Los pueblos moravos tienen su origen en la Europa Central. La primera mención histórica de este pueblo data del año 822, cuando el sucesor de Carlomagno, Ludovico Pío, convoca una asamblea en Fráncfort y a esta acuden los moravos y duques bohemos (checos). Era llamada morava porque el punto de unión de los eslovacos, bohemios y moravos.[1]
Religión
Los principales dioses de los antiguos moravos eran:
Byelobog (dios blanco): dios de la luz, la suerte, la belleza y de la felicidad. Dios benefactor y bienhechor.
Chernabog (dios negro): dios de la oscuridad y la maldad.
Veles: dios del agua, la agricultura y el inframundo.
Se sabe que tenían varias técnicas. Las tropas se componían de infantería pesada. También había un grupo de minoría llamado Druzhina. Se caracterizaba por sus impenetrables fortificaciones.