco, hermano de Mariana, marqués de la Mota y conde de Nieva, caballero de Santiago,[112]​ y de Ana de Mendoza, su mujer, que después casó con el conde de Santisteban del Puerto, hija a su vez de Ruy Gómez de Silva, I marqués de la Eliseda, de los duques de Pastrana, y de Antonia Manrique de Lara, su tercera mujer, condesa de Castañeda, de los marqueses de Aguilar de Campoo. Tuvieron por hijo a
    José de Cárdenas y Valda, que murió niño.

  7. Y Juana de Cárdenas y Herrera, que casó con Francisco de Luzón Guzmán y Aragón (c.1610-1657), mayorazgo de la casa de Luzón de Madrid, regidor perpetuo de esta villa y señor del Soto de Luzón en sus arrabales, patrono de la obra pía de Doña Luisa de Luzón, de dotes para doncellas, y de la capilla de los Luzones en el convento de San Francisco, donde fue enterrado, contigua a la de los Lujanes. Fue caballero de Santiago,[113]​ gentilhombre de cámara del Infante Cardenal y maestre de campo del tercio con que la villa de Madrid sirvió en 1642 al rey Felipe IV en las guerras de Cataluña y Portugal, y murió sin prole dejando a su viuda por heredera de sus bienes libres. Había sucedido en dicha casa por muerte de su hermano Baltasar, y a él le sucedió su hermana María de Aragón, casada con el I marqués de Castañeda. Hijos los tres de Alonso de Luzón, señor de la misma casa y también santiaguista y maestre de campo,[114]​ y de María de Guzmán y Aragón, su mujer.[115]



Décimo conde

Por fallecimiento del anterior en 1637, sucedió su hijo

Diego de Cárdenas y Herrera (1602-1659), X conde de la Puebla del Maestre, I marqués de Bacares y III de Auñón, caballero de Santiago,[116]​ que fue como su padre asistente de Sevilla y su maestre de campo general. Figura a veces con los apellidos Cárdenas y Recalde. Nació en Madrid el 26 de julio de 1602,[117]​ fue bautizado en la parroquial de Santa Ana el 10 de agosto[118]​ y finó en 1659,[101]​ habiendo testado en la villa y corte el 11 de mayo de 1658.[119]

El marquesado de Bacares le fue otorgado por el rey Felipe IV en el año 1625, doce antes de suceder a su padre, como título de espera para los primogénitos de la casa de la Puebla del Maestre.

Casó con María Ana de Ulloa Zúñiga y Velasco (1606-1659), IX condesa de Nieva, natural y V marquesa de la Mota, que fue bautizada en esta villa el 28 de julio de 1606[107]​ y falleció el mismo año que su marido.[101]​ Fue hermana y sucesora de Antonio de los mismos apellidos, el anterior conde y marqués, caballero de Santiago,[112]​ ya citado como suegro de Baltasar, e hija de Luis de Ulloa y Quiñones, natural y III marqués de la Mota, caballero de Alcántara, mayordomo de la reina Isabel de Borbón, y de Francisca de Zúñiga y Velasco, su mujer, VII condesa de Nieva; nieta de Pedro de Ulloa y Quiñones y de Mariana de Ulloa, II marquesa de la Mota, su mujer y sobrina 2.ª, y materna de Antonio de Zúñiga y Velasco, VI conde de Nieva, y de Catalina de Arellano y Zúñiga, de los condes de Aguilar de Inestrillas.[75]​ De esta unión quedaron tres hijos:[120]

  1. José Alejo Antonio de Cárdenas Ulloa y Zúñiga, que sigue,
  2. Lorenzo Antonio de Cárdenas Ulloa y Zúñiga, que seguirá como XIII conde,
  3. y María Antonia de Cárdenas Ulloa y Zúñiga (c.1650-1691), dama de la reina madre Mariana de Austria. Casó en Madrid el 18 de octubre de 1675[120]​ con Ernesto Alejandro Domingo de Ligne (1643-1686), príncipe de Chimay, duque de Arenberg, etc., par del Henao en los estados de Flandes y príncipe del Sacro Imperio, virrey de Navarra, caballero del Toisón de Oro, hijo de Philippe, anterior príncipe y duque, y de Theodore-Maximilienne de Gavre, condesa de Frezin. Sin sucesión.[121]


Undécimo conde

Por fallecimiento del anterior en 1659, sucedió su hijo

José Alejo de Cárdenas Ulloa y Zúñiga (c.1630-1665),[122]XI conde de la Puebla del Maestre, X de Nieva y III de Villalonso, II marqués de Bacares, VI de la Mota y IV de Auñón, señor de la casa de Valda, etc., patrono de la capilla mayor de la conventual de San Felipe el Real de Madrid, electo embajador extraordinario en Francia (1685),[80]mayordomo del rey Carlos II y gentilhombre de su Cámara con entrada.[80]

Casó en el Palacio Real del Buen Retiro el 11 de noviembre de 1657 con Inés de Castro Cabrera y Bobadilla (c. 1635-1665),[118]dama de la reina Mariana de Austria, que en sus últimos días, ya viuda, sucedió como VI condesa de Chinchón, II marquesa de San Martín de la Vega y poseedora de los oficios perpetuos de tesorero general de Aragón, alcaide y guarda mayor del Real Alcázar de Segovia, alférez mayor de esta ciudad y tesorero de su Casa de Moneda. Nacida hacia 1635, falleció en Madrid el 27 de diciembre de 1665, habiendo enviudado del conde ese mismo año. Era hija de Andrés de Castro Cabrera y Bobadilla, que fue canónigo de Toledo pero dejó el estado clerical y sirvió al rey Felipe IV como general de la escuadra de bajeles del reino de Galicia y su gentilhombre de cámara, comendador de Portezuelo en la Orden de Alcántara, natural de Monforte de Lemos, y de Inés de Guzmán (o Enríquez de Ribera), su mujer; nieta de Pedro Ruiz de Castro Andrade y Portugal, V conde de Lemos, II marqués de Sarria, grande de España, y de Teresa de la Cueva y Bobadilla, su segunda mujer, de los condes de Chinchón, y materna de Perafán de Ribera, de los adelantados de Andalucía, y de Inés Enríquez de Tavera y Saavedra, I condesa de la Torre de Perafán. Inés de Castro era sobrina 2.ª de Luis Jerónimo Fernández de Cabrera y Bobadilla, IV conde de Chinchón, virrey del Perú; sobrina carnal de Francisca Enríquez de Ribera, su segunda mujer, y prima carnal de Francisco Fausto Fernández de Cabrera y Bobadilla, V conde de Chinchón, hijo único de dichos virreyes, a quien sucedió en la casa en 1665.[123]​ De este matrimonio nacieron dos hijas:[80][120][124]

  1. Antonia de Cárdenas Cabrera y Bobadilla (c.1658-a.1665), III marquesa de Bacares, que murió niña en vida de su padre,
  2. y Francisca de Cárdenas Cabrera y Bobadilla, que sigue.


Duodécima condesa

Por fallecimiento del anterior en 1665, sucedió su hija

Francisca de Cárdenas Cabrera y Bobadilla (1660-1669),[125]XII condesa de la Puebla del Maestre, VII de Chinchón, XI de Nieva y IV de Villalonso, IV marquesa de Bacares, VII de la Mota, V de Auñón y III de San Martín de la Vega, poseedora de las jurisdicciones, mayorazgos, patronatos y oficios perpetuos de sus padres, menina de la reina madre. Murió en 1669, siendo de edad de nueve años.

Decimotercer conde

Por fallecimiento de la anterior en 1669 y real carta de 1670, sucedió su tío (hermano de su padre)

Lorenzo de Cárdenas Ulloa y Zúñiga (1642-1706),[126]XIII conde de la Puebla del Maestre, XII de Nieva y de Villalonso, V marqués de Bacares, VIII de la Mota y VI de Auñón, señor de la casa de Valda,[127]caballero de Santiago,[128]familiar del Santo Oficio, mayordomo del rey Carlos II y gentilhombre de Cámara de Felipe V. En 1690 ganó la propiedad de la casa de la Puebla por sentencia de la Cámara de Castilla.[120]

Casó cuatro veces: primera con Francisca de Saavedra y Guevara, hermana de Martín Domingo, conde de Escalante y de Tahalú, hija de Martín de Saavedra y Guzmán, barón de Prado, señor de las villas de Carosino y La Costa en el reino de Nápoles, presidente de las Reales Audiencias de Trani en dicho reino y de Santa Fe en el de Nueva Granada, caballero de Calatrava, gentilhombre de boca del príncipe Filiberto, natural y veinticuatro de Córdoba, y de Luisa o Lucía de Guevara y Manrique, su mujer, que era hermana de María, la condesa de Escalante, e hija a su vez de Pedro Ladrón de Guevara, de los condes de Tahalú, caballero de Alcántara (hermano del I conde de Escalante), y de Francisca de Mendoza.[129]​ Contrajo segundas nupcias en Madrid (San Martín) el 20 de junio de 1676[130]​ con María Micaela de Bracamonte y Alarcón († 1676),[101]​ hija de Luis Rubín de Bracamonte y Dávila, II marqués de Fuente el Sol, y de Mariana de Alarcón y Noroña, III marquesa de Trocifal y condesa de Torres-Vedras, dama de las reinas Isabel de Borbón y Mariana de Austria. Su tercera mujer fue Andrea de Velasco (c.1640-1685),[101]​ viuda desde 1671 del X conde de Alba de Liste e hija de Bernardino Fernández de Velasco, VI duque de Frías, conde de Haro, marqués de Berlanga y condestable de Castilla, virrey de Aragón y gobernador del Milanesado, y de Isabel María de Guzmán, su primera mujer, de los marqueses de Toral. Y casó por cuarta vez en 1690 con Francisca Portocarrero y de la Cerda,[96]​ hija de Cristóbal Portocarrero de Guzmán y Henríquez de Luna, IV conde de Montijo, y de Úrsula de la Cerda y Leyva, de los condes de Baños, marqueses de la Adrada y de Leyva. Pero solo fue fecundo su primer matrimonio, del que nacieron dos hijas:[131][80]

  1. Mariana de Cárdenas y Saavedra, VI marquesa de Bacares, que fue menina de la reina madre. Después de renunciar a la casa y herencia, entró monja clarisa coletina en las Descalzas Reales de Madrid.
  2. Y María Luisa de Cárdenas y Saavedra (c.1675-1699), VII marquesa de Bacares, que como su hermana y su prima Francisca fue desde muy temprana edad menina de la reina madre y después dama de la reina Mariana de Neoburgo. Casó en 1696 con Manuel José Pérez Osorio de Vega (1675-1746), XII marqués de Alcañices y VII de Montaos, VIII conde de Grajal y VII de Villanueva de Cañedo, grande de España, señor de Villacís y de otras villas y lugares en el reino de León. Este señor volvió a casar en 1705 con Josefa de Guzmán y Spínola, de los marqueses de Montealegre, con quien tuvo sucesión, y era hijo de Álvaro Pérez Osorio y Fonseca, VI conde de Villanueva de Cañedo, y de Beatriz Francisca de Vega y Bracamonte, VII condesa de Grajal y VI marquesa de Montaos.[132]​ María Luisa murió en 1699 dejando una niña de tierna edad:
    María Carlota Osorio y Cárdenas, que sigue.


Poseedora del mayorazgo

Por fallecimiento del anterior en 1706, sucedió en el mayorazgo su nieta

María Carlota Osorio y Cárdenas (1697-1707), VIII marquesa de Bacares. Desde 1699 era la inmediata sucesora de su abuelo el XIII conde de la Puebla del Maestre, y en efecto entró a poseer el mayorazgo a su fallecimiento, ocurrido el 10 de junio de 1706.[126]​ Pero solo le sobrevivió seis meses, por lo que no tituló. Murió niña el 15 de enero de 1707,[133]​ quedando así extinguida la descendencia del IX conde, su tatarabuelo.

Condesas de la cuarta línea (XIV a XVI)

Descendientes de Diego de Cárdenas Valda y Zárate, hermano del IX conde, nieto de Lorenzo Suárez de Figueroa


Decimocuarta condesa

Por los fallecimientos del XIII conde en 1706 y de su sucesora en el mayorazgo en enero de 1707, la casa recayó en una nieta de Diego de Cárdenas y Zárate, hermano del IX conde:

Catalina de Cárdenas Portugal y Colón de Toledo (c. 1635-1707),[101]XIV condesa de la Puebla del Maestre, IX marquesa de Bacares, señora de Lobón. Esta señora fue generalmente conocida como duquesa de San Germán, por el título de su marido, a quien sobrevivió muchos años viuda. Para su filiación, véase la descendencia del I conde, línea de su hijo Lorenzo Suárez. Poseyó el mayorazgo de la Puebla muy al final de su vida y fugazmente, pues falleció al parecer en enero de 1707:[134]​ solo seis meses después que el XIII conde, y por los mismos días en que finó también la única nieta de este y presunta sucesora.

Contrajo matrimonio en Madrid el 25 de marzo de 1656, iglesia de San Sebastián,[135]​ con el maestre de campo Francisco de Tutavila y del Tufo (1608-1679), duque de San Germán y de Sasón en el reino de Nápoles, natural de esta ciudad, señor de la villa de Saucedilla y del estado de la Campana de Albalá (que comprendía los actuales municipios de Casas de Miravete, Higuera de Albalat y Romangordo, todo en la provincia de Cáceres), comendador de Peñausende en la Orden de Santiago. Fue capitán general del Ejército de Extremadura y gobernador de esta región durante la guerra con Portugal, virrey de Navarra, de Cerdeña y de Cataluña, ministro de capa y espada de los Consejos de Italia, Guerra y Estado y del Colateral de Nápoles. El duque de San Germán era unos treinta años mayor que su mujer y murió repentinamente y sin prole supérstite en Madrid el 30 de enero de 1679. Tuvo un hermano llamado Vicencio que también sirvió en España, y fue hijo de los nobles napolitanos Ottavio de Tuttavilla y Porzia del Tufo, descendientes respectivamente de las casas de los condes de Sarno y de los marqueses de San Juan.[136]

La prole que tuvieron se malogró.

Decimoquinta condesa

Por fallecimiento de la anterior en enero de 1707, sucedió su hermana

Lorenza Francisca de Cárdenas Portugal y Colón (1645-1710), XV condesa de la Puebla del Maestre y I de Montenuevo de Río Leza, X marquesa de Bacares, señora de Lobón. También esta señora era ya anciana y viuda cuando sucedió en la casa de la Puebla, por lo que fue generalmente conocida por el título de condesa de Montenuevo, que le otorgó el rey Carlos II en 1692 sobre un señorío de su segundo marido. Natural de Madrid, fue bautizada en San Justo el 15 de septiembre de 1645; falleció en la misma villa y colación el 10 de enero de 1710 y fue enterrada en el Colegio Imperial. Había testado el anterior día 8 a fe de Luis Manuel de Quiñones, dejando por heredera universal a Mariana, su única hija supérstite.[137][138][139]

Casó dos veces: primera con el maestre de campo Francisco Tello de Portugal, su deudo, II marqués de la Sauceda, caballero de Alcántara, natural y veinticuatro de Sevilla, hijo del también maestre de campo y veinticuatro Juan Gutiérrez Tello de Sandoval, caballero de Santiago o de Calatrava, corregidor de Méjico, y de Isabel de Portugal Medina y Guzmán (hermana del I marqués de la Sauceda); nieto de Francisco Tello de Sandoval Medina y Castro, el de Huévar, caballero de Santiago, y de Lucrecia de Castro y Medina, y materno de Diego de Portugal Colón y Botti, caballero de Santiago, y de Isabel de Medina y Carrillo de Guzmán. Este matrimonio, breve e infecundo, fue declarado nulo. El marqués volvió a casar en 1678 con María de Saavedra y Guzmán, de la que tuvo sucesión, y murió en Sevilla el 13 de septiembre de 1702, habiendo testado allí en 1694 a fe de Diego Mexía.[140]

Lorenza contrajo nuevas nupcias con Luis Enríquez de las Casas y Villalobos (c.1625-c.1700), señor de Montenuevo de Río Leza, caballero de Santiago, mayordomo de las reinas Mariana de Austria y María Luisa de Orleans. Él era viudo y con prole,[141]​ natural de Lima y hermano de otros tres caballeros de hábito.[142]​ Hijo del licenciado Luis Enríquez de Villalobos, oidor en Santa Fe, Lima y Granada, consejero de Indias, natural de Madrigal de las Altas Torres, y de Inés de las Casas, que lo era de Panamá; nieto de Pedro López de Villalobos, natural de Madrigal, y de Isabel Enríquez, que lo era de Zamora, y materno del capitán Juan de la Fuente, alcalde de Panamá, natural de Sevilla, y de Juana de Rojas, que lo era de Granada.[143]​ De este matrimonio nacieron cuatro hijos:

  1. Juan Francisco, el primogénito,
  2. Vicente
  3. y José Enríquez de Cárdenas y Portugal, que los tres murieron niños o mozos antes de 1690,[144]
  4. y Mariana Enríquez de Cárdenas y Portugal, que desde antes de dicho año quedó por primogénita y única supérstite, y sigue.


