Símbolos originales de la Confederación Americana de Venezuela, decretados en 1811 y usados hasta el 15 de febrero de 1812.
La Primera República de Venezuela es el nombre con que se conoce al «período histórico» transcurrido entre los años 1811 y 1812 en la historia de Venezuela. El período de la Primera República se inició después de que la Junta Suprema de Caracasdeclarase la independencia del país el 5 de julio de 1811. El nombre del país durante este período fue: Confederación Americana de Venezuela,[1] Estados de Venezuela,[2] Confederación de Venezuela,[2] Provincias Unidas de Venezuela,[3] Estados Unidos de Venezuela o Confederación Venezolana, estaba compuesta por las provincias que se adhirieron a la causa revolucionaria surgida tras la Revolución del 19 de abril de 1810, y tuvo como capital a la ciudad de Valencia con motivos de mantenerla como aliada a la pretensión independentista.
Con la declaración de la independencia y las campañas emprendidas por los republicanos se inicia la guerra de independencia. La Confederación venezolana cae definitivamente el 25 de julio de 1812 con la capitulación de San Mateo ante el jefe realista Domingo Monteverde, al haber vencido en su campaña por la recuperación del control del país, quién entra en Caracas el 30 del mismo mes, concluyendo así el período de la Primera República de Venezuela.
El 19 de abril de 1810, el Capitán General de Venezuela, Vicente Emparan es derrocado pacíficamente, al poco tiempo, se proclama la Suprema Junta Conservadora de los derechos de Fernando VII en nombre del depuesto rey Fernando VII. La Junta secuestra y reparte las rentas/ reales (3.000.000 pesos) destinados a la península como ayuda para la guerra contra los franceses.
Al principio, los bandos se autodenominaron patriotas y realistas. La Junta de Caracas notifica oficialmente a la Regencia que ha tomado la soberanía de su provincia, dado el estado de disolución del gobierno de España, que retendría y usaría ese poder hasta el regreso de Fernando VII o hasta que se formase en España un gobierno constituido por Cortes convocadas según las leyes, con la correspondiente representación de los reinos, provincias y ciudad de Indias.
Se formó un ejército para imponer el gobierno a la provincia de Maracaibo y al departamento de Coro, disidentes de la Junta Suprema de Caracas. Fernando Miyares fue nombrado Capitán General de Venezuela en papel el 29 de abril de 1810, es reconocido por el Ayuntamiento de Maracaibo el 23 de julio de 1810; el 11 de agosto de 1810 por el Ayuntamiento de Coro y el 7 de marzo de 1811 por el Ayuntamiento de Guayana.[4] Los realistas de Coro derrotaron a los patriotas caraqueños y la Regencia declara el bloqueo de las costas de Venezuela, enviando a la fragata Cornelia y a la corbeta Príncipe con siete barcos menores, al mando del Capitán de Navío José Rodríguez de Arias. Llevaban también auxilio de dinero y armas para los realistas. Sin embargo, la Junta de Caracas es reconocida por los holandeses de Curazao, lo que dificulta el bloqueo. Los realistas entonces acudieron a los corsarios a fin de sabotear la pesca e impedir el comercio a la república.[5]
Un 5 de julio de 1811 la Junta de Caracas declara la independencia del territorio Venezolano, al que llama Confederación Americana de Venezuela.[1] Firman esta declaración Juan Antonio Rodríguez Domínguez como Presidente, Luis Ignacio Mendoza como Vicepresidente y Francisco Isnardi como secretario; y comienza una persecución de realistas. En los territorios realistas actúan igualmente contra los patriotas.
Las Provincias Guayana, Coro y Maracaibo permanecieron leales a la Corona española y Barinas, Trujillo, Mérida, Barcelona, Cumaná e isla Margarita se declararon leales a los independentistas.[6][7]
Consideración especial mereció la atención de los patriotas la provincia de Guayana, debido a sus abundantes recursos naturales y posición estratégica del río Orinoco.[8] El 5 de abril de 1811 los realistas obtienen una primera victoria contra los patriotas al tomar la guarnición de Cabruto, tomando represalias contra la población civil afecta a la causa independentista.[9]
En septiembre, los patriotas contraatacan la Guayana, tomando Santa Cruz, Soledad, Tabasca y Uracoa. Establecen baterías en las orillas del Orinoco para hostigar a Angostura,[10] a la que someten a fuego artillero durante dos meses, hasta que, 300 habitantes de las dos ciudades pasan el río en 26 embarcaciones, y, tras tres horas de combate cuerpo a cuerpo se apoderan de las posiciones y de la artillería de los realistas, que se baten en retirada.
