Cactus que forma densos grupos de tallos cilíndricos, erectos o semipostrados de unos 6 a 15 cm de largo por 1,5 a 3,7 cm de diámetro. El cuerpo, verde vivo, está formado por cortos tubérculos (mamilas) cónicos (2 a 4 mm) terminados en areolas redondas y lanosas en los segmentos jóvenes, a diferencia de las axilas tuberculares que carecen de lanosidad. Tiene entre 15 a 30 espinas radiales cortas (6 a 12 mm), curvadas hacia fuera que se entrecruzan con las de las areolas próximas y 1 a 3 centrales (a veces ausentes) de color amarillo o dorado. Las flores surgen en la parte superior de los tallos, con pétalos dentados de color amarillo pálido o blanco, a veces con una línea central más oscura o rojiza de 1,5 cm tanto de largo como de diámetro. Los frutos son cilíndricos a globosos de color marrón o rojo con gran cantidad de semillas. Florece profusamente entre finales de invierno y principios de verano.[1]
Cultivo
Es un cactus de fácil cultivo, de crecimiento vigoroso y rápido. Se puede ubicar a pleno sol o bajo sombra ligera y tolera algún grado bajo cero si el sustrato está seco, aunque el mínimo de seguridad son +5 °C. Es muy sensible al exceso de riego. La multiplicación se realiza por hijuelos, que enraízan fácilmente.
Mammillaria: nombre genérico que fue descrita por vez primera por Carolus Linnaeus como Cactus mammillaris en 1753, nombre derivado del latínmammilla = tubérculo, en alusión a los tubérculos que son una de las características del género.
↑Ballester Olmos, José Francisco (1977). Roberto Guillén, ed. Los cactus y las otras plantas suculentas. Valencia: Floraprint España, S.A. p. 108. ISBN84-85382-00-5.