Decimosexta condesa

Por fallecimiento de la anterior en 10 de enero de 1710, sucedió su hija

Mariana Enríquez de Cárdenas y Portugal (1682-1761), XVI condesa de la Puebla del Maestre y II de Montenuevo, XI marquesa de Bacares, señora de Lobón y de las torres del Fresno y del Águila.[145]​ Natural de Madrid, fue bautizada en San Justo el 25 de mayo de 1682,[146][147]​ Falleció sin descendencia el 29 de diciembre de 1761 [148]​ Heredó de su marido la Quinta del Pardo, y en 1750 la donó a los reyes Felipe V e Isabel de Farnesio, quienes la incorporaron al predio de su Palacio del Pardo.

Casó en Madrid el 13 de julio de 1695 con Alonso Manrique de Lara y Silva (1672-1737), I duque del Arco, IV conde de Montehermoso y VIII de Fuensaldaña, XII vizconde de Altamira, grande de España, caballero de las Órdenes del Toisón de Oro y del Espíritu Santo, caballerizo, montero y ballestero mayor de dicho rey. Era hermano segundo de Marcos Manrique de Solís y Vivero, II conde de Montehermoso y VI de Fuensaldaña, X vizconde de Altamira, señor de Galisteo, Pasarón, Torremenga, Baños, Sagrejas, Malpartida, etc., y tío de Juan Manrique, su hijo y sucesor, a quien sucedió a su vez en dichos estados. Hijo de Pedro Manrique de Lara, señor de Arquillo (que fue hermano e inmediato sucesor del I conde de Montehermoso y V de Fuensaldaña), y de Antonia de Silva Ribera y Toledo, su mujer, que en segundas casó con el I conde de Castroponce; nieto de Alfonso Fernández Manrique de Solís, señor de Galisteo, etc., caballero de Santiago, y de María Manuel de Solís, y materno de Juan Francisco de Silva y Ribera, I marqués del Águila y V de Montemayor, y de María de Toledo y Vicentelo, de los condes de Cantillana; descendiente por varonía de los tres primeros condes de Osorno, del I de Castañeda y de los señores de Aguilar de Campoo.[149]​ Ambos fallecieron sin descendencia.

Condes de la quinta línea (XVII al actual)

Descendientes de Alonso Portocarrero, hermano del primer conde


Después de los días de la XVI condesa de la Puebla del Maestre, quedaba extinguida toda la descendencia de Lorenzo Suárez de Figueroa, el quinto hijo varón del primer conde y progenitor de las dos líneas genealógicas (tercera y cuarta) en que se había sucedido la casa desde 1618. Quedaban empero varias líneas provenientes de otros hijos e hijas del primer conde. Dos de ellas —la de los duques de Medinaceli y la de los vizcondes de Ambite— tenían prioridad genealógica sobre la de Lorenzo Suárez, y habían litigado reiteradamente por la sucesión de la casa, pero habían sido preteridas por razón de sus intrincados llamamientos e incompatibilidades. Y había más líneas que la pretendían, descendientes de hermanos del primer conde, hijos de los fundadores del mayorazgo.

Decimoséptima condesa

A raíz del fallecimiento de la anterior, ocurrido en 1761, se entabló un nuevo pleito por la sucesión que se falló a favor de

Isabel María Pacheco Portocarrero y Cárdenas (1725-1782),[150]XVII condesa de la Puebla del Maestre,[8]​ XII marquesa de Bacares y IV de la Torre de las Sirgadas, concesionaria de la grandeza de España en 1780.[7]​ Parece que entró en posesión de la casa en 1762 y obtuvo sentencia definitiva a su favor en 1767. Esta señora era hija y sucesora de Luis Pacheco Portocarrero y Vega, III marqués de la Torre de las Sirgadas, dueño de las aduanas y portazgos de la ciudad de Badajoz y alférez mayor de la de Jerez de los Caballeros,[9]​ y de María de la Cabeza de Córdoba y Ramírez de Haro, su mujer; nieta de Alonso Pacheco Portocarrero, II marqués de la Torre de las Sirgadas, y de Isabel de Vega, señora del Carbajo y dueña del citado alferazgo y regalía, y materna de Antonio de Córdoba Lasso de la Vega y Francia (hermano del I marqués del Vado del Maestre) y de Inés Ramírez de Haro y Losada, V condesa de Bornos. Provenía por línea agnada de un hermano del I conde de la Puebla del Maestre. La genealogía de estos Pacheco Portocarrero, señores y marqueses de la Torre de las Sirgadas, se expondrá en la voz sobre este marquesado.[151]

Casó en 1760 con Francisco de Paula Fernández de Córdoba y Lasso de la Vega (1737-1805),[152]​ su primo carnal y sobrino 2.º, IV marqués del Vado del Maestre, hijo de Diego Ciriaco Fernández de Córdoba Lasso de la Vega y Mansilla, III marqués del Vado del Maestre, y de Isabel Josefa Pacheco Portocarrero y Vega, su mujer (hermana del padre de la condesa); nieto de Francisco de Paula Fernández de Córdoba y Veintimiglia, II marqués del Vado del Maestre, y de Isabel Mansilla Lasso de Castilla y Pareja Obregón; nieto materno de los II marqueses de la Torre de las Sirgadas, ya citados, y biznieto del general Diego Fernández de Córdoba y Lasso de la Vega, I marqués del Vado del Maestre, consejero de Guerra, caballero de Alcántara, y de Águeda de Veintimiglia y Arias del Castillo, señora de estas casas en Málaga. Procrearon tres hijos:[153]

  1. Francisco de Paula Fernández de Córdoba y Pacheco, que sigue,
  2. Diego Fernández de Córdoba y Pacheco, cadete de Reales Guardias de Infantería Espaňola,
  3. y María de las Angustias Fernández de Córdoba y Pacheco (1771-1847),[154]​ que casó en 1789 con Luis Vicente Melo de Portugal y Almunia (c.1774-1824), V marqués de Vellisca, grande de España, conde de Asumar (título portugués), señor de Barajas de Melo, natural de Valencia, hijo de Pablo Antonio José Melo de Portugal y de la Rocha Calderón, IV marqués de Vellisca, conde de Asumar, natural de Badajoz, y de Pascuala de Almunia y Rodríguez de Navarra, VII marquesa de Rafol de Almunia, que lo era de Benigánim en el reino de Valencia. Con posteridad en que sigue la casa de Vellisca.



Decimoctavo conde

En 1782 sucedió su hijo

Francisco de Paula Fernández de Córdoba y Pacheco (1763-1824),[155]XVIII conde de la Puebla del Maestre, grande de España, V marqués del Vado del Maestre, XIII de Bacares y V de la Torre de las Sirgadas, alférez mayor de Jerez de los Caballeros, sumiller de corps del rey Fernando VII, caballero del Toisón de Oro y gran cruz de Carlos III. Este señor y su cuñado el marqués de Vellisca se cubrieron ante el rey Carlos IV el 9 de febrero de 1789.[156]

A principios del siglo XIX compró el palacio madrileño de la calle de San Mateo, que había sido edificado a partir de 1776 por el arquitecto Manuel Rodríguez para Rodrigo de Torres y Ruiz de Rivera, II marqués de Matallana. Este edificio, hoy sede del Museo del Romanticismo, pasó a ser la residencia principal de la familia durante algo más de un siglo: hasta principios del XX. El nuevo dueño lo remodeló, dotando de mayor ornamentación a la fachada principal, y puso su escudo de armas sobre el balcón central.[157]

Casó en 1784 con María Antonia Fernández de Córdoba y Sarmiento (1764-1819),[158]​ dama de la Orden de María Luisa, camarera mayor de la reina Isabel de Braganza, hija de Juan de Mata Fernández de Córdoba y Spínola, gentilhombre de Cámara de S.M. con ejercicio y servidumbre, y de Ana María Sarmiento de Sotomayor y Fernández de Córdoba, VI condesa de Salvatierra, grande de España, VIII marquesa de Baides, XI de Loriana, VI de la Puebla de Ovando, VII del Sobroso y de Valero, etc.; nieta de Nicolás Fernández de Córdoba y de la Cerda, X duque de Medinaceli y IX de Feria, IX marqués de Priego, etc., caballero de Santiago, y de Jerónima Spínola de la Cerda, su mujer y prima carnal, de los marqueses de los Balbases y duques de Sesto, y materna de José Manuel Sarmiento de Sotomayor y Dávila, VI marqués del Sobroso, primogénito de los V condes de Salvatierra, marqueses de Baides y de Loriana, etc., a quienes premurió, y de Ana María Fernández de Córdoba y Figueroa, de los condes de Teba y marqueses de Ardales. Procrearon a

  1. Francisco de Paula Fernández de Córdoba y Pacheco, que sigue,
  2. Juan de Mata Fernández de Córdoba y Pacheco,
  3. Fausto Fernández de Córdoba y Pacheco
  4. y María Luisa Fernández de Córdoba y Pacheco.


Decimonoveno conde

En 1850 sucedió su hijo

Francisco de Paula Fernández de Córdoba y Pacheco (1785-1858),[159]XIX conde de la Puebla del Maestre, grande de España, VI marqués del Vado del Maestre, XIV de Bacares y VI de la Torre de las Sirgadas,[160]senador del Reino, diplomático con rango de embajador de S.M.C.,[161]gran cruz de Carlos III.

Casó en 1816 con María Manuela de Vera de Aragón y Nin de Zatrillas (1799-1839),[162]​ VI marquesa de Peñafuente, hija del teniente general Vicente Javier de Vera de Aragón y Bejarano, conde de Requena y del Sacro Romano Imperio, grande de España (personal), de los duques de la Roca, caballero de la Orden de Santiago y comendador de la de Alcántara, y de Mariana Nin de Zatrillas y Sotomayor, IV duquesa de Sotomayor, grande de España. Fueron sus hijos:

  1. Francisco de Paula Fernández de Córdoba y Vera de Aragón (1817-1854),[163]​ XV marqués de Bacares,[164]​ primogénito que premurió a su padre, gentilhombre de Cámara de S.M. con ejercicio y servidumbre. Casó en 1841 con Francisca de Paula de Montes y Gómez (1821-1889),[165]​ natural de La Zubia (Granada), hija de Andrés de Montes y Vela de los Cobos, caballero veinticuatro de Granada y de la Orden de Carlos III, y de María del Mar Gómez (de Mercado) y Lara. Residieron en Granada y tuvieron cuatro hijos:
    1. Francisca de Paula (1843-1849)[166]​ y
    2. Manuel Andrés Fernández de Córdoba y Montes (1845-1849),[167]​ que ambos murieron niños de un mismo accidente, en vida de su padre.
    3. Gonzalo Fernández de Córdoba y Montes (1849-1857),[168]​ XVI marqués de Bacares,[169]​ que también murió niño. Fue inmediato sucesor de su abuelo, a quien premurió con escasa antelación.
    4. Y Francisco de Paula Fernández de Córdoba y Montes, que sigue.

  2. Vicente Ferrer Fernández de Córdoba y Vera de Aragón, que murió niño,
  3. Fausto Fernández de Córdoba y Vera de Aragón (1820-1869), VII marqués de la Torre de las Sirgadas. Casó con Isabel Frontini y Brouner (1825-1890), natural de Milán,[170]​ con descendencia en que sigue dicho marquesado.
  4. María Antonia Fernández de Córdoba y Vera de Aragón (1821-1908), mujer de Mariano de Samaniego y Asprer (1825-1889), jefe de negociado de la Ordenación de Pagos por Obligaciones del Ministerio de Gracia y Justicia,[171]​ caballero de la Orden de Alcántara[172]​ y de la Civil Española de San Juan de Jerusalén, hijo de Joaquín Félix de Samaniego Urbina Pizarro y Velandia, IX marqués de Villabenázar, IV de Valverde de la Sierra, VII de Caracena del Valle y de Tejada de San Llorente y V de Monte Real, II conde de Casa Trejo, VIII vizconde de la Armería, consejero de Estado, caballero de la Orden del Toisón de Oro y también de la Civil Sanjuanista, gran cruz de Carlos III y maestrante de Valencia, mayordomo mayor de los reyes Fernando VII e Isabel II, y de Narcisa de Asprer y de la Canal, su segunda mujer, camarera mayor de la reina madre.
  5. Mariana Fernández de Córdoba y Vera de Aragón (1823-1919),[173]dama noble de María Luisa, que casó en 1861 con Teófilo Rodríguez Bahamonde de Castro y Limia (1827-1827),[173]marqués de Baamonde.[174]
  6. Fernando Fernández de Córdoba y Vera de Aragón (1824-1895), VII marqués del Vado del Maestre (desde 1859). Casó con Antonia Bermúdez de Castro y Rascón (1830-1905), natural de Salamanca, hija de Rafael Bermúdez de Castro y Mejía, colegial y rector del Mayor del Arzobizpo en Salamanca, regidor perpetuo de esta ciudad jure uxoris, y de Jacoba Rascón Cornejo y Aparicio, III vizcondesa de Revilla de Barajas. Fueron hijos suyos, todos nacidos en Salamanca:[175]
    1. Fernando Fernández de Córdoba y Bermúdez de Castro (n.1854), que casó con Ángela Nadal y Ortega. No sucedió en el marquesado porque después de los días de su padre hubo un pleito por la sucesión que se falló a favor de Luis Juárez de Negrón y Valdés Fernández de Córdoba y Alfonso, a quien se despachó real carta en 1909.
    2. Ramón Fernández de Córdoba y Bermúdez de Castro (n.1859)
    3. y Blanca Fernández de Córdoba y Bermúdez de Castro (n.1867), que dio su mano a Marcelino Sánchez-Ventura y López, natural también de Salamanca.

  7. José Francisco de Paula Fernández de Córdoba y Vera de Aragón (1824-1884),[176]
  8. Manuel Fernández de Córdoba y Vera de Aragón,
  9. Luisa Fernández de Córdoba y Vera de Aragón (1827-1902),[177]dama de las reinas Isabel II, Mercedes y María Cristina, que casó con Agustín de Silva y Bernuy, su deudo (1826-1872),[178]​ XIV duque de Híjar, XIV de Lécera y X de Bournonville, XIV conde de Aranda y X de Salvatierra, VIII marqués de San Vicente del Barco, XI del Sobroso y de Orani, XX conde de Ribadeo, XIX de Salinas, XX de Belchite, XIV de Guimerá y XV de Vallfogona, seis veces grande de España, caballero de Santiago y maestrante de Sevilla, hijo de Cayetano de Silva y Fernández de Córdoba, duque de Híjar, de Lécera y de Bournonville, conde-duque de Aliaga y Castellot, conde de Aranda, de Salvatierra y de Palma del Río, etc., ocho veces grande de España, caballero de Santiago, de Carlos III y maestrante de Sevilla, gentilhombre de Cámara de S.M., y de María de la Soledad Bernuy y Valda, su mujer, de los condes de Montealegre. No tuvieron descendencia.
  10. Ramón Fernández de Córdoba y Vera de Aragón (1832-1898),[179]​ general de brigada de Artillería y caballero de Santiago,[180]​ que heredó el castillo de Gérgal. Casó en Granada con María del Rosario Marín y Montes (1842-1899),[181]​ natural de esta ciudad y sobrina carnal de la mujer del mayor, hija de José Marín y Saavedra y de María del Mar de Montes y Gómez. Tuvieron por hijas a:
    1. María del Rosario Fernández de Córdoba y Marín (1864-1930),[182]marquesa de la Puebla de Ovando (desde 1910), natural y vecina de Granada, mujer de Julio Seriñá y Lillo (1864-c.1935),[183]​ coronel de Artillería, hijo del teniente general Julio Seriñá y Raymundo y de María de Loreto Lillo y Roda. De esta unión fue unigénita
      María del Rosario Seriñá y Fernández de Córdoba (1901-1929). Casó en 1916 con Antonio Almunia y de León (1896-1972), quien después de enviudar de ella sin prole fue VII marqués de Almunia (título de las Dos Sicilias) y casó en segundas con María Teresa Laffitte y Vázquez, duquesa viuda de Béjar, con quien tuvo sucesión. Era hijo de Luis Almunia y Bordalonga, VI marqués de Almunia, y de Vicenta de León y Núñez-Robres, naturales los tres de Valencia.[184]

    2. Y María Luisa Fernández de Córdoba y Marín, última dueña hereditaria del castillo de Gérgal, que no tomó estado. Murió sin descendencia hacia 1940, y por haberse extinguido también la de su única hermana, legó el castillo al ayuntamiento de Gérgal, y el cortijo que poseía en el municipio al aparcero que lo llevaba. En 1968 el castillo pasó a ser propiedad del Estado, que —tras declararlo alienable— lo vendió cuatro años después en subasta pública a un particular.

