Montejaque, cuyo nombre, Monte-Xaquez significa "montaña perdida", es de origen árabe como lo demuestran sus intrincadas callejuelas.
Hubo durante esta época una alcazaba medieval que daba una visión de gran parte de la Serranía. Durante la ocupación árabe Montejaque gozó de una notable importancia. Hubo una vez un castillo que ya no existe. Esta construcción desapareció completamente, quedando sólo su nombre en la Finca El Castillo. Otro de los lugares históricos de este municipio es el lugar conocido como "El Puente", donde aún podemos ver los restos de un puente romano sobre el río Campobuche.
Tras la reconquista a manos de los Reyes Católicos el pueblo fue entregado al Conde de Benavente al cual nombraron Señor de Montejaque y Benaoján dejando de pertenecer a los arrabales de Ronda.
Más tarde durante el levantamiento del pueblo morisco de la zona en el siglo XVI, se produjeron varios atentados contra el alcalde moriscoMohamad Idriz, por simpatizar con las tropas cristianas.
Al viajero, no se le puede escapar una visita a la iglesia de Santiago el Mayor, construida a principios del siglo XVI y reformada durante el siglo XVIII. Su principal estilo es gótico tardío, del que se conserva la bóveda de terceletes, que cubre el
presbiterio.
Perderse por las estrechas calles que componen esta población, típicamente andaluza, es un verdadero placer, conservando la vitalidad de un pueblo moderno, pero con unas profundas raíces que nos hacen viajar a épocas pasadas.
Mezclarse con sus tranquilos pobladores y conocer típicas historias es algo que nadie debiera perderse. Sus fiestas destacadas son una en el mes de mayo y otra en el mes de agosto.
Geografía humana
Demografía
Cuenta con una población de 952 habitantes (INE 2024).
Gráfica de evolución demográfica de Montejaque[3] entre 1842 y 2021