Un parataxón es un taxón artificial usado para clasificar los fósiles de aquellos tipos de restos o señales de actividad de seres del pasado que, por su estado incompleto o disociado del organismo productor, no se pueden adscribir a una especie determinada.[1][2] Se utilizan sistemas parataxonómicos para clasificar hojas, troncos, raíces, esporas, huevos, icnitas, coprolitos, conodontos, etc.
Las clasificaciones parataxonómicas siguen las mismas pautas jerárquicas que las taxonómicas, así se establecen paraespecies, paragéneros o parafamilias.
Dadoxylon es un ejemplo de parataxón. Es un género definido a partir de madera fósil, que se asemeja mucho al género actual Araucaria, pero que también es similar a ciertas coníferas del Mesozoico y cordaitales del Carbonífero, es decir, los restos fósiles de Dadoxylon los pueden producir varios tipos de plantas.[3] También hay ejemplos de organismos que pueden originar varios parataxones. Por ejemplo, un trilobites con su variada actividad sobre el sustrato podía generar diferentes parataxones de icnitas.[4]
Para los huevos fósiles se usa un sistema parataxonómico de clasificación, donde se definen oofamilias y oogéneros de parataxones, y que incorporan a sus nombres el término latino oolithus (huevo de piedra) para facilitar su identificación (Spheroolithus, Patagoolithus, etc.).[5] Esta clasificación se basa en criterios como la forma, el tamaño, la ornamentación o el grosor que presentan los huevos fósiles.[6]