  11. Y Paulino Fernández de Córdoba y Vera de Aragón (1833-1874),[185]marqués de la Puebla de Ovando (desde 1867), caballero de Santiago,[186]​ capitán de Caballería y cruz laureada de San Fernando de 1.ª clase. Casó con Celia Méndez y Delgado (1844-1908), natural de Fuentes de Andalucía (Sevilla), hija de Manuel María Méndez y Creus, caballero de Alcántara y maestrante de Ronda, magistrado de la Audiencia Territorial de Madrid y auditor honorario de Marina, y de Ana Delgado y Parejo. No tuvieron prole, y la marquesa viuda entró en religión, fundando con el beato Marcelo Spínola (después cardenal arzobispo de Sevilla) la Congregación de Esclavas Concepcionistas del Divino Corazón de Jesús, de la que fue superiora general con el nombre de Madre María Teresa del Corazón de Jesús.[187]


Vigésimo conde

En 1859 sucedió su nieto

Francisco de Paula Fernández de Córdoba y Montes (1850-1915),[188]XX conde de la Puebla del Maestre, grande de España, XVII marqués de Bacares (también por real carta de 1859), senador del Reino, natural de Granada. No fue casado, pero dejó un hijo ilegítimo, habido en Rafaela Fernández Martínez:

Francisco Fernández de Córdoba y Fernández, que sigue.


Transmisión por línea ilegítima

Vigesimoprimer conde

Por real carta de 1918 sucedió su hijo

Francisco Fernández de Córdoba y Fernández (c.1890-1956),[189]XXI conde de la Puebla del Maestre, grande de España, XVIII marqués de Bacares (también por real carta de 1918) y XII de la Puebla de Ovando. El rey Alfonso XIII le habilitó para poder suceder en los títulos nobiliarios de su padre, pese a ser ilegítimo, mediante real cédula de 18 de mayo de 1918.[190]​ Casó dos veces: primera en 1920 con María de la Concepción González-Ochoa y Enríquez de Salamanca,[191]​ y contrajo segundas nupcias en 1931 con María Teresa de Castañeda y Erro, nacida en la ciudad de San Sebastián (Guipúzcoa) en 1913, hija de José Joaquín de Castañeda y Echevarría y de Francisca Erro y Companys.[192]​ De la segunda tuvo una hija, que sigue.

Vigesimosegunda condesa

Sucedió por Cartas de 1958 su hija

María Teresa Fernández de Córdoba y Castañeda (1933-2015),[193]XXII condesa de la Puebla del Maestre, grande de España, XIX marquesa de Bacares y XIII de la Puebla de Ovando. Se desprendió en vida de todos sus títulos, cediéndolos a sus hijos.

Casó con Rafael Bernaldo de Quirós y Pardo de Santayana (1924-2015),[194]​ hijo de Rafael Bernaldo de Quirós y Bustillo y de Inés Pardo de Santayana y Redonet, su mujer; nieto de Rafael Bernaldo de Quirós y Mier, de los señores de Olloniego y de la casa de la Espriella, y de María de la Consolación Bustillo y Mendoza, IV marquesa de los Altares. Padres de

  1. María Teresa Bernaldo de Quirós y Fernández de Córdoba, casada con Paolo Benzi Berardo,
  2. Francisco de Paula Bernaldo de Quirós y Fernández de Córdoba, que sigue,
  3. e Inés Bernaldo de Quirós y Fernández de Córdoba, marquesa de la Puebla de Ovando (desde 2002). Casó en Guadalmina en 1995 con Fermín Ruiz de Ojeda e Iñarra, abogado natural de Pamplona (n.1953), hijo de Ricardo Ruiz de Ojeda y Feduchy y de María Teresa Iñarra y Etulain.


Actual titular

Por cesión de la anterior y real carta de 15 de diciembre de 2004, sucedió su hijo

Francisco de Paula Bernaldo de Quirós y Fernández de Córdoba, XXIII y actual conde de la Puebla del Maestre, grande de España, XX marqués de Bacares (desde 1981), que nació en la ciudad de San Sebastián (Guipúzcoa) el 18 de julio de 1958.

Casó el 18 de enero de 1985 con María de Fátima Loring Tassara, nacida el 27 de julio de 1960, hija de Ignacio Loring y Guilhou (1920-2000) y de Sofía Tassara y Pla, su mujer; nieta de Manuel Loring Martínez, I conde Mieres del Camino, y de Marta Guilhou y Georgault, en segundas nupcias de esta, y materna de Clemente Tassara Buiza y de Sofía Pla y Ruiz.[195]​ Tienen cuatro hijos:

  1. Francisco de Paula Bernaldo de Quirós y Loring, inmediato sucesor, nacido el 17 de octubre de 1985,
  2. Rafael Jorge Bernaldo de Quirós y Loring, nacido el 7 de julio de 1987,
  3. Ignacio Bernaldo de Quirós y Loring, nacido el 8 de mayo de 1991,
  4. y María de Fátima Bernaldo de Quirós y Loring, nacida el 17 de febrero de 1995.


