Se le debe el proyecto gráfico de la bandera de la República Portuguesa, en el que el verde representa la esperanza y el rojo la sangre derramada por el pueblo es sus muchas guerras.[1]
Su carrera literaria comenzó en 1885, con un libro de versos llamado Lira insubmissa («Lira insumisa»).
El año siguiente lanzó Germano, drama en verso en cinco actos. Propuesta a la dirección del Teatro Nacional, la pieza fue rechazada. Se originó una polémica a causa del artículo que Abel Botelho dirigió a los responsables por su no aceptación. Escribió más piezas de teatro posteriormente: Jacunda, comedia en tres actos de 1895; Claudina, estudio de una neurótica, comedia en tres actos, representada en el Teatro del Príncipe Real de Lisboa, en la fiesta artística de la actriz Lucinda Simões, el 18 de marzo de 1890; Vencidos de la vida, pieza satírica en tres actos, representada el 23 de marzo de 1892 en el Teatro del Ginásio; Parnaso, pieza lírica en verso en un acto, escrita para ser recitada por estudiantes en beneficio de la Caixa de Socorros a Estudantes Pobres, representada en el Teatro de São Carlos el 3 de mayo de 1894; y Fruta do tempo («Fruta del tiempo»), comedia escrita para la actriz Lucinda Simões en 1904. Tratando habitualmente asuntos escabrosos y delicado, como pedía el naturalismo, sus obras causaban escándalo, especialmente Imaculável («Inmaculado»), que terminó en un alboroto y abucheos, y Vencidos da vida, que no pudo seguir en escena por las críticas que vertía sobre el grupo literario que llevaba el nombre de la obra, además de ser considerada inmoral. Fue el origen de una polémica entre Abel Botelho y los responsables de la prohibición.
En 1891, Abel Botelho inicia el estudio de la sociedad portuguesa en la serie Patología Social, que debía ser un examen exigente y científico de los males que infestaban Portugal, sobre todo Lisboa, la capital y centro urbano de mayor prestigio. El primero fue O Barão de Lavos (1891), seguido de O livro de Alda (1898), Amanhã (1901), Fatal dilema (1907) y Próspero Fortuna (1910). O Barão de Lavos fue el primer libro escrito en lengua portuguesa que trataba el tema de la homosexualidad en Portugal.
Además escribió otros tres romances: Sem remédio... (1900), Os lázaros (1904), Amor crioulo (incompleto y póstumo; su título anterior era Idílio triste; 1919) y el libro de cuentos Mulheres da Beira (1898), que anteriormente habían sido publicados en el Diario de Noticias entre 1895 y 1896).