La sala de crisis dispone de un avanzado equipo de comunicaciones seguras para que el presidente pueda mantener el control de las fuerzas militares de los EE. UU. desplegadas a lo largo y ancho del mundo. No se debe de confundir con el Centro Presidencial de Operaciones de Emergencia, que está situado bajo el ala este de la Casa Blanca.
Origen y personal
La sala de crisis fue creada en 1962 por el presidente Kennedy tras el fallido intento de invasión de la bahía de Cochinos, atribuido a una carencia de información en tiempo real. La sala posee sistemas de comunicaciones seguras integrados en ella y las paredes están formadas por paneles de madera que ocultan los diferentes sistemas de audio, vídeo y demás. La sala también cuenta con tres relojes digitales que muestran la hora actual en Washington D. C. y en otros dos enclaves geográficos, generalmente en relación con eventos políticos delicados u otro tipo de acontecimientos.
La sala de crisis cuenta con personal compuesto por agentes experimentados pertenecientes a varias agencias de la Comunidad de Inteligencia y por oficiales militares de alta graduación. Estas personas hacen guardias de veinticuatro horas, monitorizando constantemente los acontecimientos mundiales y manteniendo convenientemente informado al personal experimentado de la Casa Blanca sobre los acontecimientos más significativos que ocurren en el mundo.
La renovación de 2006
A mediados del año 2006, la Casa Blanca comenzó a renovar la sala de crisis,[7] desmontándola por completo y agrandándola hacia el sur bajo el foso de arena que aísla la piscina de la Casa Blanca. Se añadieron pantallas planas y sistemas de comunicación más fiables. También se instalaron elementos tecnológicos y nuevos procedimientos para prevenir llamadas telefónicas y mensajes de texto desde teléfonos móviles sin autorización para hacerlo en la Sala. Se instalaron cabinas privadas para realizar llamadas seguras autorizadas. El Centro de Monitorización y Vigilancia fue remodelado con gradas de asientos que permiten una mejor visualización de los monitores y una mejor coordinación entre el personal. Por último, se crearon nuevas salas de videoconferencia en el nuevo espacio.
La sala de crisis en la ficción
En muchas películas y series de televisión, la trama transcurre en la sala de situación de la Casa Blanca. Algunas veces, se muestra como si fuese una especie de búnker, lo cual no se corresponde con la realidad, y normalmente también se muestra con un tamaño mucho mayor y mucho más avanzada tecnológicamente de lo que es en la realidad. Esto queda bien reflejado en la serie de televisión El ala oeste de la Casa Blanca.