José Oriol (Barcelona, 1650-ibídem, 1702), santo católico, fue un sacerdote catalán. Venerado como santo por la Iglesia católica, tiene una particular devoción en Barcelona. Barcelonés de pura cepa, a pesar de su profunda espiritualidad, vivía plenamente la realidad de su tiempo. Se dice que tenía poderes proféticos y milagrosos. Se le atribuyeron curaciones de ciegos, sordos, cojos y paralíticos y la resurrección de muertos. Fue llamado "Taumaturgo de Barcelona". En una época en que la sanidad pública era inexistente y solo los ricos podían acceder a los profesionales de la salud, él se daba a los enfermos y los atendía con los medios que estaban a su alcance: les lavaba las heridas, les ponía ungüentos, les daba remedios caseros, los atendía y oraba con ellos. En junio de 1687 comienza a ejercer como beneficiado de la iglesia del Pi y, desde el primer momento, cada fin de mes cuando cobraba lo que le correspondía del beneficio, los pobres ya la esperaban en la puerta y él se lo repartía casi todo. Esta benéfica tarea y su austeridad, le llevaría a ser conocido como el doctor Pan y Agua.