Un automóvil de carreras está modificado para usarse en competencias de automovilismo. Según la disciplina y la categoría, un automóvil de carreras puede estar basado en un automóvil de calle o puede haber sido modificado específicamente para las carreras.
Los automóviles deportivos se caracterizan por ser más anchos largos y altos, muchos de estos son modificados especialmente para poder tener un mejor agarre al asfalto o para hacer Drift.
Tipos de automóviles de carreras
En las carreras en circuitos y rally es muy habitual utilizar turismos y deportivos, tanto porque las modificaciones necesarias sean escasas y económicas, porque las marcas de automóviles pueden publicitar sus modelos a la venta mediante campañas exitosas en este tipo de carreras. Cada categoría posee un reglamento técnico para restringir las modificaciones, que se llama homologación. La Federación Internacional del Automóvil determina homologaciones que se utilizan en todos los continentes, pero muchas categorías utilizan homologaciones propias.
Otro tipo de automóviles de carreras son los monoplazas y los sport prototipos, que poseen un único asiento y tienen muy poco que ver con los automóviles de calle. Los monoplazas son extremadamente angostos para reducir la superficie de rozamiento con el aire, y casi siempre utilizan alerones para aumentar la carga aerodinámica vertical. Otra variedad de prototipos de carreras son los siluetas, que poseen una carrocería similar a la de un automóvil de calle pero cuya mecánica es completamente distinta.
Configuración de carrera
En casi todas las categorías, los equipos tienen la posibilidad de modificar características del automóvil, para mejorar las carreras y adaptarse al trazado y a las condiciones meteorológicas:
Suspensión y dirección
Los muelles y amortiguadores de la suspensión puede endurecerse o ablandarse para mejorar el comportamiento en curvas y baches
El despeje al suelo y el recorrido máximo de la suspensión pueden ajustarse para modificar el comportamiento en saltos, baches y pendientes.
Los ángulos de caída y comba de las ruedas pueden modificarse, para inducir sobrevirancia o subvirancia.
La multiplicación y dureza de la dirección puede alterarse, por ejemplo para mejorar la precisión en curvas abiertas o para negociar horquillas con más facilidad.
Neumáticos y frenos
Los neumáticos pueden tener compuesto blando, medio o duro, y surcos de distinta profundidad y diseño (para la lluvia) o clavos (para la nieve y el hielo).
El sistema de frenos puede balancearse o en su lugar colocar discos de diámetro más grande o hiperventilados, todo esto para tener mayor circulación de aire dentro de los mismos y contribuir al enfriamiento del sistema de frenos.
Motor
Las distintas piezas se pueden reemplazar por otras más livianas, para aumentar el régimen máximo y alivianar al automóvil.
Los cilindros, filtros de aire, válvulas, entradas de aire y salidas de escape pueden aumentarse de tamaño.
La unidad de control de motor puede ser reprogramada o reemplazada para modificar el punto de encendido, la cantidad de combustible inyectado, el nivel de presión del sobrealimentador y del limitador de régimen.
Los sobrealimentadores y sistemas de inyección de óxido nitroso pueden agregarse en el caso de que no existan originalmente.
Otros elementos
Las marchas de la caja de cambios pueden acortarse o alargarse para equilibrar aceleración y velocidad máxima.
Los alerones pueden tener distinto tamaño e inclinación, para dar preferencia a la adherencia en curva o a la velocidad máxima.
El centro de masa del automóvil puede desplazarse hacia adelante o atrás (y hacia la izquierda y derecha en las carreras en óvalos).
En ocasiones los fabricantes suelen sacar al mercado una versión de serie del coche de carreras en una edición limitada y basada en su homólogo de competición, generalmente en tributo a un piloto o a una carrera. Entre otros ejemplos podemos encontrar:[1]
Porsche 911 Carrera: no fue una exactamente una edición limitada, pero la marca alemana lo sacó por los éxitos del coche en la Carrera Panamericana entre 1950 y 1954.
Subaru Impreza Series McRae: tras ganar el mundial de rally, Subaru sacó 200 unidades inspirado en el Impreza con el que Colin McRae logró el título.
Subaru Impreza RB5: al igual que el anterior se fabricaron 444 unidades en honor al regreso de Richard Burns al equipo japonés. En color gris, la primera unidad fue para el propio Burns.
Mitsubishi Lancer Tommi Makinen Edition: tras ganar cuatro títulos mundiales Mitsubishi lanzó en 2000 una edición limitada el Lancer Evo VI que rendía unos 276 cv.
Renault Clio Ragnotti: en 2002 Renault lanzó esta edición en honor al piloto francés Jean Ragnotti y basado en el Clio Sport del que se construyeron 300 unidades para el mercado francés.
Citroën C4 by Loeb: Citroën lanzó una edición limitada que sólo incorporaba añadidos estéticos.