La historia de la creación del Ministerio de Hacienda se remonta a los primeros meses después de celebrada la primera Junta Nacional de Gobierno, el 18 de septiembre de 1810. El 17 de mayo de 1811, siendo presidente de la Junta Gubernativa Fernando Márquez de la Plata, ordenó crear las Salas de Guerra, de Gobierno y Policía, y de la Real Hacienda.[4]
No fue sino hasta el 14 de marzo de 1814 cuando el primer director supremo de Chile, Francisco de la Lastra, nombró como primer Secretario de Hacienda a José María Villarreal Osorio. Tal como señalan los historiadores Patricio Bernedo, Ricardo Couyoumyian y Pablo Camus, José María Villarreal es, con propiedad, el primer ministro de Hacienda de Chile. Le sucedieron los secretarios de Hacienda Bernardo de Vera y Pintado y Manuel Rodríguez Erdoíza, hasta el desastre de Rancagua de los días 1 y 2 de octubre de 1814.[5]
Luego de la batalla de Chacabuco, librada el 12 de febrero de 1817, el director supremo Bernardo O'Higgins creó las carteras de Gobierno y Guerra.[4] Para la primera de ellas nombró a Miguel José de Zañartu Santa María quien al poco andar representó el recargo de trabajo que le significaban los demás temas de Hacienda, por lo que O’Higgins —desde Concepción— dispuso la orden para que el que director supremo interno Hilarión de la Quintana nombrara a Hipólito de Villegas, ministro de la Tesorería General de Santiago en aquellos días, como encargado en comisión de los asuntos de Hacienda.[4]
De esta forma, el 2 de junio de 1817 se creó el Ministerio de Hacienda. El nombramiento de Villegas quedó redactado de la siguiente manera:[4]
El Supremo Gobierno se ha servido nombrar a V., por vía de comisión, secretario de Hacienda, sin otro sueldo que el que goza por su empleo de Ministro de la Tesorería General.[4]
En septiembre de ese año se detalló el «Plan de Hacienda y de Administración Pública», redactado por el contador de la Tesorería General, Rafael Correa de Saa.[4] Los propósitos de este «Plan de Hacienda» consistieron en organizar los servicios públicos, fijar las rentas fiscales y su correcta recaudación, desligándolos de su dependencia de la Corona española.[4] Además, de salvaguardar ciertas garantías ciudadanas, como los procedimientos para la regulación de las contribuciones de guerra, respecto a la propiedad de empleos fiscales y honorarios, y cobro de las acreencias fiscales, entre otras regulaciones.[4]
El decreto con fuerza de ley n.º 7912 (Ley General de Ministerios, 30 de noviembre de 1927) estableció sus atribuciones y obligaciones.[4]
Misión y objetivos
La misión del Ministerio es «gestionar eficientemente los recursos públicos a través de un Estado moderno al servicio de la ciudadanía; generando condiciones de estabilidad, transparencia y competitividad en una economía integrada internacionalmente que promuevan un crecimiento sustentable e inclusivo».[6]
Asimismo, el Ministerio se dispone los siguientes objetivos:[6]
Aumentar de forma eficiente la recaudación pública en un marco de equidad tributaria y administrar responsablemente la política fiscal.
Diseñar y apoyar iniciativas que garanticen un crecimiento sustentable e inclusivo.
Participar activamente del proceso de modernización del Estado, velando por entregar servicios de calidad a la ciudadanía.
Estimular la integración económica internacional.
Organización
Subsecretaría de Hacienda o Secretaría y Administración General del Ministerio de Hacienda
La Subsecretaría de Hacienda el organismo de apoyo administrativo del Ministerio, cuyo jefe superior es el subsecretario, colaborador inmediato del ministro al que secunda jerárquicamente. Le corresponde coordinar la acción de los órganos y servicios públicos del sector, actuar como ministro de fe, ejercer la administración interna del Ministerio y cumplir las demás funciones que le señale la ley.[4]
↑ abBernedo, Patricio; Camus, Pablo; Couyoumdjian, Ricardo. (2014). «Historia de la Secretaría de Hacienda». 200 Años del Ministerio de Hacienda de la República de Chile: 1814 -2014.
Valencia Avaria, Luis (1986). Anales de la República: textos constitucionales de Chile y registro de los ciudadanos que han integrado los poderes ejecutivo y legislativo desde 1810 (2ª edición edición). Santiago de Chile: Editorial Andrés Bello.