La función de producción del suelo es un modelo cuyo objetivo es predecir la velocidad con la cual la roca madre se degrada por acción de fenómenos de erosión, dando lugar a la formación de la capa de suelo que la recubre. La meteorización desintegra las rocas existentes y desempeña un papel importantísimo en la creación de los suelos que cubren la superficie de la Tierra y sustentan toda vida.
Por lo general la función de producción del suelo determina la velocidad con que evoluciona la relación de meteorización de la roca madre (de/dt). El modelo general en boga queda expresado por una disminución exponencial en función del grosor de la capa de suelo por sobre la roca madre:
Dónde h es espesor de la capa de suelo [m], P0 [mm/año] es el índice de erosión potencial (o máximo) de la roca madre y k es una constante empírica.[1]
La reducción de la tasa de meteorización con el espesor del suelo a su vez está relacionada exponencialmente con la amplitud de temperatura con profundidad creciente bajo la superficie de tierra, y también la disminución exponencial en penetración de agua freática (para suelos que puedan drenarse). Los parámetros P0 y k está relacionados con clima y tipo de materiales de origen. Heimsath Et al. (1997) encontró que el valor de P0 estaría entre 0.08 a 2.0 mm/año para lugares como el Norte de California, y 0.05–0.14 mm/año para sitios como el sureste de Australia. Por otra parte los valores de k no varía significativamente, oscilando entre 2 a 4 m−1.[2]
Varios modelos de evolución del paisaje han adoptado el modelo humped (o jorobado del inglés).[3] Este modelo tiene su origen en El informe de la Geología de las Montañas Henry de G.K: Gilbert (1877). Gilbert razonó que la meteorización de la roca madre era más rápida bajo un grosor intermedio de suelo y más lenta en casos de roca expuesta o bajo capas gruesas de suelo. Esto se debe a que la meteorización química requiere la presencia de agua, y en los casos de roca expuesta el agua no infiltra y escurre, mientras que en suelos profundos el agua tiene menos opciones de alcanzar la roca madre.
↑Heimsath, A.M., Dietrich, W.E., Nishiizumi, K., Finkel, R.C., 1997. The soil production function and landscape equilibrium. Nature 388 (6640), 358–361
↑Heimsath, A. M.; Dietrich, W. E.; Nishiizumi, K.; Finkel, R. C. (1997). «The soil production function and landscape equilibrium». Nature388 (6640): 358-361. doi:10.1038/41056.