Aporocactus flagelliformis, conocida comúnmente como "cactus cola de rata",[2]es una especie de planta suculenta perteneciente al género Aporocactus, dentro de la familia Cactaceae. Es endémica de México y anteriormente se le conocía como Disocactus flagelliformis.[3]
Descripción
Aporocactus flagelliformis es una especie de cactus epífita, ya que crece sobre las ramas de los árboles, pero sin parasitarlos. Presenta muchos tallos de color gris verdoso, ramificados desde la base, colgantes o rastreros, delgados, cilíndricos y largos, de hasta un metro de largo y dos centímetros de diámetro. [4]
Tiene además, de ocho a trece costillas de seis a diez milímetros, con areolas poco esparcidas y equipadas con 15 o 20 espinas finas de color amarillo rojizo. Ocasionalmente también presenta raíces aéreas.
Las flores son de color rojo a rosa púrpura y alcanzan un tamaño de 5 a 8 centímetros de largo y de 2,5 a 4 centímetros de diámetro. Aparecen lateralmente y son ligeramente curvadas hacia arriba y zigomorfas. Los frutos son rojos, con una forma que va de esférico a erizado y de 1 centímetro de diámetro.
Distribución y hábitat
El área de distribución nativa de esta especie es el este y centro de México y crece principalmente en el bioma subtropical.
Taxonomía
Fue descrita por el botánico francés Charles Lemaire y publicada por primera vez en Ill. Hort. 7 (Misc.): 67 en el año 1860 .[3]
Aporocactus: Nombre genérico que deriva de la palabra griega: "aporia" (que significa "impenetrable") y "cactus", que se refiere a las plantas de este grupo.
Flagelliformis: Epíteto que deriva de las palabras latinas "flagellum" (que significa "látigo") y "formis" (que significa "en forma"), haciendo referencia a los brotes largos y delgados característicos de la especie.[5]
Se cultiva principalmente por todo el mundo como planta ornamental y su propagación de realiza normalmente a través de esquejes. De hecho, es uno de los primeros cactus que se introdujo en la cultura europea. En el siglo XVII ya se hablaba de él en los escritos, pero probablemente se introdujo mucho antes.
En el siglo XX, Maximino Martínez la reporta como antiparasitaria, rubefaciente para las afecciones cardiacas y eclampsia.[7]
Referencias
↑Hernández, H.M., Gómez-Hinostrosa, C. & Cházaro, M. 2013. [ Disocactus flagelliformis]. The IUCN Red List of Threatened Species. Version 2014.3. Downloaded on 24 May 2015.
↑Colmeiro, Miguel: «Diccionario de los diversos nombres vulgares de muchas plantas usuales ó notables del antiguo y nuevo mundo», Madrid, 1871.