Durante un tiempo en el siglo XX se usó como depósito para la dinamita empleada en las obras de los alrededores.[3]
La ermita fue restaurada en 1997 por el mosen Lemiñana, que la salvó de la ruina total.[2][4][5][6] Durante la restauración se colocó en el exterior un altar para celebrar misa de campaña.[6][3]
Descripción
Tiene una única nave y cierra al este con un ábside semicircular con saetera con doble derrame, todo construido con sillar bien escuadrado y ajustado. La nave se cubre con una bóveda de cañón a partir de un arco apuntado. En el centro de la bóveda se encuentra un recio fajón que apea en ménsulas empotradas y ayuda a soportar la techumbre moderna, cubierta de pizarra. En la parte inferior, recorriendo ambas paredes, se encuentran bancos corridos de piedra.[5] En el tramo de los pies existía en su momento un coro en alto y un gran vano adintelado en arco de medio punto, por el que se entraba al coro desde el exterior.[5] El acceso fue cerrado posteriormente transformándolo en un óculo abierto de tamaño excesivo, dejando huellas del cambio en la fábrica del muro.[6][3]
La entrada se realiza por la pared de la fachada sur por una portada sencilla coronada de medio punto dovelado.[2] Guesos mechinales indican que es posible que existiera un porche o pórtico exterior. Para acceder al nivel del templo hay que descender dos escalones.[6]
En el interior se encuentra una pequeña reproducción policromada de una imagen románica de la Virgen de Rocamora y un pequeño altar.[6]
Referencias
↑«Aulet». Gran Enciclopedia Aragonesa. Archivado desde el original el 6 de septiembre de 2016. Consultado el 24 de febrero de 2021.