En 2018, la revista France Football estableció en su honor el Trofeo Kopa al mejor jugador menor de 21 años, galardón que se entrega cada año en París junto al Balón de Oro.[1]
Trayectoria
Inicios en Francia
Nació el 13 de octubre de 1931 en Noeux-les-Mines (Norte-Paso de Calais, Francia). Hijo de emigrantes polacos adquirió la doble nacionalidad francopolaca en 1949. Desde los dieciséis años recibía una pensión tras el accidente que sufrió cuando trabajaba en una mina de carbón situada en Noeux-les-mines al norte de Francia[2] y en el que se le tuvo que amputar el dedo índice de su mano izquierda.
Siendo prácticamente un niño ingresó en el equipo de su localidad natal, allí se convirtió en la figura y fue inscrito en un concurso nacional de jóvenes jugadores promovido por la Federación Francesa de Fútbol en 1949, llegó hasta las finales, pero no pudo vencer por su baja estatura. Curiosamente dicha circunstancia pueda llevar a creer que le perjudicó en sus inicios, pero para nada, puesto que al ser más pequeño tuvo que afinar y desarrollar más otros aspectos como su extraordinaria agilidad y su inteligencia.
A la edad de dieciocho años tuvo que elegir entre la nacionalidad francesa y el pasaporte polaco, y decidió, para mayor comodidad, acortar su verdadero nombre, Kopaszewski. Su repertorio de regates, fintas y su juego imprevisible le valió para ganarse el apodo de "Napoleón", debido sin duda a su gran poder y a su menuda estatura.
Comenzó su carrera como profesional en el SCO Angers, en el que permaneció dos años, tiempo suficiente para demostrar su calidad y para que el Stade de Reims se fijara en él y se hiciera con sus servicios en 1951. En el conjunto francés de Reims jugó en dos etapas de su carrera y en la primera de cinco temporadas, ganó dos ligas hasta 1956, año en el que se marchó al Real Madrid donde consiguió los mayores éxitos de su carrera.
Antes de su llegada al Madrid Kopa dejó una importante huella en el Stade de Reims, donde disfrutó e hizo disfrutar a todos con aquel preciosista "fútbol-champagne" del Reims. Un fútbol que conjuntaba el acierto rematador de Léon Glovacki o Bliard con el toque y la clase de Raymond Kopa o Henri Michel entre otros.
Estuvo presente con Francia en la Copa Mundial de Fútbol de 1954 en Suiza, en el que debutó como mundialista un 16 de junio en Lausana, en un encuentro ante Yugoslavia en el que Francia cayó por un gol a cero. Posteriormente y pese a que Francia fue eliminada, Kopa llegaría a hacer su debut goleador en la victoria sobre México, 3-2. En aquel Mundial formó en la media junto a dos compañeros suyos del Reims: Léon Glovacki y André Strappe.
Si Fontaine fue máximo goleador, Kopa recibió el galardón de Mejor Delantero, a quien un jurado internacional también eligió Mejor Jugador. En 1962 jugó su último partido internacional con su selección, ante Hungría.
Éxitos internacionales en el Real Madrid C. F.
Su primera toma de contacto con la casaca blanca del club madridista se produjo con motivo del homenaje de despedida a Luis Molowny, donde comenzó el particular idilio entre el Real Madrid y la estrella gala. Curiosamente su llegada al Madrid se produjo pocas horas después de que el 13 de junio de 1956 el conjunto blanco se impusiera al francés en la final de la primera edición de la Copa de Europa. Atraídos por el juego de Kopa, los dirigentes madridistas ficharon al francés que, con la camiseta blanca, se alzó con dos ligas españolas (1957 y 1958) y tres Copas de Europa (1957, 1958 y 1959).
Kopa tuvo que adaptarse a una nueva posición en la zona diestra, pero la inteligencia era una de sus muchas cualidades y no tuvo ningún problema en colocarse el número 7 a la espalda para que Alfredo Di Stéfano siguiera siendo el director de orquesta del Real Madrid. Elegante, fino y habilidoso, era el encargado de retener el balón cuando su equipo atravesaba apuros. “Bastaba con pegar un pelotazo a Gento o dársela a Kopa, que él la pisaba, y la pisaba, y la pisaba, y nunca la perdía”, relataba Marquitos sobre el "fransuá", como le llamaban cariñosamente sus compañeros del vestuario.
El equipo lo agradeció y Kopa contribuyó a que el conjunto blanco continuara con su dominio en España y Europa. En 1958 recibió el galardón del Balón de oro al mejor jugador europeo del año.
En la historia del fútbol habrá habido, posiblemente, pocos jugadores de ataque como estos: Kopa, Enrique Mateos, Di Stéfano, Rial, Paco Gento, Joseíto y Ferenc Puskás, pese a que Puskás llegó ya en el último año de Kopa como jugador madridista, siendo mítica la delantera: Kopa, Rial, Di Stéfano, Puskás y Gento.
Vuelta a su país y retiro
Tras su brillante paso por el Madrid, Kopa vuelve al Stade de Reims en 1959, donde vuelve a conquistar dos títulos de liga y donde permanece hasta su retirada al filo de los 36 años en 1966, cuando se proclamó campeón de la D2 francesa.
A su retirada en 1966 ocupó el cargo de entrenador. De 1969 a 1970 fue nombrado asesor técnico de la selección nacional de su país. Los reconocimientos no han cesado de premiar a su legendaria figura, fue elegido segundo mejor jugador francés del siglo XX por IFFHS y 3.er mejor jugador francés del siglo XX por France Football. Además se convirtió en el 1.er jugador de fútbol francés en recibir la Legión de Honor, el 30 de noviembre de 1970.
Vida personal
El Napoleón del Fútbol, uno de los mejores jugadores Europeos de todos los tiempos. Jugador rápido, habilidoso y gran especialista en los pases y asistencias. Un futbolista de gran elegancia, talento e inteligencia, sabía parar el partido pisando y escondiendo la bola como un maestro y era capaz de desequilibrar en el momento necesario.