Las técnicas utilizadas por los autores que se encuentran son grabados, diferenciando el piqueteado y la incisión, no habiéndose encontrado restos de pintura en ninguno de los dos casos, si bien no se descarta su uso.[1]
Las dataciones del yacimiento tienen gran dificultad ante la ausencia de constatación o de técnicas de datación directa aplicables por lo que la tendencia es a utilizar una división en dos épocas, una paleolítica y otra post paleolítica, nombrada por algunos autores como fase escenográfica.[2]
La representación más llamativa del periodo paleolítico es un équido piqueteado, probablemente sobre un grabado previo, y cuyo estilo podría ser Solutrense o, por analogía con los grabados de Siega Verde y Foz Côa, más concretamente entre Solutrense superior y principios del Magdaleniense.[3]