Bibliografía y enlaces externos

Referencias y notas

  1. a b c No se conserva, que sepamos, la real carta de creación de este título, ni aun conocemos su fecha exacta...
  2. a b c La villa de Jerez de los Caballeros obtuvo el título de ciudad en 1525, seis años después de la muerte de Pedro Portocarrero el Sordo. La casa que en ella tenía este señor, estaba enfrente de la iglesia de San Bartolomé. Y de esta colación también era feligrés Nuño Arias de Balboa, escribano de la villa y padre del descubridor Vasco Núñez de Balboa (1475-1519), que siendo muy mozo entró al servicio del señor de Moguer como paje y escudero. F. Correa, op. cit. I y II.
  3. a b La villa de Moguer obtuvo el título de ciudad en 1625.
  4. a b c José Cepeda Adán, En torno al concepto del Estado en los Reyes Católicos (Madrid: CSIC, 2010), pp. 105-106.
  5. a b c d Diputación Permanente y Consejo de la Grandeza de España y Títulos del Reino. Guía de títulos (en línea; búsqueda: «maestre»). Consultada el 29 de mayo de 2024.
  6. a b c d Las villas de Gérgal y Bacares, «con sus castillos, fortalezas, vasallos, jurisdicción alta y baja, mero y mixto imperio, diezmos y alcabalas», fueron concedidas por los Reyes Católicos el 24 de junio de 1492 a Alonso de Cárdenas, maestre de Santiago, para premiar sus servicios en la Guerra de Granada (Antonio Ramos, op. cit. 1777, dedicatoria). La merced, que era «por juro de heredad», facultaba al concesionario para enajenar las villas libremente y le otorgaba también los «diezmos de los moros», que dichos reyes cobraban a los mudéjares por concesión del papa Inocencio VIII. En su virtud, Alonso de Cárdenas recibió el castillo de Gérgal y el de Bacares, con obligación de repararlos y mantenerlos en servicio de los reyes. Al día siguiente, 25 de junio, estos concedieron las villas de Senés y Velefique, en iguales condiciones, a favor de Juan Téllez Girón, II conde de Ureña, el cual las enajenó por separado a principios del siglo XVI, cediendo la de Senés a Enrique Enríquez, y la de Velefique, con su anejo Febeire, a favor de Alonso de Cárdenas y Portocarrero, I conde de la Puebla del Maestre, que redondeaba así el señorío de Gérgal y Bacares, heredado del maestre Cárdenas, su abuelo materno. Cristina Segura Graíño, «Realengo y señorío en la tierra de Almería en el siglo XV», en En la España medieval n.º 3 (1982), pp. 595-618, p. 605, y José María García-Osuna, «Isabel I la Católica de Castilla y León: su trono asegurado y los tratados atlánticos», en Nalgures, t. VIII (2012), pp. 225-256, pp. 241-242).
  7. a b El real decreto de creación de la grandeza, dado por Carlos III en Aranjuez a 23 de abril de 1780, expresa que «en atención a la antigua nobleza, y lustre de D. Francisco de Córdova, Laso de la Vega, y de Doña Isabel María Pacheco, Portocarrero y Cárdenas, Condesa de la Puebla del Maestre, su muger, y a los distinguidos servicios de sus ascendientes, he venido en hacerles merced de la Grandeza de España de segunda clase, para sí, sus hijos y sucesores en su Casa de la Puebla del Maestre». Dicho decreto y la comunicación del mismo dirigida a los concesionarios por el conde de Floridablanca, a la sazón secretario del Despacho de Estado, están transcritos por Antonio Ramos, op. cit. 1780, pp. 17-18. Este presbítero y genealogista, que servía a los citados condes como capellán de su casa de Málaga, había redactado el memorial que elevaron a S.M. solicitando la grandeza, a cuya vista la Cámara de Castilla informó a favor de la concesión en consulta del 12 de septiembre de 1772 (op. cit. 1777, dedicatoria). S.M. otorgó la grandeza de España atendiendo a los antecedentes aducidos de ricahombría y a que este condado era por entonces «el Título mas antiguo que hay en Castilla en Casa sin Grandeza, pues aunque había quando se instituyó 47 Títulos de Condes y 12 de Marqueses, los 34 están ya en la posesion de dicha Dignidad, y los restantes no la han obtenido porque o estuvieron unidos desde su erección o se agregaron después a Casas que la tenían, y no necesitaron sus poseedores de representar su mérito para adquirirla, con que no quedando en Castilla Dignidad de Conde o Marqués anterior al año de 1506 en Persona que por representación de alguno de los Títulos que posee no goce Grandeza, queda el Conde de la Puebla por el Decano y más antiguo de todos los que no se cubren en presencia de S.M.» (A. Ramos, ibíd.) El real despacho o carta de creación fue expedido el 29 de junio de 1780, según R. Moreno Morrison (loc. cit.) En las Guía Oficial de España figura también esta grandeza como de 2.ª clase: yerra por tanto algún autor que la hace de 1.ª
  8. a b En cuanto al número de orden que hacía la concesionaria de la grandeza entre los poseedores del condado, le asignan el XVII tanto Antonio Ramos (op. cit. 1777, dedicatoria) como el Marqués de Siete Iglesias (op. cit., p. 195) y el Conde de los Acevedos (op. cit., p. 385), pero Roberto Moreno Mórrison la tiene por XVIII condesa (loc. cit.) La diferencia podría deberse a haber computado este autor como titular a Carlota Osorio y Cárdenas, nieta del XIII conde. El Elenco publicado por Hidalguía sigue a Moreno Mórrison.
  9. a b Las martiniegas, salín, aduana y portazgo de la ciudad de Badajoz y su tierra fueron concedidas a perpetuidad por el rey Juan II de Castilla a Fernán Yáñez de Jerez, su vasallo y secretario, mediante título despachado el 28 de febrero de 1441. El oficio perpetuo de alférez mayor de la ciudad de Jerez de los Caballeros, con vara de regidor en su ayuntamiento, fue enajenado por la Real Hacienda en favor de Diego de Vega, señor del Carbajo y caballero de Santiago, poseedor de la regalía antes reseñada, a quien se despachó real título de Felipe II el 20 de octubre de 1584. Antonio Ramos, op. cit. 1777, dedicatoria.
  10. a b Torreón o castillo de la Puebla del Maestre, o casa fuerte del Maestre Alonso de Cárdenas, en Castillosnet.org.
  11. a b Garci López de Cárdenas, padre del Maestre y comendador mayor de León en la Orden de Santiago, fue natural y señor de la casa de los Cárdenas de Ocaña. En la iglesia parroquial de San Pedro de esta villa, donde ya estaban sepultados algunos antepasados suyos, este señor fundó y dotó largamente una hermosa capilla, donde se mandó enterrar (F. de Rades, op. cit., f. 69r). El patronato siguió en la casa de la Puebla del Maestre.
  12. a b Memorial del pleyto de don Luis de Cárdenas y Toro, vezino de la villa de Llerena, con doña Brianda de Cárdenas y Mendoça, muger de don Gastón Ruiz de Corella, Conde de Cocentayna, y por muerte de la dicha Condesa, con doña Guiomar de Cárdenas, hija de los dos Condes [sobre la tenuta y posesión del Condado de la Puebla del Maestre] (Madrid, 1609, en la imprenta de Miguel Serrano de Vargas, 34 h. infolio). Existe un ejemplar en la Real Biblioteca de Madrid (sig. XIV/3001). Véase su reseña bibliográfica en IBIS. La fundación del mayorazgo, a los ff. 2v-15v.
  13. Gonzalo Fernández de Oviedo, op. cit., I, pp. 4-5, 10 y 16.
  14. a b c d Carlos de Ayala Martínez. «García López de Cárdenas», en el Diccionario biográfico español (Real Academia de la Historia). Consultado el 28 de mayo de 2024.
  15. Tuvo esta encomienda por merced del maestre Suárez de Figueroa según refiere Rades (op. cit., f. 55r), en un pasaje donde confunde al Garci López comendador de Socovos con su hijo de igual nombre que fue trece y comendador mayor de León.
  16. La Cabalgada de Vera y Zurgena fue una acción militar de acoso y saqueo lanzada en febrero de 1407 por Fernán García de Herrera, mariscal de Castilla, contra dichas plazas fronterizas del reino nazarí de Granada. El ejército cristiano estaba dividido en tres contingentes: dos de ellos combatieron bajo pendón de las ciudades de Murcia y Lorca y el otro bajo el estandarte del citado mariscal, a quien acompañaban los comendadores santiaguistas de Socovos (Garci López de Cárdenas) y Moratalla (Gonzalo Fajardo). Véase Juan Torres Fontes, «La regencia de don Fernando el de Antequera y las relaciones castellano-granadinas (1407-1416)» [1.ª entrega], en Miscelánea de estudios árabes y hebraicos n.º 14 (1965), pp. 137-167.
  17. F. de Rades, op. cit., Calatrava, f. 62r.
  18. El mayorazgo de los Cerones de Sevilla, con casas principales en la colación de la Magdalena, frente al colegio de San Acacio, fue fundado en 1408 por este Martín Fernández, oriundo de Baeza, a quien se tiene por el primer Cerón que se estableció en Sevilla. Fue veinticuatro y mayordomo de esta ciudad, y el rey Enrique III le hizo merced de la alcaldía mayor de ella y de la alcaidía de sus Reales Alcázares y Atarazanas, oficios perpetuos que vinculó en dicha casa y que se sucedieron durante dos siglos en su varonía. El fundador también dotó la capilla mayor de dicha iglesia parroquial, obteniendo su patronato, y en 1387 actuó como testaferro de Alonso Fernández Marmolejo comprando la villa de Bornos a Sancha Ruiz de Baeza, mujer de Pedro Ponce de León, señor de Marchena. R. Sánchez Saus, op. cit., I, pp. 79-82, y Diego Ortiz de Zúñiga, Anales eclesiásticos y seculares de la muy noble y muy leal ciudad de Sevilla, t. II (Madrid, 1795), pp. 331 y 397. La Torre de Guadiamar, sita en el municipio de Benacazón y llamada también Torre de Segoviola o de Martín Cerón, dio denominación al mayorazgo de los Cerones, y en 1631 al vizcondado previo al condado de los Arenales (cancelado al crearse este título de conde), y desde 1929 a un condado creado en recuerdo de aquel antiguo estado de los Cerón.
  19. F. de Rades, op. cit., f. 60v.
  20. Como precedente de la estrategia de Alonso de Cárdenas de aliarse con los Guzmanes para alcanzar el maestrazgo de Santiago, cabe citar las correrías andaluzas de su padre, Garci López de Cárdenas, junto al maestre Don Enrique de Aragón, cuando este se rebeló contra el rey Juan II de Castilla. En 1443 el rey envió a Sevilla al infante, su primo y cuñado, para que aviniese al conde de Niebla don Juan y a su tío Alonso Pérez de Guzmán, señor de Ayamonte, que se habían enzarzado en una sangrienta guerra familiar. Don Enrique logró en efecto poner treguas entre ellos, e incluso los atrajo a su partido, opuesto al del valido Álvaro de Luna. El señor de Ayamonte le apoyaba abiertamente y el conde de Niebla con tibieza, y viendo el maestre que contaba con tan poderosos partidarios, cuyos dominios confinaban con los de la Orden de Santiago, se lanzó a una audaz rebelión, apenas solapada, durante la cual se adueñó de un vasto territorio que se extendía por Extremadura y los reinos de Sevilla y Córdoba. En esta campaña tuvo por principales lugartenientes al conde de Arcos y a Garci López de Cárdenas, comendador mayor de León. Con ellos tomó Córdoba y Carmona y puso cerco a Sevilla, pero entonces cambió el signo de la guerra porque el conde de Niebla se pasó al bando del rey. El maestre hubo de retirarse a Ocaña, pero solo la muerte, que oportunamente le sobrevino en 1445, puso fin a su descabellada aventura. Diego Ortiz de Zúñiga, Anales eclesiásticos y seculares de la muy noble y muy leal ciudad de Sevilla, t. II (Madrid, 1795), pp. 419-423.
  21. F. de Rades, op. cit., f. 61r.
  22. Según tales informaciones, procedentes al parecer de José Pellicer, Garci López de Cárdenas estuvo casado con María Osorio, hija de Lope Álvarez Osorio, señor de Cervera, El Congosto y otros vasallos en tierras de Cuenca y comendador mayor de León en la Orden de Santiago, y de Blanca de Figueroa, su mujer, y nieta de Juan Álvarez Osorio, señor de Villalobos, y de Aldonza de Guzmán, de los señores de Toral. Según la misma fuente, Lope Álvarez Osorio testó en 1441 y murió poco después, sucediéndole en dicha encomienda y en el señorío de Cervera su yerno Garci López de Cárdenas. Y en el señorío de Congosto le sucedió su hijo García Álvarez Osorio, que en 1459 vivía casado con Aldonza (o Aldara) de Guzmán, con quien tuvo varios hijos. El segundo de ellos, llamado como su abuelo Lope Álvarez Osorio, fue comendador de Socovos en la Orden de Santiago y casó con Constanza de Cárdenas, su prima carnal, hermana de Alonso el Maestre e hija de Garci López de Cárdenas y de María Osorio. Todo esto se lee en la «Tabla genealógica de la familia Osorio, señora del Congosto», ms. s.a. de Salazar y Castro, que declara tomar los datos de Pellicer. RAH, Colección Salazar, lib. 9/306 (antiguo D-31), fol. 253v. Varios autores siguen a este papel, como los Carraffa y Augusto de Burgos, que tienen al maestre Cárdenas por hijo de la Osorio (loc. cit.) Pero Jaime de Salazar tiene por una misma persona al Lope Álvarez Osorio hijo los dichos señores de Villalobos y al comendador de Socovos que casó con Constanza de Cárdenas, pese a que según Pellicer fueron dos Lopes: abuelo y nieto, y respectivamente suegro y yerno de Garci López de Cárdenas. Véase Jaime de Salazar y Acha, «Los Osorio: un linaje de más de mil años al servicio de la Corona» en los Anales de la Real Academia Matritense de Heráldica y Genealogía n.º 4 (1996-1997), pp. 143-182, p. 165. En cuanto a su mujer, Constanza de Cárdenas, fue hermana y no hija de Garci López de Cárdenas, el comendador mayor, según el Nobiliario de López de Haro, t. I, p. 297.
  23. Sobre esta señora dice Fernández de Oviedo, por boca de su personaje el Acaide, que la «muger de Juan Zapata el ayo se decía doña Constanza de Cárdenas; la qual yo conoscí e vi muchas veces seyendo yo muy muchacho y ella asaz vieja. Pero con toda su edad, mostraba aver seydo en su tiempo hermosa muger; y por ella se ynvenciona Juan Zapata e pone por timbre de su yelmo, sobre la zapata, una golondrina que trae en el pico una piedra llamada celidonia...» Gonzalo Fernández de Oviedo, Batallas y quinquagenas, vol. II (Madrid: RAH, 2000), pp. 344-345. Todo el diálogo XXXII de este libro está dedicado a Juan Zapata (pp. 337-350).
  24. Fernández de Oviedo menciona a Juan Zapata el Ayo como «criado que fue del infante Don Enrique, maestre de Sanctiago, el cual le dio la encomienda de Hornachos» (op. cit., II, p. 341). Pero tal encomienda, y la dignidad de trece, fueron merced del maestre Alonso de Cárdenas su cuñado, según consta por la Crónica de Rades (op. cit., fol. 72v).
  25. López de Haro dedica a los Zapata, señores y condes de Barajas, el cap. V del lib. IX de su Nobiliario (op. cit., 2.ª parte, pp. 220-234; la descendencia de Constanza de Cárdenas, a partir de la p. 231).
  26. a b El Maestre Alonso de Cárdenas falleció el 1.º de julio de 1493 (A. de Burgos, op. cit., p. 138, y J. Moreno de Guerra, op. cit. 1924, p. 651). El cronista Rades da en cierto pasaje como año de su muerte el de 1499 (op. cit., f. 72r), dato que corresponde a la concesión del maestrazgo en administración a los Reyes Católicos.
  27. Sucedió a sus padres como señor de Cervera, pero poco después vendió dicha jurisdicción al obispo de Cuenca fray Lope de Barrientos, según afirma Salazar y Castro —siguiendo a Pellicer— en el manuscrito antes citado.
  28. a b Antonio Paz y Meliá, en una de sus notas a la Crónica de Enrique IV de Alonso de Palencia (t. III, Madrid, 1905, p. 104), cita a Pedro Barrantes Maldonado, que en el t. II de sus Illustraciones de la casa de Niebla (publicado por la Real Academia de la Historia en su Memorial Histórico Español, t. X, Madrid, 1857) nombra por hijo del duque Juan Alonso a un Juan de Guzmán que «casó con hija del maestre de Santiago Don Alonso de Cárdenas» (p. 219), pero en otro lugar dice lo mismo de otro hijo del duque, llamado Pedro de Guzmán el del Lunar (p. 240). Concluye Paz que «si no hay confusión, es preciso suponer que casaron los dos hermanos con dos hermanas, hijas del Maestre», y en efecto así lo expresa el propio Barrantes en un pasaje que dicho editor pasa por alto (p. 265), donde refiere que Alonso de Cárdenas, antes de ser por primera vez maestre de Santiago, y «para tener favor bastante para lo alcançar a ser, paresçiéndole que no avía otro señor de puertos abaxo tan pujante e próspero e de quien tanto favor e ayuda pudiese reçibir para su propósito como de Don Henrrique de Guzmán, duque de Medina, conde de Niebla, para lo tener grato, ofrecióse en su serviçio e llevó partido dél, e dos hijas que tenía casólas con dos hermanos bastardos del Duque: la mayor, que se llamava Doña Juana de Cárdenas, desposó con Don Pedro de Guzmán, que llamaron del Lunar, hermano del Duque; e como Don Pedro del Lunar murió, la tornó a casar con Don Pedro Puertocarrero, hijo segundo del maestre Don Juan Pacheco, de quien desçiende hoy el marqués de Villanueva del Fresno, e la otra hija que le quedava casóla con Don Juan de Guzmán, que otros llaman Don Juan Urraco, hermano bastardo del duque de Medina; e todo esto hazía para que con el favor del Duque se pudiese señorear del maestrazgo, la mayor parte del qual confina con tierra de Sevilla, la qual en esta sazón tenía el duque de Medina».
  29. Gutierre de Cárdenas fue I señor de Maqueda y VII de Cárdenas, contador mayor de Castilla, maestresala de la reina Isabel, con quien tuvo gran valimiento, y mayordomo mayor del Príncipe Juan. En 1480 su primo el Maestre le nombró también trece de la Orden. Fue el padre de Diego de Cárdenas y Enríquez, I duque de Maqueda y I adelantado mayor del reino de Granada (oficio que algunas fuentes atribuyen por error al I conde de la Puebla). Véase Marqués de Siete Iglesias, «Los treces de la Orden de Santiago», en Hidalguía n.º 154-155 (1979), pp. 523-597, p. 545. Este autor menciona a continuación, también como primo carnal del maestre Cárdenas, a Rodrigo de Cárdenas, que era comendador de Valencia del Ventoso desde antes de su llegada al maestrazgo y a quien también nombró trece en 1480. No se le ha de confundir con el padre de Gutierre, también llamado Rodrigo, y que fue comendador de Socovos, en la misma Orden. El comendador de Valencia del Ventoso debía de ser hijo de otro hermano del padre del maestre. Renunció a dicha encomienda hacia 1490 para que le fuera dada a su hijo Juan. Poseía la jurisdicción del Carbajo, de la que fundó mayorazgo en Llerena el 30 de diciembre de 1494 en cabeza de su hijo Francisco de Cárdenas, que fue comendador de los Santos de Maimona, también por merced del maestre su tío (Barredo de Valenzuela y Alonso de Cadenas, op. cit., p. 83). Por ulteriores agregaciones quedaron vinculados a la casa del Carbajo el alferazgo perpetuo de Jerez de los Caballeros y las aduanas y portazgos de Badajoz. Y hacia 1775, este mayorazgo y señorío se acumuló a la casa de la Puebla del Maestre, al recaer esta —por extinción de la descendencia del primer conde— en la IV marquesa de la Torre de las Sirgadas, que era nieta y sucesora de Isabel de Vega, señora del Carbajo y poseedora del citado vínculo, alferazgo y regalía, mujer del II marqués de la Torre de las Sirgadas (véase este marquesado).
  30. F. de Rades, op. cit., f. 73r.
  31. La genealogía de esta señora, en Luis de Salazar y Castro, Historia genealógica de la casa de Lara, t. III (Madrid, 1697), p. 376.
