El estafiate es una hierba erecta que alcanza un tamaño de hasta de 1 m de altura. Tiene sus ramas de color gris o blanquecinas y sus hojas divididas en tres, con forma de listones alargados, por el envés son peludas y verdes en el anverso. Las flores son amarillentas acomodadas en cabezuelas numerosas que al estrujarse despiden un olor característico.
El Iztauhyatl, en náhuatl, es una planta a la que los antiguos mexicanos dieron un carácter divino. Su nombre significa, según algunos autores, ”agua de la deidad de la sal”; de ahí la relación con las fiestas religiosas realizadas en honor a los dioses del agua, en el mes Etzalcualiztli y en honor de Huixtocíhuatl, diosa de la sal en el mes tecuilhuitontli. Las danzantes ancianas y mozas llevaban en la cabeza guirnaldas de iztauhyatl, y las mismas yerbas portaban en la mano los devotos espectadores. Sin embargo, para algunos autores este nombre podría significar, etimológicamente, ”salada, amarga, su agua”.[2]
En la actualidad, entre los múltiples usos medicinales del estafiate, se recomienda a nivel nacional como eficaz para el tratamiento del dolor de estómago, llámense retortijones, cólicos estomacales o intestinales, jibas, dolor e inflamación en la boca del estómago, etcétera. Generalmente, se utilizan las ramas preparadas en cocimiento, que se toma cuando hay dolor. Algunas veces se acompaña de otras plantas como ruda (Ruta chalepensis), epazote de zorrillo (Dysphania graveolens), manzanilla (Matricaria chamomilla) y hierbabuena (Mentha piperita).[2] También forma parte de la composición del bíter, dándole su sabor característico.
Hay dos teorías en la etimología de Artemisia: según la primera, debe su nombre a Artemisa, hermana gemela de Apolo y diosa griega de la caza y de las virtudes curativas, especialmente de los embarazos y los partos . Según la segunda teoría, el género fue otorgado en honor a Artemisia II, hermana y mujer de Mausolo, rey de la Caria, 353-352 a. C., que reinó después de la muerte del soberano. En su homenaje se erigió el Mausoleo de Halicarnaso, una de las siete maravillas del mundo. Era experta en botánica y en medicina.[4]
Ajenjo, ajenjo del país, altamiza, altaniza, artemisia, azumate de Puebla, cola de zorrillo, ensencio de mata verde, epazote de castilla, estomiate, hierba maestra, hierba maistra, incienso, incienso verde, istafiate.[2]
Referencias
↑RHS A-Z encyclopedia of garden plants. United Kingdom: Dorling Kindersley. 2008. p. 1136. ISBN1405332964.