Marcelino Urquizo fue un político peruano.
En 1919, cuando el presidente Augusto B. Leguía dio inicio a su oncenio, fue elegido diputado por la provincia de Paruro para la Asamblea Nacional de ese año que tuvo por objeto emitir una nueva constitución, la Constitución de 1920.[1] Luego se mantuvo como diputado ordinario hasta 1924[2] durante el inicio del Oncenio de Leguía.
A inicios de los años 1920, Urquizo formó parte de una labor parlamentaria que apoyó a la Liga de Hacendados de las provincias cusqueñas en un pensamiento anti-indígena y en defensa de sus intereses.[3]
Referencias