Desestabilización de la Primera República
Insurrecciones
Poco después del 5 de julio de 1811 los ánimos estaban caldeados. Muchos realistas,leales caraqueños y canarios, realizaron un plan para retornar al estado anterior al 19 de abril de 1810, en la cual se alzarían varias poblaciones, entre ellas Valencia, Caracas y Los Teques, con el apoyo de la guarnición de Puerto Cabello y tropas españolas procedentes de Maracaibo que aún permanecía realista. Este plan fue delatado ante el congreso rebelde y el gobierno insurgente procedió a ejecutar arrestos entre los leales. Entre tanto, cuando se supo de la denuncia, se alzaron en Valencia y el 11 de julio se alzaron en Los Teques.[11]
En Los Teques un grupo de canarios, armados con trabucos, gritaban indignados por la deslealtad "viva el rey y muerte a los traidores" ,[12] y habían prometido liberar a los negros que se sumaran a la revuelta. Las autoridades rebeldes los sofocaron rápidamente, ayudados por la población armada de sables y cuchillos al que
ningún negro se sumó a la causa realista.
En Valencia el alzamiento legalista triunfaba y se proclamaba a Fernando VII. Los realistas habían levantado a las castas de la región con promesas de libertad e igualdad social, se le dio libertad a los negros e igualdad a los pardos que se sumaron a la revuelta,[13] y se le entregó armas al pueblo leal. Las promesas encontraron apoyo frente a la naciente república. El odio cultivado a través de siglos de los negros, pardos y demás castas hacia los blancos criollos, representantes del poder y la aristocracia,que son los que se rebelaron contra la legalidad hispana, originó múltiples deserciones tanto en el ejército rebelde como de la esclavitud en las haciendas de los insurgentes acrecentándose así las fuerzas realistas.[14]
En vista de la respuesta leal de Valencia el congreso rebelde decidió enviar a un numeroso ejército tras varios días de discusión entre los traidores insurgentes y los leales realistas. Eligieron al marqués Francisco Rodríguez del Toro al frente del ejército, muy probablemente en detrimento de Francisco de Miranda, ya que este era su enemigo.[15] El marqués fracasó en su intento de recuperar Valencia, por lo cual el congreso se vio obligado a elegir a Miranda por presión de los extremistas golpistas, quien tras tomar el control del ejército, fue víctima de intrigas y contraórdenes del congreso faccioso, pero pudo acabar con la oposición lealista en Valencia en una acción resuelta.
La ciudad es declarada capital de la República por el faccioso Congreso Nacional el 9 de enero de 1812, luego de ser sofocado el intento de retornar a la legalidad monárquica. A partir del 15 de febrero de 1812, la sede de dicho congreso pasa a ser la Casa de La Estrella en Valencia, trasladándose poco después los otros dos poderes creados por la Constitución facciosa de la época; asegurándose de esta manera el apego de la ciudad y de otras importantes poblaciones como Puerto Cabello, a los intereses insurgentes.
Caída de la Primera República
La Primera República tuvo una duración de aproximadamente 2 años de 1810 a 1812. El 8 de febrero de 1812 desembarcó en Coro Domingo de Monteverde quien releva a Miyares.[16] Los realistas, al mando del experimentado oficial, consiguieron derrotar, en julio de 1812, a las tropas republicanas y hacer prisionero a Francisco de Miranda.
Domingo Monteverde
Con la llegada en 1812 de Domingo de Monteverde, España comienza a restablecer su dominio sobre la provincia a través de las tropas realistas, lo cual disolvió el congreso recién instalado en Valencia. Este hecho fue aprovechado por los valencianos partidarios de la Corona para ocultar la acción de Valencia durante los hechos del 19 de abril de 1810 y así solicitar el establecimiento de la capital provincial en Valencia,[17] alegando la necesidad de alejar las instituciones reales de la Caracas fiel a los ideales independentistas. De esta forma, nace una profunda división entre los valencianos que se irá difuminando durante los hechos que marcaron la Guerra de Independencia, durante la cual la ciudad tomará una firme posición en las tropas independentistas y convirtiéndose en el escenario de muchos de los más importantes sucesos de la Independencia. Para neutralizar esta ofensiva, el gobierno republicano de Caracas había nombrado al general Francisco de Miranda como comandante en jefe del Ejército, quien estableció el grueso de sus tropas en Valencia y Puerto Cabello.[18] Camino de Caracas, durante el denominado proceso de Reconquista, Monteverde fue sumando cada vez más voluntarios a su ejército, produciendo un repliegue de las fuerzas patriotas, al mando de Miranda.
