El término masacre se usa para referirse a un tipo de homicidio premeditado, habitualmente de varias personas, caracterizado por la indefensión de las víctimas. La expresión es de origen francés (massacre) y es definida por el diccionario de la Real Academia Española como «matanza de personas, por lo general indefensas, producida por ataque armado o causa parecida». Por su parte, el Diccionario de uso del español, de María Moliner, define la palabra como «matanza salvaje de personas».[cita requerida]
Aunque el término masacre es impreciso en sus alcances, suele aplicarse a situaciones en las que existe una gran desigualdad de poder entre víctimas y victimarios, y los asesinatos se presentan como crueles, alevosos e innecesarios. Un sinónimo inglés de la expresión es butchery, es decir "carnicería". El sacerdote brasileño Leonardo Boff relaciona la masacre con la cobardía.[1] Los bombardeos de objetivos civiles y los atentados terroristas, son a veces calificados como masacres y en otras ocasiones no lo son, sin una razón clara para ello.[2][3][4][5]
Ocasionalmente se denomina hecatombe, como cuando los aztecas sacrificaron a 20,000 prisioneros de guerra para celebrar la inauguración de la sexta etapa del Templo Mayor, el 4 de diciembre de 1487.[6]
La masacre aparece en la antigüedad como un derecho del monarca, «porque el monarca construye su poder a partir de eso».[7] El investigador argentino José Emilio Burucúa, ha señalado que las masacres de la historia registran como elemento común la oscuridad de las causas que llevan a su realización: en las masacres «puede hablarse de detonantes, pero no de causas».[7] Heródoto, a su vez, decía que la masacre rompe con el tejido de las causas y los efectos.[7]
El concepto de masacre ha cobrado relevancia en los denominados genocide studies (estudios sobre genocidio), que se han extendido a partir de la sanción de la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio por las Naciones Unidas en 1948. Las investigaciones sobre genocidio y violación de derechos humanos se han concentrado en partir del hecho mismo de la masacre, para preguntarse «en qué circunstancias y bajo qué condiciones una masacre o una serie de masacres pueden convertirse en un genocidio».[10] En ese análisis, el psicólogo Israel Charny, llega a considerar que toda masacre es un genocidio, incluidos accidentes que están originados en un gran desprecio por la vida humana, como el de Chernóbil.[10]
↑«11-S: el día en que el mundo se detuvo». DW. 11 de septiembre de 2020. «A raíz de esa masacre, la política y la sociedad cambiaron para siempre, no solo en EE. UU., sino en todo el mundo.»
↑ abSemelin, Jacques (2004). «¿“Genocidio” o “masacre”?». Le Monde Diplomatique (Número 58, abril de 2004). Archivado desde el original el 24 de septiembre de 2015. Consultado el 14 de febrero de 2010.
Semelin, Jacques (2004). «¿“Genocidio” o “masacre”?». Le Monde Diplomatique (Número 58, abril de 2004). Archivado desde el original el 24 de septiembre de 2015. Consultado el 14 de febrero de 2010.