Blasón del escudo de los "Wittelsbach".Castillo de Trausnitz de los duques de Baviera.Palacio de Heidelberg de los Electores del Palatinado.El Electorado en 1778 y el Reino de Baviera en 1816.
Bertoldo, margrave en Baviera (fallecido en 980), fue el antepasado de Otón I, conde de Scheyern (muerto en 1072), cuyo tercer hijo Otón II, conde de Dachau, adquirió el castillo de Wittelsbach (Burg Wittelsbach cerca de Aichach). En el año 1119, Otón III de Scheyern abandonó el castillo del mismo nombre construido alrededor de 940 y se trasladó al de Wittelsbach, del que luego adoptarían el nombre.
El conde Otón II fue el ancestro del conde palatino de Baviera, Otón IV (fallecido en 1156). Otón IV, hijo de Edgardo I de Scheyern, fue el primero en adoptar el nombre de Wittelsbach. Sirvió al emperador Enrique V como conde palatino de Baviera desde 1120 y falleció en 1156. Su hijo Otón, tras la caída en desgracia del anterior duque de la casa güelfa, Enrique el León, fue investido con el ducado de Baviera en 1180. El hijo del primer duque de la casa Wittelsbach (de ahí el ordinal, Otón I), Luis, adquirió el Palatinado en 1214.
El castillo de Wittelsbach fue destruido en 1209 bajo el conde Otón de Wittelsbach, sobrino del duque Otón, habiendo asesinado al rey Felipe de Suabia. El castillo nunca fue reconstruido.
Reinado en Alemania
La familia Wittelsbach fue una dinastía gobernante alemana de los territorios de Baviera desde 1180 hasta 1918 y del Palatinado Renano desde 1214 hasta 1805; en 1815 este territorio fue parcialmente incorporado a Baviera, que fue elevada a la categoría de reino por Napoleón en 1806.
La Casa de Wittelsbach se dividió en dos ramas en 1329: por el Tratado de Pavía (1329), el emperador Luis IV cedió el Palatinado a los descendientes de su hermano, el duque Rodolfo I de Baviera, Rodolfo II, Ruperto I y Ruperto II. Rodolfo I se convierte de esta manera en el ancestro de la línea (palatina) más antigua de la dinastía Wittelsbach, que recuperó el poder en Baviera en 1777 después de la extinción de la línea (bávara) más joven, los descendientes de Luis IV.
Rama bávara
La rama bávara mantuvo el ducado de Baviera desde 1317 hasta su extinción en 1777. En 1623 los duques fueron investidos con la dignidad electoral en el Sacro Imperio, en detrimento de la rama palatina que fue sometida a la prohibición imperial por su intervención en el origen de la Guerra de los Treinta Años.
Durante medio siglo, desde 1323 hasta 1373, la línea más joven de la dinastía también gobernó Brandeburgo, en el noreste de Alemania, cuando fue adquirida por el emperador Luis IV. Y en el sur, mantuvo el Tirol entre 1342 y 1363. De 1345 a 1432 gobernaron en Holanda, Zelanda y Henao en el noroeste del Sacro Imperio, pero también en el Alto Palatinado para la rama palatina de los Wittelsbach en 1329. Sus seis hijos le sucedieron como Duques de Baviera y condes de Holanda y Henao en 1347. Tirol se perdió para los Wittelsbach al morir el duque Meinhard y después con la Paz de Schärding, cuando Tirol lo cedieron finalmente a los Habsburgo en 1369. En 1373, Otón, el último regente de Wittelsbach en Brandeburgo, pasó el país a la Casa de Luxemburgo. A la muerte del duque Alberto en 1404, fue sucedido en los Países Bajos por su hijo mayor, Guillermo. El hijo más joven, Juan III, llegó a ser Obispo de Lieja. Sin embargo, al fallecer Guillermo en 1417, estalló una guerra de sucesión entre Juan y la hija de Guillermo, Jacqueline de Henao. Este sería el último episodio de las Guerras de Hook and Cod, después del cual los condados quedaron en manos de Borgoña en 1432.
Desde 1583 hasta 1761, la rama bávara de la dinastía dio príncipes electores y Arzobispos de Colonia y muchos otros obispos católicos del Sacro Imperio Romano Germánico.
La rama palatina conservó el Palatinado desde 1317/1329 hasta 1918 y gobernó también Baviera en 1777. Con la Bula de Oro de 1356, los Condes Palatinos fueron investidos con la dignidad electoral.
Al extinguirse la rama bávara, hubo una disputa por la sucesión y con la breve Guerra de Sucesión bávara, la rama palatina accedió a Baviera en 1777. Al morir el Elector Carlos Teodoro del Palatinado y Baviera en 1799, todos los territorios de los Wittelsbach en Baviera y el Palatinado fueron reunidos bajo Maximiliano I José de Baviera, un miembro de la rama del Palatinado-Zweibrücken-Birkenfeld. En ese tiempo hubo dos ramas supervivientes de la familia Wittelsbach: la Zweibrücken (encabezada por Maximiliano I José) y la Birkenfeld (encabezada por el conde Palatino Guillermo). Maximiliano José heredó de Carlos Teodoro el título de Elector de Baviera, al mismo tiempo que Guillermo fue compensado con el título de Duque en Baviera. Se escogió la figura de Duque en Baviera porque en 1506 la primogenitura había sido establecida en la Casa de Wittelsbach y hubiese solamente un Duque Reinante de Baviera en algún momento. El título de rey lo asumió Maximiliano José el 1 de enero de 1806.