El 26 de marzo de 1812 un terrible terremoto en Venezuela azota al país, afectando especialmente a las ciudades en manos de los patriotas; Caracas y La Guaira fueron casi destruidas.[19] Puesto que era Jueves Santo, una gran cantidad de personas se encontraban en las iglesias; por lo que hubo muchos que quedaron sepultados. También el ejército sufrió bajas.[20] Monteverde aprovecha este suceso para tomar Cabudare sin dar un solo tiro.
Capitulación de San Mateo: Fin de la República
Por su lado, Monteverde siguió avanzando, incorporando nuevos combatientes entre los simpatizantes realistas. El 30 de junio los realistas presos en el castillo de San Felipe de Puerto Cabello (que estaba comandado por Simón Bolívar), se sublevan al mando del Alférez Francisco Fernández Vinoni y entregan la plaza a los realistas. Las fuerzas patriotas del Generalísimo Francisco de Miranda eran incapaces de pasar a la ofensiva por las constantes deserciones que se daban en sus fuerzas situación agravada por el Terremoto del 26 de marzo, además de la impopularidad de la causa de la independencia en la sociedad venezolana.
Miranda intentó resistir el ataque realista pero la caída de la plaza de Puerto Cabello, la rebelión de los esclavos de Barlovento así como el creciente número de los ejércitos españoles que lo atacaban, Domingo de Monteverde desde Valencia y José Antonio Yáñez desde Calabozo, le hicieron imposible continuar la contienda. Temiendo una derrota brutal y desesperado, Miranda firmó la capitulación del ejército patriota el 25 de julio de 1812 en la ciudad de San Mateo marcando el fin de la Primera República.[21] Monteverde entra triunfalmente en Caracas el 30 del mismo mes restituyendo la Capitanía General de Venezuela.
Fernández Duro, Cesáreo (1972). ARMADA ESPAÑOLA, desde la unión de los reinos de Castilla y Aragón. Museo Naval de Madrid.no fue con la misma
Notas
↑Algunos consideran que el período de la Primera República tuvo su inicio con la instalación de la Junta Suprema de Caracas, que si bien mantenía la fidelidad absoluta hacia rey Fernando VII de España, esta gobernó las provincias que se adhirieron a ella de manera autónoma.
↑Villatoro, Manuel (16 de marzo de 2018). «El brutal «castigo divino» que permitió al Imperio español aplastar a la Primera República de Venezuela»(html). ABC (periódico). Archivado desde el original el 16 de marzo de 2018. Consultado el 17 de julio de 2018. ««Miyares había sido nombrado Capitán General de Venezuela por la Junta Central el 29 de abril de 1810; fue reconocido como tal por el Ayuntamiento de Maracaibo el 23 de julio de 1810; por el de Coro el 11 de agosto y por el Ayuntamiento de Guayana el 7 de marzo de 1811», explica Edgar Esteves González en su libro «Batallas de Venezuela, 1810-1824».»
↑Díaz Ordoñez, Manuel. «La Real Armada y el control del Orinoco en la primera parte de la independencia venezolana: la Batalla de Sorondo»(pdf). Armada Española. Archivado desde el original el 17 de julio de 2018. Consultado el 17 de julio de 2018. «Junto a las acciones anfibias de represalia, los españoles utilizaron el corso particular como fuente de financiación y como medio para negar el uso del mar a los rebeldes. En este sentido, Puerto Rico se significó como una base avanzada de buques corsarios que patrullaban las costas de Venezuela para impedir el comercio, el transporte y la actividad pesquera. (...) Bajo su dirección, lanchas y pequeñas embarcaciones patroneadas en su gran mayoría por catalanes, identificados con cédulas de corso expedidas por las autoridades de la provincia de Guayana, atacaron el comercio de la joven república.»
↑Villatoro, Manuel (16 de marzo de 2018). «El brutal «castigo divino» que permitió al Imperio español aplastar a la Primera República de Venezuela»(html). ABC (periódico). Archivado desde el original el 16 de marzo de 2018. Consultado el 17 de julio de 2018. «Tras la declaración de independencia, la región quedó totalmente dividida. Por un lado, las provincias de Guayana, Coro y Maracaibo se mantuvieron leales a Fernando VII y al Consejo de Regencia que gobernaba en su nombre en la zona. Por otro, Barinas, Trujillo, Mérida, Barcelona, Cumaná e isla Margarita (todas ellas ubicadas en las cercanías de Caracas) declararon su rechazo a la monarquía.»
