Felipe Pedro de Borbón y Saboya (Madrid, 7 de junio de 1712 - ibidem, 29 de diciembre de 1719) fue un infante español, hijo de Felipe V,[2] primer rey de la dinastía borbónica en España, y de su primera esposa la princesa María Luisa Gabriela de Saboya.[2] Fue malogrado dado que murió a los siete años de edad.[3]
Felipe Pedro nació siendo el tercer hijo varón y segundo superviviente del rey Felipe V y la reina María Luisa Gabriela. Nació la mañana del 7 de junio de 1712, en Madrid, tres años después de la muerte de su hermano mayor y homónimo de nombre, el infante Felipe Pedro, que había muerto a los dieciséis días de nacido. Su otro hermano superviviente sería el futuro rey Luis I de España.
Poco después de un año, se unió a él un hermano, el infante Fernando. Felipe tenía el pelo rubio y ojos azules, igual que sus parientes. Su padre y su madre eran primos, lo que hace a Felipe un ejemplo de la endogamia dentro de la familia real española. Pocos meses después del nacimiento, su madre se enfermó de tuberculosis y sucumbió ante la enfermedad el 14 de febrero de 1714 quedando huérfano cuatro meses antes de su segundo cumpleaños.[2] Poco después su padre se casó con Isabel Farnesio y esta despreció a sus hijastros aislándolos, por lo que los tres hermanos quedaron muy unidos. El 25 de agosto de 1716, festividad de San Luis, rey de Francia, fue bautizado solemnemente en la iglesia del Monasterio de San Jerónimo el Real de Madrid junto con sus hermanos Fernando y Carlos. Los padrinos de Felipe fueron Luis XV de Francia y Francisca María de Borbón, duquesa consorte de Orleans; representados respectivamente por su embajador en Madrid, Paul-Hippolyte de Beauvilliers, duque de Saint-Aignan y la princesa consorte de Robecq, Marie Philippe de Croÿ.[4]
El 24 de diciembre de 1719 Felipe ya estaba gravemente enfermo y murió el 28 de diciembre. Su padre arregló su entierro, siendo sepultado el 20 de enero de 1720 en El Escorial.[2]