  32. A. Barredo de Valenzuela y A. Alonso de Cadenas tienen también por hijo del Maestre a un «Pedro de Cárdenas, comendador de Hornachos» (op. cit., p. 81), sin duda por confusión con Pedro Zapata de Cárdenas, que a fines del siglo XV obtuvo dicha encomienda de la Orden de Santiago. Pero este Pedro no era hijo suyo, sino sobrino: hijo mayor de su hermana Constanza y de Juan Zapata el Ayo, anterior comendador de Hornachos. El Maestre Cárdenas concedió dicha encomienda a su cuñado, y después la de Montemolín a su sobrino Pedro, según refiere Rades (op. cit., fol. 72v). Y cuando murió el Ayo, en la encomienda de Hornachos le sucedió su hijo Pedro, pasando la de Montemolín de este a su hermano siguiente: Juan Zapata el Negro.
  33. Afirma Fernández de Oviedo que esta hija del maestre fue bastarda: «Tuvo el maestre dos hijas: la una legítima e la otra bastarda. La legítima llamada doña Juana de Cárdenas, que fue mujer de don Pedro Portocarrero, señor de Moguer (en la qual ovo muchos hijos); e la otra se llamó doña Leonor de Cárdenas, que casó con don Johan Urraco de Guzmán, hermano del duque de Medinasidonia» (op. cit., I, p. 5). Creemos, empero, que las dos nacieron del matrimonio del maestre con Leonor de Luna, cuyo nombre llevaba precisamente la menor, y que Oviedo atribuye a ésta por error la bastardía que afectaba a Juan Urraco de Guzmán, su marido, de quien omite en cambio esta mancha de nacimiento. Rafael Sánchez Saus también la tiene por «hija del maestre de Santiago don Alonso de Cárdenas y de doña Leonor de Luna».
  34. Andrés Bernáldez (cura de los Palacios), Memorias del reinado de los Reyes Católicos (Madrid, 1962), p. 129, y Diego Ortiz de Zúñiga, Anales eclesiasticos y seculares de la muy noble y muy leal ciudad de Sevilla (Sevilla, 1893), t. III, p. 138.
  35. a b Durante su desavenido e infecundo matrimonio con María de la Cerda, de los condes de Medinaceli, el I duque de Medina Sidonia se amancebó sucesivamente con cuatro señoras de calidad, en las que procreó numerosos hijos adulterinos. La primera fue Isabel de Meneses, con quien contrajo matrimonio una vez viudo, legitimando así a dos hijos que había tenido con ella: Enrique, que sucedió como II duque, y Alfonso de Guzmán. Luego tuvo una breve relación con Guiomar, la hija del alcaide de Sanlúcar, de la que tuvo por hijo a Pedro, que fue el primer marido de Juana de Cárdenas, señora de la Puebla del Maestre. Y después tuvo por amantes a dos deudas suyas: Teresa y Urraca de Guzmán. Teresa de Guzmán (a quien Salazar y Castro llama Elvira) debía de ser pariente lejana suya y procreó una hija también llamada Teresa de Guzmán, a quien su padre mandó en dote el señorío de Ayamonte, Lepe y la Redondela al casarla con Pedro de Zúñiga, primogénito del duque de Béjar. Y a Teresa le sucedió en el tálamo Urraca de Guzmán, que era doble prima hermana del duque, y tuvo con él a Juan Urraco, el marido de Leonor de Cárdenas, y a Lorenzo de Guzmán, que fue clérigo. Y además tuvo otros hijos con mujeres de inferior calidad. Rafael Sánchez Saus, Linajes sevillanos medievales (Sevilla: Guadalquivir, 1991), t. I, pp. 117-121 (y árbol XVI, en el tomo II, p. 370). Sobre Juan Urraco de Guzmán nota este autor que «no tuvo el aprecio de su padre y fue descartado para la herencia que por la calidad de su madre le correspondía, e incluso para la del señorío de Lepe, Ayamonte y la Redondela».
  36. Expone su descendencia Alonso López de Haro, Nobiliario genealógico de los reyes y títulos de España, t. I (Madrid, 1622), pp. 63-65.
  37. Sobre Pedro de Guzmán dice Sánchez Saus (ibíd.) que su padre le tuvo con una «doncella de buen linaje» y que «fue siempre el hijo preferido del duque, y en esta predilección era seguido de toda Sevilla, que le apreciaba por su afabilidad y arrogante figura. [...] Casó con Juana de Cárdenas, hija del entonces comendador mayor de León en la Orden de Santiago, luego maestre.» Su madre se llamó Guiomar, y según Alonso de Palencia fue hija única y huérfana de un «excelente sujeto» cuyo nombre omite, alcaide de Sanlúcar, quien le dejó en herencia 11.000 doblas, pero con poca prudencia la confió en su testamento a la protección del rijoso duque don Juan Alonso, su señor. Este debió de casarla tras haberla gozado, pues Palencia dice que «dominada por duro tirano, vivió con gran honestidad después del nacimiento de Pedro». Refiere el mismo cronista que Enrique de Guzmán, II duque de Medina Sidonia, cuando rompió hostilidades con el marqués de Cádiz, escogió como auxiliares para esta guerra a sus jóvenes hermanos Pedro y Alfonso de Guzmán, «menos consagrados a los militares ejercicios de lo que las empresas guerreras exigían». Y que ambos fueron muertos el 6 de marzo de 1473 en Alcalá de Guadaira, donde les tendieron una celada los muy avezados partidarios de los Ponce de León. Alonso de Palencia, Crónica de Enrique IV, t. III (Madrid, 1905), cap. VIII, pp. 97-105.
  38. Pedro Portocarrero el Sordo, señor de Moguer, falleció el 20 de julio de 1519 en Jerez de los Caballeros, en cuyo castillo fue abierto su testamento el siguiente día 27 por el escribano Ruy Gonzalves en presencia de Juan Portocarrero, Alonso de Cárdenas y Alonso Pacheco, hijos del finado, y de Antón Rodríguez, teniente corregidor de la villa (que obtendría el título de ciudad seis años después). Hizo dicho testamento en Villanueva del Fresno el 16 de mayo de 1518 a fe del escribano Juan de Mata, y en él mandaba ser enterrado en el monasterio de Santa Clara de Moguer, donde era profesa su hija Catalina, «en la capilla mayor de dicho Monasterio donde están enterrados mis abuelos, e que abran un arco en la pared de la dicha capilla a la mano derecha del sagrario, donde quepan nuestros bultos de doña Juana de Cárdenas mi mujer y mío». El testamento original obra en el Archivo de los Duques de Medinaceli; un traslado de la apertura se conservaba en el Monasterio de Santa Clara de Moguer, y en la actualidad está en el Archivo Diocesano de Huelva. F. Correa, op. cit. II.
  39. Hubo esta encomienda y dignidad, siendo ya difunto su padre el maestre Pacheco, por merced de su suegro el maestre Cárdenas (no reseñada por Rades), y le sucedió en ella su hijo el II marqués. Salazar y Castro, Los comendadores de la Orden de Santiago (Madrid, 1949), I, p. 288.
  40. Compró la mitad de Purchena en 630.000 maravedís a Gonzalo de Saavedra, hijo de Fernán Arias y de Juana de Mendoza, y la mitad de Chucena a Rodrigo de Orellana, con su jurisdicción; la otra mitad de Chucena la compró a Gonzalo Mariño de Ribera. Rafael Sánchez Saus, Linajes sevillanos medievales (Sevilla: Guadalquivir, 1991), t. I, p. 246, con remisión a M.ª Mercedes Borrero Fernández, El mundo rural sevillano en el siglo XV: Aljarafe y Ribera (Sevilla: Diputación, 1983), pp. 51-52. En el mismo lugar dice Saus que Pedro Portocarrero «casó con doña Juana de Cárdenas, señora de la Puebla del Maestre, hija del maestre de Santiago don Alonso de Cárdenas. Esta señora era viuda de don Pedro de Guzmán el del Lunar, hijo del duque de Medina Sidonia».
  41. «Según consta en expedientes de Santiago y Calatrava», ápud Barredo de Valenzuela y Alonso de Cadenas, op. cit., t. VI (2001), p. 103.
  42. López de Haro enuncia doce hijos de este matrimonio (op. cit., pp. 131-132). C. Merino Gayubas enumera hasta dieciséis (op. cit., I, pp. 200-202), que en realidad son quince porque a Leonor la cuenta dos veces. Sánchez Saus solo se ocupa de cinco de ellos: Juan, Alonso, Garci López, Beatriz e Inés (op. cit., I, y II, p. 404). De Beatriz Portocarrero dice este autor que casó con Pedro de Vadillo y tuvo sucesión en este linaje, remitiéndose para su filiación como hija de Pedro el Sordo a Juan Ramírez de Guzmán, Libro de algunos de los Ricoshombres... (ms. 83-7-12 de la BCC). Pero la Beatriz Portocarrero que casó con Pedro de Vadillo figura ya suscribiendo un arrendamiento con su marido en 1473, el mismo año en que casaron Pedro Portocarrero y Juana de Cárdenas, por lo que no podía ser hija de este matrimonio. Debía de ser más bien hermana del Sordo: una de las seis hijas que, según el mismo Saus, tuvieron los primeros marqueses de Villena. Dichos Pedro de Vadillo y Beatriz Portocarrero, su mujer, vecinos de Sevilla, están así documentados en 1473 por Pedro Rubio Merino, «Permuta de la heredad de Valdeflores en Aznalcázar (Sevilla) por la doceava parte de las islas de Lanzarote y Fuerte Ventura entre don Sancho de Herrera el Viejo y don Sancho de Herrera el Mozo, su sobrino, vecinos de Sevilla» en Francisco Morales Padrón (coord.) IV Coloquio de historia canario-americana, vol. 2 (Las Palmas, 1982), pp. 249-312, p. 253.
  43. Antonio Ramos, op. cit. 1777, p. 48; Salazar y Castro, Los comendadores de la Orden de Santiago (Madrid, 1949), I, p. 288.
  44. Los primeros marqueses de Villanueva del Fresno tuvieron por hijos, entre otros, a Pedro Portocarrero, II marqués, que murió sin sucesión; a Alonso Portocarrero, que sucedió al anterior como III marqués de Villanueva del Fresno y casó con Leonor Portocarrero, su prima, de la que tuvo descendencia en que siguió la casa; a Cristóbal Osorio Portocarrero (1502-1571), señor de Montijo, que casó con María Manuel de Villena, de los señores de Cheles, padres del I conde de Montijo; a Juana Portocarrero, que casó con Luis Pacheco de Silva Girón y Alarcón, su deudo, señor de Villarejo de Fuentes y Alconchel; a María Osorio, mujer de Juan Portocarrero, su primo, III conde de Medellín, con prole en que siguió esta casa, y a Leonor Enríquez, que dio su mano a Luis Zapata, su primo carnal. Barredo de Valenzuela y Alonso de Cadenas, op. cit., t. VI (2001), p. 103.
  45. Alonso López de Haro, al exponer la casa de la Puebla, confunde a esta señora con su sobrina Leonor Portocarrero, que casó con el III marqués de Villanueva del Fresno, hijo 2.º de Juan Portocarrero, el primogénito. Pero al exponer la casa de Villanueva, el mismo autor filia a la marquesa como prima de su marido e hija de Alfonso Pacheco y de María de Castro (Nobiliario, t. II, pp. 132 y 359).
  46. C. Merino Gayubas desdobla a esta señora en dos: «Leonor Portocarrero, monja franciscana en 1520» y «Leonor de Luna Portocarrero, monja y abadesa en el mismo monasterio [parece referirse al de Moguer]» (pp. 201 y 202).
  47. Sobre este suceso, referido en la ficción por el Alcaide, comenta Sereno: «Pero esa señora doña Leonor de metió monja, e porque le quitaron su esposo tomó a Jesuchristo en su lugar, e al presente es abadesa del monesterio de Sancta Ynés, de la Orden de Sancta Clara, e una sancta religiosa.» Gonzalo Fernández de Oviedo, op. cit., I, p. 14.
  48. De este señor cuenta Gonzalo Fernández de Oviedo que fue también «sordo como su padre» (op. cit., I, p. 14).
  49. Isabel de Mendoza y Toledo fue hija de Álvaro de Mendoza, señor de Bella y castellano de Castilnovo en Nápoles, del Consejo Colateral de este reino, comendador de Mestanza en la Orden de Calatrava, gentilhombre de la Cámara de Felipe II, que se halló en la Batalla de San Quintín (1557), y de Ana de Toledo, su mujer; nieta de Pedro González de Mendoza y Carrillo, señor de la Torre de Esteban Hambrán, y de Isabel de Alarcón, II marquesa de la Valle Siciliana, y materna de Pedro de Toledo, de los duques de Alba, virrey de Nápoles, y de María Osorio Pimentel, su primera mujer, II marquesa de Villafranca. Antonio Suárez de Alarcón, Comentarios de los hechos del señor Alarcón, marqués de la Valle Siciliana y de Renda (Madrid, 1665), p. 449.
  50. Gonzalo Fernández de la Lama era hijo y sucesor de Antonio de la Lama (†1550), señor de los cotos citados en el texto, que sirvió al Emperador en la Guerra de las Comunidades, y de Juana de Monjaraz, su mujer; nieto de Gómez Fernández de la Lama (†1512), III señor de la casa de la Lama, caballero de Santiago, y de Inés de Toledo, su mujer, hija sacrílega de Gutierre Álvarez de Toledo, I señor de Alba de Tormes, obispo de Palencia, conde de Pernía y arzobispo de Sevilla y de Toledo; nieto materno de Gonzalo de Monjaraz y de Juana de Hortigosa, dueños de las citadas heredades de Extremadura y de muchas otras en el Espinar, las Vegas, valle del río Moros y Ortigosa del Monte, de las que le fundaron vínculo en 1517, y biznieto de Gabriel Fernández de la Lama (†1493), II señor de esta casa, maestresala del rey Enrique IV, y de Marina de Valdés, su mujer, que fue hermana de Francisco de Valdés (†1504), natural y regidor de Zamora, del Consejo de los Reyes Católicos, que se halló en la Batalla de Toro y fundó el monasterio jerónimo de Salamanca, y de Diego Meléndez de Valdés (†1506), obispo de Salamanca, de Astorga y de Zamora, mayordomo del papa Alejandro VI. Para la casa de la Lama, véase Francisco Fernández de Béthencourt, Historia genealógica y heráldica de la monarquía española: Casa Real y grandes de España, t. V (Madrid, 1904), pp. 380-384.
  51. Isabel de la Cueva y Gonzalo Fernández de la Lama tuvieron por hijos a Gabriel, que les premurió mozo, y a Juana de la Lama y de la Cueva (c.1545-1584), III marquesa de la Adrada y señora de la Lama, que en 1569 fue distinguida con la Rosa de Oro por el papa San Pío V. Casó dos veces: la primera hacia 1565 con Gabriel de la Cueva, su deudo, V duque de Alburquerque, virrey de Navarra y gobernador de Milán, y segunda vez en 1580 con Juan de la Cerda y Manuel de Portugal, V duque de Medinaceli, etc., viudo con prole de Isabel de Aragón. Del primero tuvo dos hijas: 1.- María de la Cueva, que al morir su padre en 1571 pretendió sucederle en la casa de Alburquerque pero fue deposeída por sentencia de 1574 en favor de Beltrán de la Cueva y Castilla, su primo carnal, y murió soltera poco después en vida de su madre. Y 2.- Ana de la Cueva y de la Lama, natural de Milán, que casó con Juan de la Cerda y Aragón, su hermanastro, VI duque de Medinaceli, caballero del Toisón de Oro, el cual volvió a casar con Antonia de Toledo, de los marqueses de Velada, y de esta tuvo sucesión masculina en que siguió la casa de Medinaceli. De Ana de la Cueva tuvo este duque por hija a Juana de la Cerda y de la Cueva (n.1591), mujer de Antonio de Aragón y Moncada, VI duque de Montalto y IV de Bivona, con sucesión en que siguieron estas grandezas. Y del segundo matrimonio de Juana de la Lama con el V duque de Medinaceli nacieron: 3.- Gonzalo de la Cerda y de la Lama (1581-1644), IV marqués de la Adrada, caballero de Santiago, que casó en 1603 con Catalina de Arteaga y Gamboa, señora de estas casas en Vizcaya, y tuvo sucesión en que siguió la casa de la Adrada, agregándosele por entronque la de los condes de Baños y marqueses de Leyva. Y 4.- María Catalina de la Cerda y de la Lama (1583-1606), que fue la segunda mujer de Juan Andrés Hurtado de Mendoza, V marqués de Cañete, caballero de Alcántara, montero mayor del rey Felipe IV, y no tuvieron posteridad. Francisco Fernández de Béthencourt, op. cit., V, pp. 261-264.
  52. Inés de Velasco y Jerónimo de Acevedo y Zúñiga, IV conde de Monterrey, tuvieron entre otros hijos a Gaspar de Zúñiga y Acevedo, el V conde, virrey de la Nueva España y del Perú, que casó con Inés de Velasco y Aragón, su prima carnal, de los duques de Frías, y tuvieron sucesión; a Baltasar de Zúñiga y Velasco, embajador del rey Felipe III en Bruselas y París y cerca del Emperador Rodolfo II, y ayo y primer ministro de Felipe IV, y a María Pimentel de Fonseca, que casó con Enrique de Guzmán, II conde de Olivares, embajador de Felipe II en Roma y virrey de Sicilia y de Nápoles. Y estos tuvieron por hijo y sucesor a Gaspar de Guzmán, que sucedió a su tío Baltasar como valido de Felipe IV y gobernó con inmenso poder, llamado el Conde-Duque a raíz de que dicho rey le creara duque de Sanlúcar la Mayor. Con descendencia.
  53. Para esta casa véase Nicolás Hobbs, «Duques de Alcalá de los Gazules», en Grandes de España (antigua web Grandesp.org.uk, visible en el espejo Archive.is).
  54. El condestable Bernardino Fernández de Velasco (1454-1512), III conde de Haro y I duque de Frías, recibió en 1492 las villas de Sorbas y Lubrín, que los Reyes Católicos le repartieron en el reino de Granada, hoy pertenecientes a la provincia de Almería. Y en julio de 1502 las permutó con su pariente Diego López de Haro, señor del Carpio, por las villas del Busto y la Revilla, en la actual provincia de Burgos, que este había heredado de su padre. El señorío jurisdiccional de Sorbas y Lubrín se extendía de Noroeste a Sudeste desde la sierra de los Filabres hasta el mar, abarcando aproximadamente los actuales términos municipales de ambas villas y parte del de Carboneras. La villa burgalesa de la Revilla siguió en los Velasco y dio denominación al condado de la Revilla, creado en 1619 por Felipe III en favor de Alonso de Velasco y Salinas. Véase Juan Miguel Mendoza Garrido, «Diego López de Haro I y el señorío almeriense de la casa del Carpio (1502-1525)», en F. Andújar Castillo y J.P. Díaz López (coord.), Los señoríos en la Andalucía moderna: el marquesado de los Vélez (Instituto de Estudios Almerienses, 2007), pp. 445-462.
  55. Para los señores y marqueses del Carpio, véanse Gonzalo Fernández de Oviedo, Batallas y quinquagenas, vol. III (Madrid: RAH, 2000), pp. 237 y ss.; Margarita Cabrera Sánchez, «El señorío de El Carpio en el siglo XV», en Aragón en la Edad Media n.º 14-15 (1999), pp. 227-242, y Juan Carlos de Guerra, «Ilustraciones genealógicas de los linajes vascongados contenidos en las Grandezas de España compuestas por Esteban de Garibay» [15.ª entrega], apéndice 7.º, en la Revista Internacional de los Estudios Vascos, vol. 15, n.º 1 (1924), pp. 157-160.
  56. Este mayorazgo tenía casas principales en la ciudad de Écija y lo integraban la villa de Chucena; la mitad de la heredad de Purchena, con sus vasallos, tierras, jurisdicción y rentas; la casa y aduana que poseían en Sevilla, con sus derechos, y otros tributos, y una serie de heredades en Jerez de la Frontera: Asta, Prunes y Ventosilla, Buhedos, Graderas, Espartinas, y la tercera parte de las aceñas del rey. El 10 de mayo de 1520 el Emperador dio real licencia al primer poseedor y a su mujer para que pudiesen agregar la villa de Antella y otros bienes. A raíz de ello los señores de Chucena se lanzaron a una serie de adquisiciones en la zona aljarafeña: en 1521 compraron la heredad de Huégar a Luis de Montemayor y una cuarta parte de Alcalá de Juana de Orta al convento de Santa María de las Dueñas, junto con los derechos en las islas de Canaria que pertenecían a María de Ayala; en 1522 las otras tres cuartas partes de Alcalá de Juana de Orta a Sancho de Herrera y a su hermana Juana de Mendoza, con los pinares de Hinojos, y en 1523 la fortaleza y cortijo de Alpízar, en la Palma del Condado, a Francisco del Alcázar. R. Sánchez Saus, op. cit., I, p. 244, § 21, con remisión a Martín Sánchez Franco, Estudio histórico del marquesado de Alcalá de la Alameda (Huelva: Diputación, s.a. [1975]), pp. 41, 105 y 153-157, y al ms. de Esteban de Garibay De Don Juan López Portocarrero, I Marqués de la Alameda, y de su progenie y sucesión, obrante en la RAH, col. Salazar, al lib. C-2, f. 176v.