↑Díaz Ordoñez, Manuel. «La Real Armada y el control del Orinoco en la primera parte de la independencia venezolana: la Batalla de Sorondo»(pdf). Armada Española. Archivado desde el original el 17 de julio de 2018. Consultado el 17 de julio de 2018. «Entre las autonomistas, además de Caracas, lo harán: Barcelona el 27 de abril, Cumaná el 30 del mismo mes, Margarita el 4 de mayo, Barinas el 5, Mérida el 16 de septiembre, y Trujillo el 9 de octubre (2). Como consecuencia, en el mapa venezolano sólo tres provincias, Maracaibo, Coro y Guayana, se mantendrían fieles a la metrópolis a través de su obediencia a la Regencia.»
↑Díaz Ordoñez, Manuel. «La Real Armada y el control del Orinoco en la primera parte de la independencia venezolana: la Batalla de Sorondo»(pdf). Armada Española. Archivado desde el original el 17 de julio de 2018. Consultado el 17 de julio de 2018. «Guayana era una enorme extensión de territorio y contaba con una riqueza considerable a la que Caracas no podía renunciar: una cabaña ganadera vacuna y caballar de gran importancia, cientos de haciendas con una gran producción de maíz, tabaco, arroz, trigo y café; además de contar con grandes recursos, minerales preciosos y numerosos saladeros de carne. Productos que significaban importantes beneficios en el comercio internacional de la época. Todo lo anterior hacía imprescindible que Guayana se uniera al resto de las provincias independentistas.»
↑Díaz Ordoñez, Manuel. «La Real Armada y el control del Orinoco en la primera parte de la independencia venezolana: la Batalla de Sorondo»(pdf). Armada Española. Archivado desde el original el 17 de julio de 2018. Consultado el 17 de julio de 2018. «Una de sus acciones más destacadas sería la del 5 de abril de 1811, cuando una fuerza de unos 200 españoles desembarcó en Cabruto, tomando por sorpresa a su guarnición (5). El comandante venezolano, teniente Francisco Pérez, el cura José de la Cruz González y algunos soldados más fueron tomados como prisioneros, al tiempo que se quemaron diversas haciendas de los propietarios que apoyaban la independencia».
↑Díaz Ordoñez, Manuel. «La Real Armada y el control del Orinoco en la primera parte de la independencia venezolana: la Batalla de Sorondo»(pdf). Armada Española. Archivado desde el original el 17 de julio de 2018. Consultado el 17 de julio de 2018. «Por su parte, los independentistas comenzaron a hostigar la orilla norte del Orinoco para presionar a los españoles. Sus fuerzas ocuparon enclaves importantes entre San Fernando de Apure y Barrancas y tomaron el pueblo de La Soledad, justo enfrente de la capital guayanesa de Angostura. Ya en la orilla cercana a esta última población se levanta un pequeño cerro que los rebeldes fortificaron con tres cañones, que atacaban cualquier barco español que se acercara por el río y quedara a su alcance. El 25 de agosto, en esta improvisada batería, se izaba la bandera independentista venezolana, lo que aclaraba cualquier duda sobre sus intenciones a los españoles que la contemplaban desde Angostura (10).»
↑Díaz, José Domingo. Recuerdos Sobre la Rebelión de Caracas.
↑POUNDENX, H, Mémoire pour servir à l'Histoire de la Révolution de la Capitainerie Générale de Caracas. De l'Abdication de Charles IV jusqu'au mois d'Août 1814. Paris, 1825
↑Damas, Eligio (4 de julio de 2008). «Fragilidad de la Primera República 1811 - 13. Cosas de la Lucha de Clases (II)»(html). Aporrea. Archivado desde el original el 5 de julio de 2008. Consultado el 17 de julio de 2018. «La república de 1810-11, tomó decisiones, como el establecimiento del comercio libre, que favorecieron a los grupos económicamente más sólidos, pero también a pequeños comerciantes, entre quienes contaban los pardos, pero en materia de esclavitud a lo máximo que llegó fue a la declaración de la ilegalidad de la importación de mano de obra de este carácter; decisión que por cierto, no se cumplió con rigidez o celo. Políticamente, la Junta Conservadora de los Derechos de Fernando VII o Junta Suprema de Caracas, dispuso que para participar en la elección de los miembros del primer Congreso de Venezuela, era condición indispensable, además de ser libre, gozar de un determinado nivel de renta, lo que excluyó del ejercicio de esos derechos no sólo a los esclavos sino a la mayoría de la población. El Congreso de 1811 ratificó esta disposición en la primera Constitución de Venezuela; lo que contribuirá al desprecio popular por la causa rebelde republicana.»
