El paseo Calviá (en catalánpasseig Calvià) es un paseo peatonal, deportivo y temático que se extiende por el municipio español de Calviá, en la isla de Mallorca.[1] Consiste en el mayor parque lineal de Europa.[2] Está considerado como el pulmón verde del municipio.[3] El paseo une y recorre la mayoría de sus núcleos de población a lo largo de 32 kilómetros, algunos de ellos parte de la antigua carretera C-719.[2] Su filosofía se basa en priorizar el tránsito viandante. En su creación se tuvo en cuenta facilitar la conexión peatonal y ciclista entre los núcleos de población del municipio, así como elemento revalorizador de la oferta turística, y también como forma de conectar caminos y rutas turísticas alternativas que penetran el interior de las localidades y su litoral.[4][5] Con un presupuesto básico de 255 000€, comenzó a construirse en 2003.[6]
Recorrido
Los núcleos de población implicados en su recorrido son los siguientes:[1]
Su diseño mantiene una temática que se adapta a la idiosincrasia de las distintas zonas por las que transcurre, cambiando de estilo según la historia del lugar e incluyendo ornamentos representativos.[1] Los elementos de apoyo decorativo incluyen bancos, papeleras, iluminación nocturna continua, aparatos de gimnasia, árboles, juegos e insignias (como la roca que se instaló inaugurando las obras del tramo de Son Ferrer y el molino de Santa Ponsa). Algunas rotondas principales han sido decoradas con un enorme número de varios metros de alto, otras con marjada y olivos, y otras con estatuas con inscripciones de la historia del lugar. El paseo atraviesa los núcleos de población más importantes, llegando a bordear la costa entre bahías y pequeñas calas. En la localidad turística de Santa Ponsa, se extiende hasta el monumento del conquistador Jaime I.