Gaspar de Teves y Tello de Guzmán (1608-1673), I conde de Benazuza, I marqués de la Fuente –título otorgado por Felipe IV el 26 de febrero de 1633–,[1] gentilhombre de cámara de la Casa del Rey, tras haberlo sido del Cardenal-Infante, caballero de la Orden de Santiago,[2] alcalde mayor de Sevilla y su escribano del juzgado, de sus rentas y comisiones,[3] señor del heredamiento de Lerena y acemilero mayor de Felipe IV. Considerado uno de los mejores diplomáticos del siglo XVII, fue embajador de Felipe IV en Venecia, el Sacro Imperio y Francia.[4][5]
Hijo primogénito de Melchor de Teves y Brito, del consejo y cámara de Castilla, y de Mariana Tello de Guzmán, señora de Benazuza y Lerena. En la corte madrileña circularon rumores que lo hacían hijo ilegítimo del conde-duque de Olivares, y atribuían a ello su ascenso, aunque ya Marañón descartó en su día tales infundíos, asociándolos a los enemigos de Gaspar de Guzmán.[6] Por vía paterna, era nieto de Gaspar de Teves, quien había sido caballero de la portuguesa Orden de Cristo. A su vez, su familia materna, los Tello de Guzmán, eran poseedores de grandes mayorazgos, entre ellos, los señoríos de Benazuza y Lerena. Así mismo, su abuelo, Pedro Tello de Guzmán, fue caballero de Santiago, alcalde mayor de Sevilla y secretario mayor del juzgado de dicha ciudad. [5] Casó en 1631 con Úrsula Fernández de Córdoba, hija de Antonio Fernández de Córdoba, marqués de Valenzuela, en cuyo nombre como «marido y conjunta persona» pleiteó en Granada el mismo año de la boda por una pensión alimenticia con Ana de Mendoza, madre y curadora de la beneficiaria de la pensión, Luisa Jacinta de Córdoba.[7]
Con una larga carrera diplomática, pues había servido en una misión en Alemania ya en 1633 y como embajador itinerante ante los Estados italianos en 1639, en diciembre de este último año acudió como embajador a la Dieta de Ratisbona, momento en el que celebró una primera entrevista en Viena con el emperador de la que dio cuenta detallada a Madrid.[8] Embajador en Venecia de 1642 a 1656 –puesto en el que fue anfitrión de Velázquez en su segundo viaje a Italia–, fue a continuación nombrado embajador extraordinario ante el rey de Suecia y Dinamarca para tratar de mediar en su litigio con Polonia,[9] aunque simultáneamente se le ordenó dirigirse a Viena para tratar de reforzar los ejércitos de Flandes y Milán y allí recibió, en noviembre de 1656, el nombramiento de embajador ordinario ante el emperador Fernando III.[10] Permaneció en este puesto hasta 1661, cuando fue designado embajador en Francia en sustitución del conde de Fuensaldaña, iniciando su misión en febrero de 1662 con orden de aplacar a Luis XIV ofreciéndole una satisfacción por un incidente diplomático sucedido en Londres entre el embajador de España, Charles de Watteville, y el de Francia, que el rey francés parecía dispuesto a convertir en casus belli.[11] En septiembre de 1662 salió de París con nombramiento de embajador extraordinario ante la Dieta imperial de Ratisbona, pero a medio camino se le ordenó retornar a París al surgir desavenencias entre el papa y Luis XIV, que reclamaba el apoyo de España en su disputa con la Santa Sede.[12] Pasando apuros económicos y mal de salud, receloso de las intenciones del rey de Francia y de su mala voluntad con España, en enero de 1665 pidió su relevo, aunque todavía le tocó asistir a los funerales por Felipe IV en París. En enero de 1666 fue nombrado consejero de Estado. Sin embargo, hasta el mes de junio no recibió la licencia para abandonar París y aún hubo de esperar hasta agosto de 1667 la llegada de su relevo,[13] llegada que no se produjo al estallar la guerra de Devolución, por la que finalmente sería expulsado de Francia y canjeado en la frontera de Bidasoa por el embajador de Francia en Madrid, el arzobispo de Embrun, Georges d'Aubusson de la Feuillade.[14] Una vez en Madrid se casó en segundas nupcias con Ana de Portocarrero, marquesa viuda de Espinardo, calificada de intrigante por el embajador alemán conde de Pöting y de aficionada a la modas y adornos de París por Gabriel Maura Gamazo, «a fin de seducir, más que al Marqués, a los galanes jóvenes de la Corte».[15]
Conservando el favor de la regente, consejero de Estado y de Indias, murió en Madrid el 15 de julio de 1673. El mayor de sus hijos, Gaspar de Teves Tello de Guzmán y Córdoba (fallecido en Madrid el 12 de mayo de 1685), segundo marqués de la Fuente, siguió los pasos de su padre ocupando las embajadas de Venecia de 1666 a 1676 y de Francia de 1680 al 1 de enero de 1684, cuando por una nueva ruptura de relaciones tuvo que abandonar París.[16]