Assegonia —también conocida como Aseconia— fue una población romana situada en la actual Santiago de Compostela, concretamente en el área en torno a su catedral.[1]
Fuentes clásicas
El asentamiento nos es conocido por la reseña que de él realizan varias obras clásicas quienes la califican como mansio. El Itinerario de Antonino la denomina Assegonia mientras que el Anónimo de Ravena la llama Assegonion.[1] El Itinerario de Barro, por su parte, usa la denominación Aseconia.[1]
Historia
La población fue creada ex novo y no como continuación de un asentamiento indígena anterior.[2] Sus impulsores y habitantes eran individuos plenamente romanizados con alguna presencia de inmigrantes indígenas de otras áreas cercanas.[3] Nació en los inicios del siglo I junto a una de las vías de comunicación trazadas por los romanos con el fin de conectar las nuevas poblaciones que se fundaron en esta parte de la Tarraconensis.[4] Los restos arqueológicos localizados en el área circundante atestiguan un ambiente romanizado en la época de su creación.[4]
El asentamiento se mantuvo ocupado hasta el siglo V[5] y la tipología de la cerámica encontrada permite suponer que sufrió una lenta pero continuada decadencia económica.[6] En dicho siglo V, el enclave quedó prácticamente deshabitado ya que no se han encontrado restos materiales que denoten una presencia significativa de pobladores.[7] Esto se ha enmarcado en una desestructuración de la población provincial durante esa centuria con dispersión de la misma y menor utilización de las calzadas.[7]
El uso de su área funeraria sí continuó hasta el siglo VII y su superficie aumentó manteniendo una baja densidad de enterramientos.[8] Esta circunstancia se ha interpretado como señal de que algún asentamiento cercano permaneció habitado y que sus pobladores recurrieron durante un tiempo al cementerio de Assegonia para sus enterramientos hasta que finalmente, en el siglo VIII, dejaron de hacerlo.[9]
Características
Se estima que su configuración era alargada y que ocupaba poco más de una hectárea.[10] Se asentaba en una ladera y parece ser que las edificaciones se dispusieron de una manera planificada previamente.[2]
Debido a la reutilización de muchos materiales en las construcciones de la inicial Compostela, son pocos los restos encontrados de sus edificaciones originales:[11] muros cuyas características permiten suponer la existencia de construcciones de buena calidad;[11] los de una edificación —que contaba con un pozo—[12] y los de un área funeraria localzada extramuros.[13] En esta zona funeraria se situaba un mausoleo de planta cuadrangular rodeado, al menos en tres de sus lados, por paredes construidas con piedra.[13] La tradición cristiana sitúa en este edículo la sepultura de Santiago el Mayor.[13]
Aparte de estos restos de edificaciones, también se han encontrado restos de cerámicas tipo terra sigillata hispánica con probable origen en la zona de la actual Rioja; cerámicas pintadas provenientes de la meseta Central y cerámica de paredes finas similar a la que se fabricaba en el área de la actual provincia de Zamora.[14]
Un molde para fundir bronce y restos de este material permiten suponer la existencia de un taller de fundición.[2] Igualmente, las pesas de telar encontradas denotan alguna actividad textil.[2]
Localización
Por los restos arqueológicos encontrados, la moderna investigación determina que ocupó un área alrededor de donde se sitúa actualmente la catedral;[1] concretamente, el suelo de la misma, el claustro catedralicio, la plaza de Quintana, la calle Azabachería así como parte de las calles do Villar y Nova.[10]
↑R. Barros Silvelo en Antiguedades de Galicia (1875).[15]
↑Antonio Blázquez en Vía del Bierzo a Lugo (1923).[16] Benito Sáez Taboada en Aportaciones al trazado de la Vía 19 del Itinerario de Antonio a su paso por Galicia (2002).[17]
↑L. Monteagudo en Carta de Coruña romana, Emerita (1951).[18]
↑María del D.N. Estefanía Álvarez en Vías romanas de Galicia (1960).[19]
↑Arias Bonet en varios trabajos publicados entre 1987 y 1989.[20]
↑Raúl Villanueva González en Las vías romanas 19 y 20 del Itinerario de Antonino (2006).[21]