La diócesis de Trenton (en latín: Dioecesis Trentonensis y en inglés: Roman Catholic Diocese of Trenton) es una circunscripción eclesiástica de la Iglesia católica en Estados Unidos. Se trata de una diócesis latina, sufragánea de la arquidiócesis de Newark. Desde el 1 de diciembre de 2010 su obispo es David Michael O'Connell, de la Congregación de la Misión.
La diócesis tiene 5584 km² y extiende su jurisdicción sobre los fieles católicos de rito latino residentes en 4 condados del estado de Nueva Jersey: Burlington, Mercer, Monmouth y Ocean.
La sede de la diócesis se encuentra en la ciudad de Trenton, en donde se halla la Catedral de Santa María de la Asunción. En Freehold se encuentra la Concatedral de San Roberto Bellarmino.
En 2020 en la diócesis existían 99 parroquias.
La diócesis fue erigida el 2 de agosto de 1881, tomando el territorio de la diócesis de Newark (hoy arquidiócesis).
El 9 de diciembre de 1937 cedió una porción de su territorio para la erección de la diócesis de Camden mediante la bula Ad maius animarum del papa Pío XI.[1]
El 19 de noviembre de 1981 cedió otra porción de su territorio para la erección de la diócesis de Metuchen mediante la bula Qui benignissimo del papa Juan Pablo II.[2]
Inicialmente sufragánea de la arquidiócesis de Nueva York, el 10 de diciembre de 1937 pasó a formar parte de la provincia eclesiástica de la arquidiócesis de Newark.
En 1956 la catedral fue destruida por un incendio provocado por un pirómano. Tres personas murieron en el incendio.
La diócesis estuvo involucrada en el escándalo del abuso sexual de cinco monaguillos y su propia sobrina por parte del sacerdote Ronald Becker, quien trabajó en las parroquias de la diócesis de 1979 a 1989 y fue destituido de sus funciones en 2002. En 2009 y 2011 la diócesis acordó pagar a las víctimas del abuso de Becker $ 1.3 millones de dólares para finalizar dos demandas separadas.[3][4]
El 3 de diciembre de 2016, con el decreto Ut spirituali de la Congregación para los Obispos, la iglesia de San Roberto Bellarmino de Freehold fue elevada al rango de concatedral.[5]
Según el Anuario Pontificio 2021 la diócesis tenía a fines de 2020 un total de 893 280 fieles bautizados.