  57. «E casó por amores el dicho don Garçi López con esta señora, la qual fue linda dama e generosa, e natural de Valencia del Çid», según refiere Gonzalo Fernández de Oviedo (op. cit., I, p. 14).
  58. La genealogía de Francisca Enríquez, 3.ª mujer del I marqués de Alcalá de la Alameda, está expuesta por Salazar y Castro en su «Tabla genealógica de la familia Enríquez, señores de Orce y Galera», ms. s.a. RAH, Colección Salazar, lib. 9/321 (antiguo D-47), ff. 104-105. Este papel también expresa que de dicho matrimonio nacieron dos hijas: Juana e Inés, y que la mayor casó con Felipe de Guzmán y Aragón, hijo de los VII duques de Medina Sidonia. Añadimos que esta señora murió sin prole y le sucedió en la casa su citada hermana Inés Portocarrero, que casó con Juan Delgadillo de Avellaneda, primogénito del Bernardino de Avellaneda, I conde de Castrillo, a quien premurió, y tuvieron posteridad en que siguieron sus estados.
  59. a b La ascendencia de costados del I marqués de Alcalá de la Alameda y de Elvira de Cárdenas, su 2.ª mujer, así como la línea descendiente de ambos por la que siguió su casa hasta recaer en la de Medinaceli, están expuestas por Luis de Salazar y Castro, Árboles de costados de gran parte de las primeras casas de estos reynos cuyos dueños vivían en el año de 1683 (Madrid, 1795), p. 11.
  60. Pese a que eran hermanos enteros y ambos alcanzaron la adultez, dos hijos de este matrimonio llevaron el mismo nombre de pila de Alonso o Alfonso: el segundogénito, que heredó el nombre y los estados del maestre Alonso de Cárdenas, su abuelo materno, y el quintogénito, que lo llevó en memoria de Alfonso Téllez Girón, señor de Frechilla, su bisabuelo por varonía.
  61. López de Haro funde en una sola persona a este franciscano y a su hermano el arzobispo, bajo el nombre de «Don Pedro Portocarrero, fraile Francisco y Arçobispo de Granada» (p. 132). C. Merino Gayubas distingue a uno y otro (manteniendo al mitrado la profesión religiosa que el Nobiliario le atribuye erróneamente), y da noticia de las cantidades que dejó el fraile a dichos conventos, que probablemente no fueron legados sino donaciones. Gonzalo Fernández de Oviedo informa de que su nombre de pila fue Diego (op. cit., I, p. 14).
  62. Francisca Portocarrero testó en el Valle de Matamoros el 21 de enero de 1561. F. Correa, op. cit. II.
  63. Testó en Jerez de los Caballeros el 27 de noviembre de 1552 (según Merino Gayubas, loc. cit.) o de 1535 (según F. Correa, op. cit. II).
  64. Falleció en 1541 según Moreno de Guerra (op. 1924 & loc. cit.); en Perales, primeros días de enero de 1541, según Mogrobejo (loc. cit.); el 15 de enero de 1544 según la Guía de títulos de la Diputación de la Grandeza.
  65. a b c d e Marqués de Siete Iglesias, op. cit., p. 193.
  66. a b c García Carraffa, loc. cit.
  67. C. Merino Gayubas, op. cit., I, pp. 212-213.
  68. Nació en Llerena, fue bautizada el 2 de marzo de 1558 y casó el 25 de mayo de 1587; en 1615 sucedió en el donadío y alferazgo por muerte del VIII conde de la Puebla, su sobrino carnal, de quien se hablará más abajo (E. de Mogrobejo, loc. cit., p. 102). La villa de Llerena obtendría el título de ciudad en 1640.
  69. En efecto, su hijo segundo Alonso de Peralta y Cárdenas, caballero de Alcántara, nacido en Madrid en 1590, fue creado vizconde de Villahermosa de Ambite en 1666; su biznieto Luis de Peralta Cárdenas y Maldonado, IV vizconde, casó con Bernarda de Salcedo y Coterillo, II marquesa de Legarda, y su 4.ª nieta Antonia de Peralta Cárdenas y Vivanco (1719-1803), IV marquesa de Legarda y VI vizcondesa de Ambite, casó en 1736 con José de Esquivel y Rivas, quien a nombre de su mujer litigó por los mayorazgos de la Torre del Fresno y Torre del Águila, teniendo por opositores, entre otros, al duque de Medinaceli, al marqués de las Sirgadas y a la XVI condesa de la Puebla del Maestre, que ganó el pleito. Y al morir esta condesa sin descendencia, volvió a litigar por la sucesión, fallándose este pleito a favor de la marquesa de las Sirgadas, que también sucedió en el condado de la Puebla. Para la genealogía de la casa de Legarda, véase Eduardo Duque Pindado, «Los señoríos de las villas de Mingorría y San Esteban de los Patos» en Cuadernos del Tomás: Revista de estudios del C.M. Tomás Luis de Victoria n.º 5 (2013), pp. 83-94.
  70. La casa de Valda, cuyo vetusto solar radicaba en la jurisdicción de la villa de Azcoitia, en una eminencia que la dominaba, era de parientes mayores y del bando gamboíno, y uno de los tres principales linajes de este bando, junto con los Gamboa y los Guevara. Véase el Diccionario de Endika de Mogrobejo, s.v. «Balda o Valda» (v. XXIV ó IX, pp. 244-255).
  71. El mayorazgo de la Torre del Fresno, al que estaban agregados la jurisdicción de la villa de Lobón y el estado del Aguijón de Contreras, tuvo también una sucesión muy accidentada y litigiosa. La IV poseedora fue Elvira de Figueroa, casada y con prole del I marqués de Alcalá de la Alameda. Pero a esta señora le sucedió su primo carnal Alonso de Cárdenas y Valda († 1610). Después de los días de este, aunque dejaba hijos, el mayorazgo pasó por sentencia de 1612 a Alonso de Cárdenas y González († 1615), el VIII conde de la Puebla, de la línea segunda. Y al morir este sin descendencia, mediante nuevo pleito, le sucedió en ambas casas Lorenzo de Cárdenas Valda y Zárate, hijo del V poseedor de la Torre del Fresno ...
  72. a b E. de Mogrobejo, op. cit., p. 103; Nieto y Cortadellas, op. cit., p. 110.
  73. Las torres de Zárate eran dos torres fuertes medievales sitas en el lugar de Artómaña, valle de Arrastaria, municipio de Amurrio, cuadrilla de Ayala y provincia de Álava, muy cerca de la ciudad y enclave vizcaíno de Orduña. Estaban comunicadas mediante un corredor voladizo sostenido por un arco, y parece que antes que de los Zárate fueron solar de los Ayala. Hoy solo subsiste una, conocida como Torre de Artómaña. Sobre ella pueden verse: Leandro Sánchez Zufiaurre, «La Torre de Artómaña» en Arkeoikuska: Investigación arqueológica n.º 2013 (2013), pp. 49-55; su ficha por la Asociación Española de Amigos de los Castillos, o el artículo «Dos casas-torre en Arrastaria» en Ezagutu Urduna: página web sobre Orduña. Consultados estos dos el 16 de mayo de 2024.
  74. Diego Ortiz de Zárate fue uno de los nobles españoles que asistieron en Aquisgrán el 23 de octubre de 1520 a la coronación como rey de Romanos del joven Carlos I, quien le armó caballero de la Espuela Dorada en la misma ciudad a principios del año siguiente. En 1543 ingresó en la Orden de Santiago.
  75. a b c La genealogía de esta señora, en Luis de Salazar y Castro, Árboles de costados de gran parte de las primeras casas de estos reynos cuyos dueños vivían en el año de 1683 (Madrid, 1795), p. 102, y en dos manuscritos del mismo autor con los «Costados de Lorenzo de Cárdenas y Ulloa, Herrera y Velasco»: en uno le titula «Marqués de la Mota, Auñón y Bacares &c.», y en el otro «X conde de la Puebla, de Villalonso, &c.». RAH, Colección Salazar, lib. 9/294 (antiguo D-19), fol. 116, y lib. 9/295 (antiguo D-20), fol. 69.
  76. C. Merino Gayubas, op. cit., I, pp. 215-216.
  77. Ingresó en la Orden de Alcántara en 1599. Su expediente obra en el AHN bajo el n.º 280.
  78. Ingresó en la Orden de Santiago en 1612. Su expediente obra en el AHN bajo el n.º 1536.
  79. Nombrado para el cargo el 5 de diciembre de 1620, a finales de este mes solicitó licencia para pasar allá con familia y séquito (AGI, México, caja 359, R. 12, n.º 67). Se le tomó residencia en 1629 (Carta del virrey marqués de Cerralbo, AGI, México, caja 30, n.º 13). Estuvo provisto para el cargo de gobernador de la ciudad y puerto de Veracruz, que no llegó a ejercer (J. Barrientos, op. cit.)
  80. a b c d e f g h J.C. de Guerra, op. cit, apénd. 5.º, p. 409.
  81. a b E. de Mogrobejo, op. cit., p. 104; Nieto y Cortadellas, op. cit., p. 108.
  82. En 1653, como capitán general de esta provincia, emitió informe favorable a la segregación de Irún de la jurisdicción de Fuenterrabía, en cuya vista la Real Cámara y Junta de la Caballería concedió jurisdicción ordinaria propia a la villa irundarra. Bernardo Estornés Lasa, «Irún: Historia: Edad Moderna», en la Enciclopedia Auñamendi. Consultado el 6 de junio de 2024
  83. Consejero de Guerra el 21 de agosto de 1634; después miembro de la Junta de Guerra de Indias, y consejero de Indias desde el 15 de enero de 1654 (J. Barrientos, op. cit.)
  84. El 31 de enero de 1655 se libró real cédula a favor de su viuda...
  85. Ana Francisca de Portugal nació en la madrileña plazuela del Ángel y fue bautizada en la iglesia parroquial de San Sebastián, hija de los señores indicados en el texto. Fueron sus padrinos Francisco de Melo, marqués de Ferreira, y Mariana de Castro y Osorio, su madre, condesa de Tentúgal. Obra la partida en el archivo de dicha Parroquia, lib. 5.º de Bautismos, fol 230v, ápud Matías Fernández García, Parroquia madrileña de San Sebastián: algunos personajes de su archivo (Madrid: Caparrós, 1995), p. 478.
  86. Jorge de Portugal fue hijo segundo de Jorge Alberto de Portugal y Melo, I conde de Gelves, y de Isabel Colón de Toledo, su segunda mujer, que era hermana de Luis Colón de Toledo, I duque de Veragua y marqués de la Jamaica; nieto de Álvaro de Portugal, señor de Ferreira, Gelves y Tentúgal, y de Felipa de Melo y Meneses, su mujer, de los condes de Olivenza, y biznieto del II duque de Braganza. Y por línea materna, nieto de Diego Colón, II almirante, adelantado y virrey de las Indias, y de María de Toledo y Rojas, su mujer (que a su vez fue hija de Fernando Álvarez de Toledo, señor de las Villorias, hijo de los primeros duques de Alba, y de María de Rojas, de los señores de Monzón), y biznieto de Cristóbal Colón, el descubridor y I almirante de las Indias, y de Felipa Muñiz de Perestrello, su mujer.
  87. Ginebra Botti y su hermana Isabel (que casó con Diego de Portugal, hermano de Jorge) eran hijas del opulento comerciante y banquero florentino Jacopo o Jácome Botti, establecido en Sevilla, financiador de las empresas colonizadoras de las Canarias y de Nueva Granada, y nietas maternas de Rafael Font. Su padre falleció en dicha ciudad en el verano de 1562, dejando una fortuna estimada en 200.000 ducados. Su primo Matteo Botti (hijo de Gian Battista, hermano de Jacopo y también comerciante) fue marqués de Campiglia y caballero de Santo Stefano. Véase Enrique Otte Sander, Sevilla, siglo XVI: materiales para su historia económica (Centro de Estudios Andaluces, 2008), p. 294 y otros pasajes.
  88. Francisca Colón de Toledo y Pravia tuvo por hermano a Diego, que fue II duque de Veragua y IV almirante de las Indias por derecho de Felipa Colón, su mujer y prima carnal. Francisca y Diego fueron hijos de Cristóbal Colón de Toledo (hermano del I duque y de la condesa de Gelves) y de Ana de Pravia, su segunda mujer, y nietos de Diego Colón, el II almirante. Diego Colón y Pravia murió sin descendencia en 1578, y a raíz de ello su hermana Francisca inició este pleito por la sucesión de la casa de Veragua. Francisca Colón tuvo nueve hijos con el licenciado Ortegón, pero falleció en 1616 sin dejar varones supérstites, por lo que siguió con el pleito su hija Guiomar, casada con su primo Diego de Portugal. Y después de los días de Guiomar, tres de sus hijos se subrogaron sucesivamente en su parte: primero Diego de Portugal, el único varón, caballero de Santiago, que murió soltero en 1627 (Matías Fernández, ibíd.); después Francisca, consorte del II marqués de Villamayor de las Ibernias, que era su deudo y también parte en el pleito por su propio derecho. Y por haber fallecido Francisca sin descencencia en 1630, se subrogó en su derecho su hermana Ana Francisca de Portugal y Colón, la mujer de Diego de Cárdenas. Véase el Memorial ajustado, hecho de orden del Real y Supremo Consejo de Indias, con citación y asistencia de las partes, en el pleyto que en grado de revista se sigue en él por el Señor Don Mariano Colón de Larreategui... [sobre el mayorazgo de Cristóbal Colón, casa de Veragua y adelantamiento de las Indias, 1778], ff. 365-370, donde se reproduce la bula de dispensa del 3.er grado de consanguinidad para el matrimonio de Diego de Portugal y Guiomar Colón, dada en 1598 por el papa Clemente VIII.
  89. Francisca de Cárdenas y Colón falleció el 17 de diciembre de 1697, según consta del mandamiento de posesión librado el 26 de febrero siguiente por el alcalde de Corte Martín Ortiz de Guinea a favor de Luis Enríquez, conde de Montenuevo, para que en nombre de Lorenza de Cárdenas, su mujer, hermana y sucesora de de la difunta, tomase posesión del mayorazgo vacante por su fallecimiento, fundado por Francisca Colón de Toledo. El conde de Montenuevo tomó posesión el 12 de marzo de 1698, según acta que levantó el escribano Andrés Méndez de Rubiños. El mandamiento y el acta de posesión están reseñados en el Memorial del pleito de Veragua, ff. 349v-350r.
  90. Bautizado el 30 de abril de 1582. C. Merino Gayubas, op. cit., p. 215.
  91. Ingresó en la Orden de Santiago en 1619. Su expediente obra en el AHN bajo el n.º 1556.
  92. Entre los años 1555 y 1565 figura inscrito en los libros de matrícula de esta universidad, en el apartado preeminente de los «nobles, generosos y dignidades». En 1564 ya era presbítero y maestro en Teología. Moraba allí como manteísta, probablemente en una casa que su familia habría puesto en la ciudad y que tal vez compartiría con otros estudiantes de apellido Puertocarrero que aparecen matriculados con la misma calidad. Vicente Beltrán de Heredia, Cartulario de la Universidad de Salamanca: 1218-1600, t. V (Salamanca: Universidad, 2001), pp. 42, 43, 46 y 55.
  93. El 23 de febrero de 1579 fue elegido para la canonjía magistral de Sagrada Escritura, que vacaba desde el año anterior por haber sido promovido el doctor Alonso Velázquez a la mitra de Osma. En esta elección tuvo por opositores a Pero Martínez, canónigo de Sigüenza y catedrático de Prima de Teología, al doctor Barrio, también canónigo y catedrático de Sigüenza, al doctor Calderón, catedrático de Prima de la Universidad de Alcalá, a Alonso Pérez, catedrático de Sagrada Escritura de Plasencia, al doctor Juan Pérez Valenzuela, canónigo de Córdoba, al doctor Molina, canónigo de Sagrada Escritura de Antequera, y al doctor Juan Cantero, canónigo y catedrático de Escritura de Alcalá de Henares. En 1581 figura como canónigo semanero, y después ocupó otros cargos y comisiones del cabildo. Debió de morir en el año 1591, pues el 29 de febrero del siguiente fue proveída la canonjía que dejó vacante. Dejó fundada y dotada una capellanía en el altar de Nuestra Señora de Gracia. Henar Pizarro Llorente, «Los miembros del cabildo de la Catedral de Toledo durante el arzobispado de Gaspar de Quiroga (1577-1594)», en Hispania Sacra, v. LXII, n.º 126 (2010), pp. 563-619, pp. 571, 585, 598 y 610, con remisión al ACT, Actas capitulares, t. 16, ff. 251r, 267r, 279r y 420v; t. 20, f. 218v, y t. 21, f. 135r.
  94. C. Merino Gayubas, op. cit., I, p. 213. El marqués casó con María de Mendoza, también deuda suya, hija del IV duque del Infantado.
  95. Su año de fallecimiento, en Moreno de Guerra (1924, loc. cit.), en el Marqués de Siete Iglesias (op. cit., p. 193), en la Guía en línea de la Diputación de la Grandeza y en Barredo de Valenzuela y Alonso de Cadenas (op. cit., p. 81).
  96. a b c d Su año de matrimonio en Moreno de Guerra, op. 1924 & loc. cit., y en el Marqués de Siete Iglesias, op. cit.
  97. C. Merino Gayubas, op. cit., I, p. 213.
  98. Moreno de Guerra, op. 1924 & loc. cit.; Siete Iglesias, op. cit., p. 193. En la Guía en línea de la Diputación de la Grandeza figura por error como fecha de defunción 16 de octubre de 1565, que combina la de su testamento con el año de su primer matrimonio.
  99. a b Barredo de Valenzuela y Alonso de Cadenas, op. cit., p. 82.
  100. La defunción de esta señora en Barredo de Valenzuela y Alonso de Cadenas, quienes la llaman Catalina probablemente por confusión con la primera (op. cit., p. 82). Su nombre y filiación, en López de Haro, Nobiliario, t. I (Madrid, 1622), p. 380.
  101. a b c d e f g h i j Su año de defunción en J. Moreno de Guerra (op. 1924 & loc. cit.) y en el Marqués de Siete Iglesias (op. cit.)
  102. A. y A. García Carraffa dan dos fechas para esta sentencia de tenuta: el 30 de julio de 1611 y el 10 de febrero de 1612 (loc.cit.) Según C. Merino Gayubas se dictó en la primera fecha (la indicada en el texto), y en ella se comprendía también el mayorazgo de la Torre del Fresno y Lobón con su agregado del Aguijón de Contreras (p. 214). La Guía en línea de la Diputación de la Grandeza informa de que Luis de Cárdenas y Toro obtuvo la sucesión «en 22 de agosto de 1612, en ejecución de sentencia». Tal vez al expedirse la carta había fallecido ya la anterior poseedora.
  103. Moreno de Guerra (op. cit. 1924, p. 652) data el matrimonio y fallecimiento del VII conde en 1612, año también mencionado como el de su casamiento por Barredo de Valenzuela y Alonso de Cadenas (op. cit., p. 82). Según el Marqués de Siete Iglesias (loc. cit.), falleció en 1613 habiendo casado con dicha señora in artículo mortis. También usa esta expresión E. de Mogrobejo (loc. cit., p. 103).
  104. J. Moreno de Guerra (op. cit. 1924, loc. cit.) y C. Merino Gayubas (loc. cit., I, p. 216).
  105. Ingresó en la Orden de Calatrava en 1611. Su expediente obra en el AHN bajo el n.º 2671. El pretendiente usaba por entonces como primer apellido el de Valda, y así figura en las nóminas.
  106. E. de Mogrobejo, Diccionario cit., s.v. «Balda o Valda», v. XXIV ó IX, p. 249.
  107. a b Javier Barrientos Grandon. «Lorenzo de Cárdenas y Valda», en el Diccionario biográfico español (c. 2011, RAH).
  108. Este título de marqués de Oyra era del reino de Nápoles y de carácter feudal. Le fue concedido a Sancho de Herrera el 31 de octubre de 1569 por el rey Felipe II de España, que erigió en marquesado la «tierra» de Oyra u Oria, que el concesionario había adquirido en la provincia de Apulia de aquel reino. Pero en 1570 el flamante marqués enajenó dicho estado para adquirir en España la villa de Valdaracete, perdiendo el derecho a aquella titulación. Feudo y marquesado se sucedieron después en otras familias por investiduras de los reyes de Nápoles y de las Dos Sicilias. En el siglo XVIII (al menos desde 1705) lo poseían los Imperiale, príncipes de Francavilla, destacando de este linaje Vicente Imperiale (1738-1799), marqués de Oyra, que entró al servicio del rey Carlos III cuando lo era de Nápoles y pasó con él a España como capitán de la compañía italiana de guardias de corps, alcanzó el empleo de teniente general y desde 1791 fue embajador en Lisboa del rey Carlos IV.