Los Wittelsbach se opusieron al régimen nacionalsocialista. La familia dejó Alemania y se fue a Hungría pero fueron detenidos finalmente. Miembros de la familia pasaron cierto tiempo en varios campos de concentración, como Sachsenhausen y Dachau.[cita requerida]
La Reina Cristina de Suecia abdicó el 5 de junio de 1654 en favor de su primo Carlos X Gustavo, un miembro de la rama Palatinado-Zweibrücken de los Wittelsbach. Fue el segundo período de gobierno de los Wittelsbach en Suecia después de 1448, cuando Cristóbal III, de la rama palatina, fue rey de Dinamarca, Suecia y Noruega durante la Unión de Kalmar.
Suecia alcanzó su mayor extensión territorial bajo el gobierno de Carlos X después del tratado de Roskilde en 1658. El hijo de Carlos, Carlos XI, reconstruyó la economía y reorganizó el ejército, legándole a su hijo, Carlos XII, uno de los mejores arsenales del mundo, un gran ejército permanente y una gran flota. Fue un experto caudillo militar y táctico. Sin embargo, a pesar de que también fue calificado como político, se mostró reacio a hacer la paz. Aunque Suecia logró gran escala varios éxitos militares desde el principio y ganó la mayoría de las batallas, la Gran Guerra del Norte terminó con la derrota de Suecia y el fin del Imperio sueco. Carlos XII fue sucedido en el trono de Suecia por su hermana, Ulrica Leonor. Su abdicación en 1720 marcó el fin del gobierno de los Wittelsbach en Suecia.
Reino de Grecia
Grecia en 1843 tras la independencia.El Palacio Antiguo de Atenas, construido para el rey Otón I por Friedrich von Gärtner en 1841. En la actualidad es la sede del Parlamento griego.Propylaea en Múnich, monumento a la línea segundogénita de los Wittelsbach en Grecia.
El Wittelsbach Otón I fue nombrado primer Rey de Grecia en 1832 en virtud de la Conferencia de Londres, por la cual Grecia se convirtió en un nuevo reino independiente bajo la protección de las Grandes Potencias (el Reino Unido, Francia y el Imperio ruso). A lo largo de su reinado, Otón se enfrentó a desafíos políticos por la debilidad financiera de Grecia y el papel del gobierno en los asuntos de la Iglesia. La política de la Grecia de esta época se basaba en afiliaciones con las tres grandes potencias, y la capacidad de Otón para mantener el apoyo de las potencias era la clave de su permanencia en el poder. Para seguir siendo fuerte, Otón tuvo que conjugar los intereses de cada una de las Grandes Potencias en Grecia con los adherentes de unas en contra de las otras, para no agraviar a las grandes potencias. Cuando Grecia fue bloqueada por la Armada Real (Británica) en 1850 y nuevamente en 1853 para impedir que Grecia atacara al Imperio Otomano durante la Guerra de Crimea, colocó a Otón en una difícil situación entre los sufridos griegos. Como resultado, hubo un intento de asesinato a la Reina, y en 1862 Otón fue depuesto mientras se encontraba en el campo.
La ley de sucesión al trono de Grecia fue definida por un artículo complementario de la Conferencia del 7 de mayo de 1832, adjudicándole el Trono de Grecia a Otón I. Se instituyó un orden semisálico como una regla importante para evitar la unión de la corona en la misma cabeza con cualquier otra corona, especialmente con la de Baviera. Bajo los términos de la ley de sucesión, una pretensión de los Wittelsbach al trono habría pasado por la muerte de Otto en 1867 a su hermano menor Leopoldo, que fue regente de Baviera desde 1886 hasta 1912, y después de él a Luis, que se convirtió en el rey Luis III de Baviera en 1913. En este punto, tal reclamación se hace imposible, ya que la misma rama de los Wittelsbach se convirtió en heredera de ambos tronos, y posteriormente el monarca o el pretendiente debería haber hecho una renuncia a uno de los dos tronos, algo que ninguno hizo. Al final, ni Leopoldo ni su hijo Luis persiguieron activamente su pretensión al trono griego heredado de Otón I, y el trono de Baviera sí desapareció en 1918, dejando el futuro de la pretensión a que se decidiera por un nuevo acuerdo, algo que nunca ocurrió.[3]
Rama bávara
José Fernando de Baviera, Príncipe de Asturias, era el heredero favorito de Inglaterra y los Países Bajos para suceder a Carlos II de Austria como gobernante de España. El propio rey de España hizo testamento a favor del joven para que fuese su sucesor. Pero, debido a la inesperada muerte de José Fernando en 1699, los Wittelsbach no pudieron alcanzar la corona de España por vía directa: Felipe V de Borbón era Wittelsbach por parte de madre.
El parentesco patrilineal o agnaticio del duque Francisco está formado por la línea que desciende de padre a hijo, per virilem sexum. Era el principio tradicional que seguían las casas reales que aplicaban las leyes hereditarias de los Francos Salios para la transmisión de los derechos dinásticos y suponía la exclusión de las mujeres de la línea sucesoria.