Audio de alta gama

El audio de alta gama constituye una clase de equipo de sonido destinados a entusiastas del audio, caracterizados por su elevado costo y calidad, así como por su utilización de tecnologías singulares o innovadoras en la reproducción del sonido.[1]

El término puede hacer referencia tanto al precio como a la calidad de fabricación de los elementos, además de la calidad subjetiva u objetiva en la reproducción acústica.[2]

Definición

La distinción entre los términos alta gama y alta fidelidad no está bien definida.[3]​ Según un comentarista de la industria, la alta gama podría definirse como «equipo por debajo del cual no se podría ir en términos de precio y rendimiento sin comprometer la música y el sonido».[4]​ Es generalmente aceptado que el término de audio de alta gama fue introducido por Harry Pearson, el fundador de la revista The Absolute Sound.[5]

Costos

Amplificador de Line Magnetic. 22 vatios por canal, Diseño de tríodo de un solo extremo, Clase A pura con 845 tubos de potencia de salida.

Los dispositivos de sonido de alta gama pueden tener precios exorbitantes.[6][7]​ En ocasiones se los menciona como equipos en los que no se considera el costo. El equipo para audiófilos puede cubrir un amplio espectro de precios, desde opciones económicas hasta productos de gama alta.[8]

Evaluación del sonido

Amplificador MC275 - fabricado por McIntosh Laboratory en 1962.

La fidelidad de la reproducción de sonido puede evaluarse auditivamente o mediante mediciones del sistema de audio.

El sentido humano del oído es subjetivo y difícil de definir. La psicoacústica es una división de la acústica que estudia este campo.

Las mediciones pueden ser engañosas; cifras altas o bajas de ciertas características técnicas no ofrecen necesariamente una buena representación de cómo suena el equipo para cada persona. Por ejemplo, algunos amplificadores de válvulas producen mayores cantidades de distorsión armónica total, pero este tipo de distorsión (segundo armónico) no es tan molesto para el oído como las distorsiones de órdenes superiores producidas por equipos de transistores mal diseñados.[9]

La validez de ciertos productos a menudo se cuestiona. Estos incluyen accesorios como cables de altavoz que utilizan materiales exóticos (como cobre libre de oxígeno)[9]​ y geometrías de construcción, soportes para cables para levantarlos del suelo (como forma de controlar las vibraciones inducidas mecánicamente), conectores, sprays y otros ajustes.

Véase también

Referencias

  1. Branch, John D. (23 de mayo de 2007). «Postmodern Consumption and the High-Fidelity Audio Microculture». En Russell Belk; Russell Belk Jr.; John Sherry, eds. Consumer Culture Theory, Volume 11 (Research in Consumer Behavior) (1 edición). JAI Press. pp. 79-99. ISBN 978-0-7623-1446-1. 
  2. Perlman, M. (2004). «Golden ears and meter readers: The contest for epistemic authority in Audiophilia». Social Studies of Science 34 (5): 783. S2CID 146545243. doi:10.1177/0306312704047613. 
  3. «Johdatus hifiin ja high endiin». web.archive.org. 2 de septiembre de 2001. Archivado desde el original el 2 de septiembre de 2001. Consultado el 16 de agosto de 2023. 
  4. «WebCite query result». webcitation.org. Archivado desde el original el 16 de agosto de 2023. Consultado el 16 de agosto de 2023. 
  5. «Who invented high-end audio?». CNET (en inglés). Consultado el 16 de agosto de 2023. 
  6. «¿Cuáles son los mejores equipos de música para casa del 2023?». Cultura Sonora. Consultado el 16 de agosto de 2023. 
  7. Nast, Condé (14 de diciembre de 2018). «Las mejores marcas de alta fidelidad del mercado para escuchar música como un profesional». GQ España. Consultado el 16 de agosto de 2023. 
  8. «SOUND; How About a Pair of Loudspeakers Priced at $65,000? (Published 1987)» (en inglés). 30 de agosto de 1987. Consultado el 16 de agosto de 2023. 
  9. a b «The Truth About High End». Stereophile.com (en inglés). 9 de junio de 2007. Consultado el 16 de agosto de 2023. 

Enlaces externos