La península Calcídica, en la Antigüedad clásicaquersoneso Calcídica (en griego: Χερσόνησος Χαλκιδική),[1] es una península localizada en el norte de Grecia que se adentra en el mar Egeo. Los griegos llamaban a esta zona «el paraíso secreto de Grecia».
Bañada por el mar Egeo, está delimitada por varios de sus golfos y mares: el golfo de Salónica, al suroeste; el mar Egeo propiamente dicho, al sur; y los golfos Estrimónico y Ierisos del mar de Tracia, al noreste. Su extremo meridional está formado por tres estrechas penínsulas paralelas que son, de oeste a este, las de Cassandra o Palene, Sithonia y Aktè separadas, respectivamente, por los golfos Toronáico y Singitico. En el norte, la península está delimitada por una depresión alargada que une los golfos Termaico y Estromónico y en la que se sitúan los lagos Koronia y Volvi.
El nombre de la península hace referencia a la ciudad de Calcis en Eubea, de donde eran de los primeros colonos (siglo VIII a. C.).[2]
En el periodo arcaico, los calcidios de Eubea, los eretrianos, los andrios y los corintios, atraídos por los recursos de madera y metal de la Calcídica, se instalaron en varias colonias:
↑A partir de la voz de quersoneso, de Χερσόνησος Khersonêsos, derivada de χέρσος, Khersos, 'el continente' y νῆσος, nêsos, 'isla') que quiere decir 'península'.