    A finales del XX, el marquesado de Oyra fue reconocido como título español por el rey Juan Carlos I, quien lo rehabilitó a segundo titular, por real decreto de 19 de julio de 1983 (BOE del 10 de octubre, p. 27.518) y real carta de 30 de mayo de 1984, en favor de Emilia Carrión y Santa Marina, condesa viuda de Elda, que falleció en 2003 y era hija del II marqués de Melín. Por real carta de 1.º de septiembre de 2006 sucedió su hijo Enrique Falcó y Carrión, XV conde de Elda, III marqués de Melín, III de Oyra y barón de Benifayó, grande de España. Pero a este le movió pleito por el marquesado de Oyra su lejano pariente Álvaro Sainz y Ramírez de Saavedra, X marqués de Andía, hijo segundo de los quintos duques de Rivas, quien obtuvo sentencia favorable y firme del Tribunal Supremo el 22 de noviembre de 2017, en cuya ejecución sucedió como IV poseedor legal del título en España por orden del 17 de enero de 2018 (publicada en el BOE del 26 siguiente, p. 10.287) y real carta de 14 de febrero del mismo año.

  109. El marqués de Auñón hubo el patronato de esta suntuosa capilla por legado de su hermano Andrés de Herrera, quien —por no haber tenido prole de su matrimonio con María de Cárdenas— destinó sus bienes a su fundación y dotación.
  110. Melchor de Herrera (1524-1600) está reseñado por Joseph Antonio Álvarez y Baena en sus Hijos de Madrid ilustres (t. IV, Madrid, 1791, pp. 103-104) y por Carlos Javier de Carlos Morales en el Diccionario biográfico español (c. 2011, publicado en línea por la Real Academia de la Historia). Fue hijo tercero de los señores que se citan en el texto y fundó un mayorazgo en el que vinculó el título de marqués de Auñón (que le fue otorgado en 1582), la jurisdicción de esta villa y otros vasallos y alcabalas, el alferazgo de Madrid y los patronatos de la capilla citada y de otras capellanías que fundó. Fue dos veces casado. De su primera mujer tuvo por primogénito a
    1. Gabriel de Herrera, que le premurió soltero.

      De su matrimonio con Francisca de Padilla quedaron tres hijas:
    2. Ana de Herrera, II marquesa de Auñón, que casó con Íñigo Sánchez de Tovar, hijo de Íñigo Fernández de Velasco y Tovar, IV duque de Frías, condestable de Castilla, y de Ana de Aragón, su segunda mujer, de los duques de Medina Sidonia. Tuvieron tres hijos varones que murieron niños (Íñigo, Antonio y Francisco), y una hija llamada Juana de Herrera y Velasco, que fue inmediata sucesora de su madre pero también la premurió doncella.
    3. María de Padilla y Bobadilla, que casó con Diego Zapata de Cárdenas, hijo de Pedro Zapata de Cárdenas, caballero de Santiago, y de Úrsula de Guzmán, su primera mujer, y tampoco de estos quedó posteridad.
    4. Y Juana de Herrera, mujer del IX conde de la Puebla del Maestre, en cuya descendencia recayó la casa por haber muerto sin supérstites los anteriores.

      Y además tuvo un hijo natural, habido en Inés Ponce de León y Villarroel, «señora muy calificada»:
    5. Rodrigo de Herrera y Ribera (1578-1641), caballero de Santiago, notable poeta y dramaturgo (reseñado por Álvarez y Baena, op. cit., IV, pp. 290-291). A este —aunque preterido en la sucesión de la casa— su padre le fundó un vínculo menor y capituló casarle con María de Herrera y Mendoza, su prima carnal, poseedora del mayorazgo viejo de la familia, hija y sucesora de Luis de Herrera, hermano mayor del marqués, y de Brianda de Mendoza, de los marqueses de Montesclaros. Este mayorazgo había sido fundado por Alonso González de Herrera, guarda mayor del rey Juan II y su secretario de cámara, tatarabuelo de ambos contrayentes. El matrimonio empero no se llevó a efecto por la prematura muerte de la novia, y parece que Rodrigo casó sucesivamente con Polonia Angulo y con María Lobo.

    La genealogía de estos Herreras de Madrid está expuesta por López de Haro, op. cit., pp. 487-490: los hijos del primer marqués en la p. 489 [numerada por errata 486] y en el árbol de la 490.

