Destinado desde joven al estado eclesiástico, fue arcediano de Cuenca, creado cardenal diácono de San Eustaquio en el consistorio del 22 de septiembre de 1408 y administrador de la diócesis de Salamanca. El 28 de noviembre de 1411 fue nombrado administrador de la diócesis de Osma y abad de la Colegiata San Miguel Arcángel (Alfaro), puestos que ocupó hasta su muerte. Nombrado obispo de Sigüenza en 1422, nunca residió en su diócesis.
Sin embargo, el 15 de diciembre de 1416 solicitaron a Benedicto XIII que abdicase y enviase una delegación al concilio, evitando así el cisma. Cuando el antipapa se negó, tras intentar convencer de nuevo al antipapa para que reconociese a Martín V, recientemente elegido por los cardenales del concilio, los tres cardenales se desvincularon de su causa y se pasaron al bando conciliarista. Benedicto XIII los llamó "hijos degenerados" y los desposeyó de su cardenalato.
Durante el papado de Martín V
El papa Martín V restauró a los tres cardenales en su dignidad en agradecimiento a sus servicios y el 16 de agosto de 1420 nombró a Alonso legado en Bolonia.
Participó en el cónclave de 1431 y asistió al concilio de Basilea, en el que ejerció una poderosa influencia.
Muerte y legado
Enviado por el concilio como vicario a Aviñón en 1433, murió poco después en su regreso a Basilea. Las exequias se celebraron en presencia del Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, los obispos y padres del concilio. En Castilla la noticia se recibió con profundo dolor:
«La muerte del Cardenal fue de gran daño en este tiempo, porque era un hombre muy notable y gran letrado, y servía mucho al Rey y sostenía a todos los castellanos que en aquellas partes iban. Hubo el Rey de su fallecimiento gran dolor y vistió paños negros, y asimismo la Reina y el Príncipe y todos los grans que en la Corte estaban».
Fue enterrado en la iglesia de los Cuatro Santos Coronados y después trasladado a la capilla mayor de la catedral de Sigüenza. Su sepulcro de mármol, labrado en Roma, está situado en una parte del muro derecho, encima de la puerta del trascoro.
Chacón, Alfonso (1930). Vitæ, et res gestæ Pontificvm Romanorum et S. R. E. Cardinalivm ab initio nascentis Ecclesiæ vsque ad Vrbanvm VIII. Pont. Max. Roma: Typis Vaticanis.
Eubel, Conradus, Gulik, Guglielmus van (1913). Hierarchia Catholica Medii et Recientoris Aevi Volumen I (1198-1431). Münich:Sumptibus et Typis Librariae Regensbergianae.
Chacón, Alfonso (1931). «"Essai de liste générale des cardinaux. VI. Les cardinaux du Grand Schisme (1378-1417)"». Annuaire Pontifical Catholique. Paris:Maison de la Bonne Presse. p. 156.