↑USLAR PIETRI, Juan, Historia de la Rebelión Popular de 1814.
↑Villatoro, Manuel (16 de marzo de 2018). «El brutal «castigo divino» que permitió al Imperio español aplastar a la Primera República de Venezuela»(html). ABC (periódico). Archivado desde el original el 16 de marzo de 2018. Consultado el 17 de julio de 2018. «Mientras Miranda andaba a vueltas con la alta política, el gobernador de Coro (al norte de Venezuela), Francisco Ceballos, fue informado de que las fuerzas realistas ocultas en Corora (una de las plazas cercanas a esta urbe) iban a sublevarse en nombre de Fernando VII. La oportunidad no podía desperdiciarse, así que el político ordenó a uno de sus hombres más reconocidos, el capitán de fragata de 38 años Domingo Monteverde, acudir en ayuda de los insurrectos y enlazar posteriormente con Miyares. «Monteverde desembarcó en Coro el 8 de febrero de 1812, enviado por las autoridades españolas de Puerto Rico en ayuda de Miyares, con una Compañía de Marina integrada por 120 soldados y tres oficiales bajo su mando», desvela Esteves en su obra.»
↑Contreras, Juan Carlos. «¿Contra el Rey o contra Caracas? La encrucijada de Valencia entre 1808 y 1812»(html). Universidad de Carabobo. Archivado desde el original el 10 de febrero de 2012. Consultado el 17 de julio de 2018. «De nuevo restablecida la autoridad de España, en 1812, el partido realista de la ciudad, renacido, trató de sacar provecho de la insurrección de 1811, escondiendo la colaboración autonomista con Caracas del 19 de abril de 1810. Valencia, decían los realistas, había reaccionado tarde, pero había demostrado, con sangre, su fidelidad a la monarquía, por lo tanto, merecía no sólo conservar sus fueros y privilegios autonómicos, sino que optaba a más, ahora, a la capitalidad de la Capitanía General de Venezuela, desplazando por completo a las "facinerosos e infieles" caraqueños. Su insistencia en la capitalidad fue reclamada en tres ocasiones a partir de 1812.»
↑Villatoro, Manuel (16 de marzo de 2018). «El brutal «castigo divino» que permitió al Imperio español aplastar a la Primera República de Venezuela»(html). ABC (periódico). Archivado desde el original el 16 de marzo de 2018. Consultado el 17 de julio de 2018. «El terremoto frustró tanto a los generales venezonalos que el mismísimo Simón Bolívar cargó contra los elementos aquel día a voz en grito: «Si se opone la naturaleza, lucharemos contra ella y haremos que nos obedezca». Al militar, no obstante, este tragedia le ayudó a forjarse la imagen de benefactor del pueblo.»
↑«Primera República de Venezuela»(html). Escolares Net. Archivado desde el original el 20 de septiembre de 2017. Consultado el 17 de julio de 2018. «Este sismo de jueves santo, que tuvo una duración de menos de un minuto, destruyó por completo la ciudad de Caracas, casas, iglesias, hospitales, etc., con este suceso natural la población fue presa del pánico, por su parte la iglesia católica presente en América desde la conquista, estableció que este movimiento telúrico, era consecuencia directa de un tormento divino ocasionado por desconocer el poder del Rey Fernando VII. Ejércitos patriotas completos fallecieron en este terremoto, todo esto más los daños estructurales, favorecieron al General Domingo Monteverde, para restablecer el poder de los realistas, sin embargo, Simón Bolívar, dijo: “Aunque la naturaleza se oponga lucharemos contra ella y haremos que nos obedezca”.»
↑«Primera República de Venezuela»(html). Escolares Net. Archivado desde el original el 20 de septiembre de 2017. Consultado el 17 de julio de 2018. «La capitulación de San Mateo, fue una negociación establecida por Francisco Miranda y los realistas con el fin de terminar con el conflicto entre ambas partes, resguardando principalmente el bienestar de los republicanos. (...) Sin embargo, a pesar de dejar en una capitulación establecidos los puntos, el General español y jefe de los realistas Domingo Monteverde, no respeto el acuerdo, violando la capitulación y comenzando una sangrienta persecución hacia los patriotas lo que trajo como consecuencia directa la destrucción total del acuerdo.»