  111. Enunciados por C. Merino Gayubas, op. cit., I, p. 216. Según el extracto hecho por Cadenas del expediente de Santiago de su nieto Lorenzo (el XIII conde), la condesa y marquesa testó en Madrid en 1638 declarando por hijos solo a los tres primeros varones: Lorenzo, Diego y García.
  112. a b Ingresó en la Orden de Santiago en 1646. Su expediente obra en el AHN bajo el n.º 8297 (digitalizado y visible en el PARES).
  113. Ingresó en esta Orden en 1632. Su expediente es el n.º 4.714 de los obrantes en el AHN.
  114. Este Alonso de Luzón sirvió en las Alpujarras, Italia y Flandes como maestre de campo del Tercio de Nápoles, a las órdenes de Don Juan de Austria, y después se halló en la Jornada de Inglaterra donde corrió suerte infausta, quedando prisionero de la Reina Virgen durante varios años. Jerónimo de Quintana, A la muy antigua, noble y coronada villa de Madrid: historia de su antiguedad, nobleza y grandeza (1629), libro 2.º, p. 238. El navío que él mandaba, La Trinidad Valencera, era uno de los mayores de aquella Armada (1.000 toneladas, 42 cañones y 360 hombres a bordo); la tempestad lo arrojó a las costas de Irlanda y naufragó en la bahía de Kinnagoe, condado de Donegal. Luzón reunió a los supervivientes de su buque y de otro que encalló cerca, en número de unos 500, y los condujo por tierra durante una semana, hasta que les cortó el paso una columna de Caballería. El maestre se rindió para salvar las vidas de sus soldados, pero estos fueron masacrados en cuanto entregaron las armas, quedando prisioneros los oficiales. Véase la Wikipedia en inglés; David Revelles, «La invencible sale a flote» en El País (ed. electrónica, 7 de septiembre de 2014), y Miquel Silvestre, «Historias del naufragio de la Armada Invencible» en El Diario Montañés (ed. electrónica, 7 de septiembre de 2008).
  115. Joseph Antonio Álvarez y Baena, Hijos de Madrid ilustres en santidad, dignidades, armas, ciencias y artes..., t. II (Madrid, 1790), p. 171; más ascendencia en Luis de Salazar y Castro, Árboles de costados de gran parte de las primeras casas de estos reynos cuyos dueños vivían en el año de 1683 (Madrid, 1795), p. 110.
  116. Ingresó en la Orden de Santiago en 1625. Su expediente obra en el AHN bajo el n.º 1541 bis (digitalizado y visible en el PARES).
  117. C. Merino Gayubas, op. cit., I, p. 216.
  118. a b Cobos de Belchite y Barredo de Valenzuela, op. cit., p. 13.
  119. Expediente de Santiago de su hijo Lorenzo, el XIII conde.
  120. a b c d C. Merino Gayubas, op. cit., I, p. 217.
  121. P. Anselme de Sainte-Marie, Histoire de la Maison Royale de France et des grands officiers de la Couronne (París, 1733), p. 43. El sermón panegírico pronunciado por el P. Reinerus Payez en los funerales por esta princesa y virreina está publicado como Oraison funèbre de feüe Madame Marie Anthoinette de Cardenas, princesse de Chimay et du St. Empire, vice-reine de Navarre &c.: prononcée en l'église des RR. Pères Recollets, à Malines, le 16 de juillet 1693 (Malinas, 1693).
  122. Murió «antes de 1665», según Moreno de Guerra (op. cit. 1924, p. 652), de donde quizá concluye Siete Iglesias que fue en 1664 (op. cit, p. 194), pero otros autores datan su defunción en el mismo año 1665, poco antes que la de su mujer: así Cobos de Belchite y Barredo de Valenzuela (op. cit., p. 13) y N. Hobbs (loc. cit.)
  123. El V conde de Chinchón falleció sin descendencia el 3 de octubre de 1665 y en los mayorazgos le sucedió su prima Inés de Castro, que estaba recién viuda, pero solo le sobrevivió tres meses escasos, por lo que probablemente no tituló. La genealogía de esta casa, en N. Hobbs, loc. cit.
  124. N. Hobbs, loc. cit.
  125. Nació en 1600; falleció el 23 de octubre de 1669 de edad de 69 años y fue enterrada en el convento de Predicadores de Nuestra Señora de Atocha (N. Hobbs, loc. cit. y C. Merino Gayubas, op. cit., I, p. 217).
  126. a b Lorenzo de Cárdenas y Ulloa nació en Sevilla, fue bautizado en la parroquial de San Marcos el 6 de noviembre de 1642 y murió en Madrid el 10 de junio de 1706 (Cobos de Belchite y Barredo de Valenzuela, op. cit., p. 13).
  127. Parece que Lorenzo de Cárdenas poseyó el mayorazgo de la casa de Valda desde años antes de suceder en la de la Puebla del Maestre, por cesión que le hizo su hermano José Alejo.
  128. Ingresó en la Orden de Santiago en 1704. Su expediente obra en el AHN bajo el n.º 1551. El pretendiente era conde de la Puebla del Maestre, de Nieva y de Villa Alonso, marqués de la Mota, de Auñón y de Bacares. Extractado por Vicente de Cadenas y Vicent, Caballeros de la Orden de Santiago que efectuaron sus pruebas de ingreso durante el siglo XVIII, t. I (Madrid: Hidalguía, 1977), p. 173.
  129. La genealogía de esta señora, en Luis de Salazar y Castro, Árboles de costados de gran parte de las primeras casas de estos reynos cuyos dueños vivían en el año de 1683 (Madrid, 1795), p. 147.
  130. de Mayoralgo y Lodo, José Miguel (2016). «Bodas nobiliarias madrileñas durante el periodo 1651-1700 (parte 1)». Anales de la Real Academia Matritense de Heráldica y Genealogía XIX: 197. ISSN 1133-1240. 
  131. C. Merino Gayubas, op. cit., I, p. 218.
  132. María Luisa de Cárdenas y Saavedra, marquesa de Bacares, falleció el 5 de junio de 1699 en la ciudad de Toro, donde había testado ante Gabriel Gutiérrez. Casó en Madrid (San Martín) el 30 de agosto de 1696 con Manuel José Osorio, que en seguida sucedería como conde de Villanueva de Cañedo por muerte de su padre, ocurrida al mes siguiente. Después de los días de su primera mujer, este señor fue conde de Grajal y marqués de Montaos desde 1714, en sucesión de su madre, y más tarde marqués de Alcañices y grande de España por extinción de la línea directa de esta casa en 1741. Natural y señor de Villacé (León), fue bautizado en la Asunción el 4 de junio de 1675 y finó en Valladolid (San Benito el Viejo) el 18 de septiembre de 1746, bajo testamento hecho en esta ciudad el 3 de mayo anterior a fe de Ventura Ladrón de Guevara. Jaime de Salazar y Acha, «Los Osorio: un linaje de más de mil años al servicio de la Corona» en Anales de la Real Academia Matritense de Heráldica y Genealogía n.º 4 (1996-1997), pp. 143-182, pp. 171-172. Según C. Marino Gayubas, casaron en Madrid el 1.º de abril de 1696 (op. cit., I, p. 218). En agosto tendrían la misa de velaciones por haber sido el casamiento en cuaresma.
  133. Jaime de Salazar y Acha, ibíd.
  134. Nieto y Cortadellas tiene a esta señora por XIV condesa de la Puebla del maestre, y afirma que falleció «en Madrid el 4 ó el 7 de enero de 1707, a muy avanzada edad» (op. cit., p. 112). Esta fecha de defunción, dudosa, es unos días anterior a la de Carlota Osorio, a la que hemos citado como su predecesora en la posesión del mayorazgo... El óbito de Carlota está datado por Salazar y Acha, con más seguridad, el 15 de dicho mes y año.
  135. José Miguel de Mayoralgo y Lodo, conde de los Acevedos. «Bodas nobiliarias madrileñas durante el periodo 1651-1700: parte 1», en los Anales de la Real Academia Matritense de Heráldica y Genealogía, vol. XIX (2016), pp. 65-210: p. 101, con remisión al archivo parroquial de San Sebastián, lib. 9 de casados, f. 113.
  136. Mariela Fargas Peñarrocha. «Francisco Tutavila y del Rufo [sic]», en el Diccionario biográfico español (Real Academia de la Historia). Consultado el 30 de mayo de 2024.
  137. J. Moreno de Guerra (op. cit. 1924, p. 653) y J.C. de Guerra (op. cit, apénd. 5.º, p. 409).
  138. José Miguel de Mayoralgo y Lodo «Necrologio nobiliario madrileño del siglo XVIII (1701-1808)» [5.ª entrega], en Hidalguía n.º 331 (2008), pp. 785-816: p. 798.
  139. Memorial del pleito de Veragua, f. 348r y v
  140. Nieto y Cortadellas, op. cit., pp. 98 y 113.
  141. El I conde de Montenuevo tenía de su primer matrimonio al menos una hija: Ignacia Enríquez de la Casas, nacida hacia 1665 y que en 1688 hizo información de nobleza para casar con el calatravo Martín de Contreras y Guillamas, natural y regidor de Segovia, descendiente de una línea de los Contreras segovianos que pasó a Indias y se estableció en La Paz. Ignacia Enríquez fue su segunda mujer y no tuvieron descendencia. Pruebas de Ignacia Enríquez de las Casas para contraer matrimonio con Martín de Contreras y Guillamas. 1688. AHN, OO.MM., Casamientos de Calatrava, exp. 232. Francisco Javier Mosácula María, «Diccionario de regidores segovianos (II)», en Estudios segovianos (ISSN 0210-7260), tomo XLVIII, n.º 105 (2005), pp. 281-452: p. 374. No se ha de confundir a esta señora con su tía (hermana de su padre) llamada también Ignacia Enríquez de las Casas, de la que se hará mérito en la nota siguiente. Tal vez el conde tuvo de su primera mujer alguna hija más. En todo caso, la descendencia de este matrimonio fue preterida en la sucesión del condado de Montenuevo, y quedó extinguida antes de 1761.
  142. El oidor Luis Enríquez de Villalobos e Inés de las Casas, su mujer, citados en el texto como padres del I conde de Montenuevo, tuvieron siete hijos que llegaran a adultos, todos nacidos en Lima durante la sesquidécada 1621-1635. Fueron a saber: Luis, Juan, Petronila, Gabriel, Francisco, Juana e Ignacia. Luis y Juan Enríquez de las Casas ingresaron en la Orden de Santiago en 1650 y 1653 (exptes. 2646 y 2645 del AHN, ambos digitalizados y visibles en el Pares). Luis fue el I conde de Montenuevo y su mérito se hace en el texto; Juan servía a S.M. como capitán cuando se cruzó. Gabriel y Francisco, que usaban con preferencia los apellidos Enríquez de Villalobos, ingresaron en la de Calatrava en 1654 y 1666 (exptes. 824 y 815, también digitalizados). Francisco fue sacerdote y chantre de la Catedral del Cuzco. Las pruebas de nobleza de estos caballeros están extractadas por Guillermo Lohmann Villena, Los americanos en las órdenes nobiliarias (Madrid: CSIC, 1947, reed. 1993), t. I, pp. 142-143, y t. II, pp. 34-35. . Algunas fuentes genealógicas (e. gr.) mencionan a otro hijo varón, Cristóbal Enríquez de la Casas, y le hacen también calatravo, pero no hallamos constancia documental de tal persona. Dos de las hembras probaron nobleza para contraer matrimonio con caballeros de Santiago. Petronila Enríquez de las Casas casó sucesivamente con dos santiaguistas: en 1651 con Juan Alonso de Losada y Bolaño, y en 1668 con Francisco Ramírez de Haro y Gaitán de Ayala, II conde de Bornos (sus pruebas para las segundas nupcias, en el AHN, OO.MM., Casamientos de Santiago, apend. 158). Juana Enríquez de las Casas tuvo por marido a Juan de Córdoba Lasso de la Vega y Figueroa, caballero del mismo hábito. Y la menor de todos fue Ignacia Enríquez de las Casas, nacida en 1635 (a quien no se ha de confundir con su sobrina homónima citada en la nota anterior). Esta casó dos veces: primera con el licenciado Diego Benítez de Maqueda y Villalón, fiscal en La Plata y del Consejo de S.M., natural de Antequera, y en segundas con el general Martín de la Riva Herrera. Con descendencia del primero en el Perú, entre la que figuraron los Lizarazu, condes de Casa Real de la Moneda (véase Nieto y Cortadellas, op. cit., pp. 115-116). Del primer matrimonio de Petronila nació Alonso de Losada Pimentel y Enríquez de las Casas, caballero de Alcántara, que casó con su hermanastra la IV condesa de Bornos, con la que tuvo sucesión. Y por este parentesco, el condado de Montenuevo recaería en la casa de Bornos al extinguirse la descendencia del concesionario, no quedando tampoco posteridad de sus hermanos varones.
  143. Mark A. Burkholder, «Luis Enríquez», en el Diccionario biográfico español (Real Academia de la Historia). Consultado el 13 de mayo de 2024. Damos por bueno el dato de naturaleza del biografiado que figura en esta fuente: Madrigal de la Altas Torres. Pero hacemos constar que según Nieto y Cortadellas había nacido en la villa de Madrigal de la actual provincia de Guadalajara (op. cit., p. 114). En varios papeles genealógicos de los hijos del oidor se alude a este como «natural de la villa de Madrigal», sin más precisión. Así, en dos certificaciones obrantes en la Colección Salazar y Castro (de Luis y de Juan) y en los extractos de probanzas hechos por Lohmann (op. cit., t. I, p. 142).
  144. Así consta por una escritura de poder recíproco otorgada en Madrid el 15 de marzo de dicho año, ante Francisco Fajardo, por los cónyuges Luis Enríquez y Lorenza de Cárdenas, que todavía no eran condes de Montenuevo, y declaraban por única hembra nacida del matrimonio y única hija supérstite a Mariana, a la sazón ya casada con Alonso Fernández Manrique. Escritura reseñada en el Memorial del pleito de Veragua, f. 349r.
  145. Poseyó el mayorazgo de la Torre del Fresno, que comprendía la jurisdicción de la villa de Lobón, y el de la Torre del Águila agregado al mismo, por sentencia de tenuta del 18 de septiembre de 1721 que fue confirmada en juicio de propiedad por las de vista y de revista en 1742 y 1752, en segunda suplicación por otra de 4 de mayo de 1756 y últimamente por otra dictada el 28 de julio de 1762: siete meses después del fallecimiento de la condesa. En estos pleitos tuvo un «copioso número de contradictores»: entre otros al X y XI duques de Medinaceli (Nicolás Fernández de Córdoba, sucedido en 1739 por su hijo Luis), al marqués de Legarda (José Manuel de Esquivel, como marido de Antonia Javiera de Peralta Cárdenas y Vivanco, II marquesa de Legarda) y al II y III marqueses de la Torre de las Sirgadas (Alonso Pacheco Portocarrero, sucedido por su hijo Luis, padre y abuelo de la sucesora de Mariana en la casa de la Puebla y en los vínculos litigados). Por fallecimiento de Mariana, los mismos interesados volvieron a litigar la sucesión, ganando el pleito la marquesa de las Sirgadas, que fue también XVII condesa de la Puebla del Maestre. J.A. López Herrero, op.cit., fol. 2r.
  146. Memorial del pleito de Veragua, f. 348.
  147. Barredo de Valenzuela y Alonso de Cadenas, op. cit., p. 83.
  148. J. A. López Herrero, op. cit., fol. 2r.
  149. Una reseña y filiación del duque, en Antonio Ramos, op. cit. 1780, p. 11. Más genealogía de esta casa en Nicolás Hobbs, Duques del Arco, y en Salazar y Castro, Casa de Lara, t. I, pp. 684-687, quien precisa que Mariana de Cárdenas y el futuro duque casaron en Madrid el domingo 30 de julio de 1695.
  150. Natural de Jerez de los Caballeros, fue bautizada en San Miguel el 30 de septiembre de 1725, y contrajo matrimonio en los Santos Mártires de Málaga el 25 de agosto de 1761 (Cobos de Belchite y Barredo de Valenzuela, op. cit., p. 14)
  151. Véase un resumen en Antonio Ramos, op. cit. 1780, p. 20.
  152. El año del matrimonio y los de nacimiento y defunción del marido en Siete Iglesias, op. cit., p. 196.
  153. Estos tres son los que menciona Antonio Ramos en su op. cit. 1780, publicada cuando la condesa tenía unos 55 años (p. 18 y árbol de la p. 19).
  154. Angustias nació en Málaga el 12 de abril de 1771, fue bautizada al día siguiente en los Santos Mártires y falleció en Onteniente el 8 de agosto de 1847; casó en Madrid el 29 de abril de 1789 con el marqués de Vellisca, que finó en Madrid el 5 de junio 1824. F. Martín, Tabla de parentescos de don Fernando de Castilla, y F.F. Alarcón en geneanet.org (la Wikipedia no enlaza a esta web por problemas de spam).
  155. Nació en Madrid el 7 de mayo de 1763, fue bautizado el 8 en San Andrés, y finó el 25 de marzo de 1824 en la misma villa, feligresía de San José, habiendo testado el 23 ante Alfonso de Yébenes (Acevedos, ibíd.)
  156. En esta ceremonia de cobertura, la primera del reinado, solo se cubrieron estos dos grandes, ambos de segunda clase. Guía de la grandeza: para el cumplimiento de los días y años de los Excmos. Sres. grandes de España así residentes en la Corte como fuera de ella, para el presente año de 1824 (Madrid, 1824), p. xi.
  157. En cuanto a la adquisición del palacio de Matallana por el XVIII conde de la Puebla del Maestre, es errónea la fecha de 1850 que figura en varias fuentes. Tuvo lugar «a comienzos del siglo XIX», como indica la web del Museo. A raíz de haber fallecido sin descendencia el primer propietario.
  158. Nacida en Madrid el 29 de diciembre de 1764, fue bautizada el 30 en San Sebastián y murió el 6 de enero de 1819 en la colación de Santiago, bajo testamento hecho el 4 ante Alfonso de Yébenes; casados en la de San Martín el 21 de octubre de 1784, todo en dicha villa y corte (Acevedos, op. cit., pp. 384-385).
  159. Nacido en Jerez de los Caballeros el 1.º de agosto de 1785, fue bautizado el 2 en San Miguel, y falleció en Madrid, colación de San José, el 25 de noviembre de 1858, bajo testamento hecho a fe de Carlos Rodríguez de Moya el 4 de junio de 1840 (Acevedos, op. cit., p. 385, nota).
  160. Sucedió en dichos títulos (menos el de Bacares, por el que no tituló) un cuarto de siglo después de la muerte de su padre: por Reales Cartas de Isabel II despachadas en 1850.
  161. GOE 1856, p. 85.
  162. Nacida en Madrid el 19 de diciembre de 1799 y bautizada el mismo día en San Sebastián por lo castrense; finó en Málaga, colación de Santiago, el 9 de diciembre de 1839; casados en Madrid (Santos Justo y Pastor) el 15 de abril de 1816 (Acevedos, ibíd.)
  163. Nació en Madrid el 28 de noviembre de 1817, fue bautizado el mismo día en San José y finó en Málaga el 24 de enero de 1854 en vida de su padre (Acevedos, op. cit., p. 386, nota).
  164. Sucedió en este título de primogénitos por real carta de 1849 (GOE 1851), antes de que su padre titulara por el principal.
  165. Nació en La Zubia el 20 de agosto de 1821 y fue bautizada el 21 en la Asunción de esta villa, donde casaron el 17 de septiembre de 1841; murió viuda en Fortuna (Murcia) el 20 de mayo de 1889 (Acevedos, ibíd.)
  166. Francisca de Paula Andrea Nicolasa Micaela Ramona Manuela Antonia María del Carmen Fernández de Córdova y Montes. Nació el 30 de noviembre de 1843 en Granada, donde murió el 19 de marzo de 1849.
  167. Nació el 7 de febrero de 1845 en Granada, donde murió el 18 de marzo de 1849, a la vez que la mayor.
  168. Nació en La Zubia, donde fue bautizado el 13 de abril de 1849, y expiró en Granada el 31 de enero de 1857 (Cobos de Belchite y Barredo de Valenzuela, op. cit., p. 14, § XII)
  169. Sucedió en este título a su padre por real carta de 1855 (GOE 1856).
  170. El marqués nació en Madrid el 10 de mayo de 1820 y finó en Vitoria el 16 de noviembre de 1869; su mujer nació en Milán el 21 de febrero de 1825, fue bautizada con los nombres de Isabella Celestina María y falleció en Madrid el 22 de abril de 1890.
  171. Su hoja de servicios en este ministerio, formada entre 1838 y 1878, obra en el AHN, Fondos Contemporáneos, M.º de Hacienda, leg. 5.773, exp. 30.
  172. Ingresó en esta Orden en 1860. Su expediente (n.º 211 del AHN) está extractado por Vicente de Cadenas y Vicent, Caballeros de la Orden de Alcántara que efectuaron sus pruebas de ingreso durante el siglo XIX (Madrid: Hidalguía, 1956), § 180, p. 231. Es muy sumario por ser el pretendiente hermano entero de Manuel de Samaniego y Asprer, caballero de Calatrava desde 1838, cuyo expediente (n.º 159 del AHN) extracta también dicho autor en Caballeros de la Orden de Calatrava que efectuaron sus pruebas de ingreso durante el siglo XIX (Madrid: Hidalguía, 1976), pp. 98-99.
  173. a b Mariana nació el 9 de enero de 1823 en Madrid, donde finó el 28 de enero de 1919. Y casó en la misma villa el 15 de mayo de 1861 con el marqués de Baamonde, que nació en Ribadavia el 21 de noviembre de 1827 y falleció en Madrid el 24 de enero de 1896.
  174. Título de Roma que fue autorizado para su uso en España a favor de este señor en 1864 (GOE 1875, p. 226).
  175. El VII marqués del Vado del Maestre nació el 1.º de enero de 1824 y murió el 16 de enero de 1895, y su mujer nació el 3 de febrero de 1830 en Salamanca, donde falleció el 20 de septiembre de 1905.
  176. Nació el 15 de noviembre de 1824 en Madrid, donde murió el 11 de diciembre de 1884.
  177. Nació en Madrid el 10 de mayo de 1827, fue bautizada el mismo día en San José y falleció en Alicante el 15 de noviembre de 1902 (Acevedos, op. cit., p. 389).
  178. Nació el duque en Madrid el 10 de diciembre de 1826, fue bautizado el mismo día en San Sebastián y murió en la misma villa, colación de San José, el 17 de mayo de 1872, habiendo testado el 9 de abril ante José Guerrero; casaron en dicha San José el 5 de enero de 1852 (Acevedos, ibíd.)
  179. Nacido en Madrid el 11 de mayo de 1832, fue bautizado el mismo día en San José y finó en la misma villa el 4 de abril de 1898 (Acevedos, op. cit., p. 385, nota).
  180. Se cruzó de santiaguista en 1877, siendo coronel, aunque la merced de su hábito era del 21 de mayo de 1863. Su expediente obra en el AHN bajo el n.º 434 y es muy sumario porque antes había ingresado en la misma Orden su hermano menor y entero Paulino.
  181. Nacida el 20 de febrero de 1842 y bautizada el 21 en la Magdalena; fallecida el 9 de octubre de 1899; casaron en las Angustias el 16 de octubre de 1862, todo en la ciudad de Granada (Acevedos, ibíd.)
  182. Nació en Granada, fue bautizada en las Angustias el 7 de marzo de 1864 y falleció en Madrid el 4 de septiembre de 1930 (Acevedos, ibíd.) Su esquela en el ABC del 5, p. 34.
  183. Nacido en Madrid el 10 de agosto de 1864 y bautizado en San Ildefonso; casaron en Granada (las Angustias) el 30 de agosto de 1899 (Acevedos, ibíd.) Sobrevivió a su hija y a su mujer y debió de morir antes de la Guerra.
  184. Rosario Seriñá nació el 20 de agosto de 1901 en Granada, donde casó el 10 de junio de 1916 con Antonio Almunia, nacido en Valencia el 20 de diciembre de 1896, bautizado el 21 y fallecido en Sevilla el 27 de agosto de 1972. Ella murió sin prole en Madrid el 16 de julio de 1929, a los 27 de edad y en vida de sus padres. Su esquela en el ABC del 23, p. 54.
  185. Nació en Madrid el 24 de junio de 1833 y fue bautizado el 25 en San José, y finó en Granada el 16 de agosto de 1874 (Acevedos, ibíd.)
  186. Ingresó en la Orden de Santiago en 1864, previa merced de hábito del 21 de mayo de 1863. Su expediente obra en el AHN bajo el n.º 392 y está extractado por Vicente de Cadenas y Vicent, Caballeros de la Orden de Santiago que efectuaron sus pruebas de ingreso durante el siglo XIX (Madrid: Hidalguía, 1993), § 403, p. 393. El de su hermano Ramón, § 447, en la p. 430.
  187. Celia Méndez nació en Fuentes de Andalucía (Sevilla) el 11 de febrero de 1844, y fue bautizada allí el 13; contrajo el referido matrimonio en Sevilla el 4 de enero de 1862, inscrito en el Sagrario de la Catedral (Acevedos, ibíd.) Y falleció en esta ciudad el 2 de junio de 1908. Reseñas biográficas en la web de su Congregación y en Biografías de mujeres andaluzas. Biografiada por Francisco Garfias, Servir es reinar: Celia Méndez, fundadora de las Esclavas del Divino Corazón (Madrid: BAC, 1989).
  188. Nació en Granada el 18 de noviembre de 1850, fue bautizado el 20 en la Magdalena y finó en Madrid el 8 de diciembre de 1915, soltero y sin sucesión legítima (Cobos de Belchite y Barredo de Valenzuela, op. cit., p. 14, § XIII).
  189. Falleció en Madrid el 26 de mayo de 1956. Esquelas en el ABC de los días 27 (p. 101) y 31 de mayo de 1956 (p. 70. Suscribe ambas, entre otros, su «madre, doña Rafaela Fernández Martínez (viuda de Castañeda)».
  190. Cobos de Belchite y Barredo de Valenzuela, op. cit., p. 15.
  191. Casaron el 29 de abril de 1920 (Cobos de Belchite y Barredo de Valenzuela, ibíd.) Este matrimonio fue declarado nulo (Acevedos, ibíd.)
  192. Se celebró la boda a mediados de octubre en la capilla de la Concepción de Martutene, en la ciudad de San Sebastián (Guipúzcoa). Gacetilla en el ABC del 18 de octubre de 1931, p. 39.
  193. Falleció en Guadalmina el 1.º de febrero de 2015 a los ochenta y un años de edad. Su esquela en el ABC del 5, p. 55. Una bonita fotografía de esta señora, de muy tierna edad y en brazos de su madre, se publicó en la revista Blanco y Negro del 6 de mayo de 1934, p. 119, con este pie de foto: «La condesa de la Puebla del Maestre (nacida María Teresa Castañeda y Erro), con su primogénita Mari-Tere, marquesita de Bacares».
  194. Falleció en Guadalmina el 14 de julio de 2015 a los noventa y un años de edad. Su esquela en el ABC del 17, p. 62.
  195. La boda se celebró en la ermita de la Moraleja, municipio de Alcobendas (Madrid). Gacetilla en el ABC del 23, p. 36.

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