Eucharius Rösslin (Roslin, Rößlin), a veces conocido como Eucharius Rhodion, (ca. 1470 – 1526), fue un médicogermano autor de un libro sobre el parto llamado Der Rosengarten (El jardín rosa), en 1513, que se convirtió en un texto médico estándar para enfermeras obstétrico-ginecológicas.
A pesar de sus observaciones directas de las parterías de Worms, Rosslin incorporó la información obtenida de los escritores de la antigüedad como Mustio y Sorano de Éfeso. En el prólogo en verso al texto, Rosslin enfatiza la importancia del rol masculino en la reproducción y culpa a las parteras que, «por negligencia y descuido [...] destruyen a los niños a lo largo y ancho». Amenaza a las parteras con la advertencia de que Dios las llamará a la cuenta. «Y a las no parteras que le he pedido / ¿Podría decirme algo de su tarea? / yo me quedo con mi educación médica».[2]
El libro fue un éxito inmediato. Se publicó en idioma inglés en 1540 como The Birth of Mankind.[3] Para mediados del siglo XVI, había sido traducido a todos los principales idiomas europeos y pasó por muchas ediciones.
Rösslin regresó a su trabajo en Frankfurt en 1517, permaneciendo en tal cargo hasta su deceso en 1526.
Su hijo, Eucharius Rösslin el joven, sucedió a su padre como médico de la ciudad. Escribió un texto sobre minerales y su uso, y publicado con traducción al latín del libro de su padre De partu Hominis en 1532.
Der Rosegarten
Y cuando el tiempo de labor viene, in the same stoole ought to be put many clothes or crows in the backe of it, the which the midwife may remove from one side to another, according as necessity shall require. The Midwife her selfe shall sit before the labouring woman, and shall diligently observe and waite, how much, and after what meanes the child sitrreth itselfe: also shall with hands, first anoynted with the oyle of almonds or the oyle of those white lillies, rule and direct everything as shall seeme best.
Asimismo, la partera debe instruir y consolar a las parturientas, no sólo con refrescante bebida y buena comida, sino también con palabras dulces, dándole esperanza de una liberación, alentádolas a la paciencia y la tolerancia, la licitación que se celebrará en la respiración lo más que puede, también acariciando suavemente con las manos sobre el vientre, por que nos ayuda a no deprimir el nacimiento.[4]
Otras publicaciones
eucharius Rösslin, thomas Raynalde. 1545. The byrth of mankynde: otherwyse named The womans booke. Ed. Tho. Raynalde. 324 pp.