Su trazado data de 1857 y fue proyectada por Manuel de Oraá y Arcocha. Su nombre viene del por el entonces Príncipe de Asturias, Alfonso XII. Se construyó sobre el huerto del convento de San Pedro de Alcántara, en la entonces trasera de la iglesia (actualmente Iglesia de San Francisco).
Curiosamente, en 1852 el ayuntamiento tiene noticias de que la Capitanía General quiere comprar ese solar para establecerse allí, pero el dueño se encontraba en Cádiz y se negó a vender; no fue hasta 1857 cuando se efectúa la operación de compra de los terrenos por un total de 90.000 reales pagados al contado.[1]
El 29 de octubre de 1860 se inaugura la plaza del Príncipe Alfonso, que fue su nombre original, aunque en ese momento sólo se había corregido el desnivel existente y no era más que una explanada.
La plaza
A la entrada de la plaza, hay dos estatuas procedentes de Génova que representan la Primavera y el Verano. También destaca un templete central, aunque en origen, lo que existía era una fuente, que fue sustituida en 1929 por el quiosco actual, y numerosos laureles de Indias (Ficus nitida), algunos de ellos plantados el 29 de octubre de 1860 y que fueron enviados desde Cuba.[1]
Más recientemente, en la última década del siglo XX, se instaló, en uno de sus laterales, un grupo escultórico denominado Courage, obra de Hanneke Beaumont de 1995, realizado en bronce y acero, cuyas dimensiones son 280 x 85 x 85 cm y 165 x 520 x 255 cm. Este grupo escultórico destaca por su representación escénica; está compuesto por cuatro figuras humanas distribuidas en dos grupos enfrentados; uno de los grupos lo forman tres figuras y el otro una sola.